Salvini confirma que los migrantes del Diciotti bajarán en las próximas horas
- Serán acogidos por países como Albania e Irlanda, así como por la Iglesia Católica italiana
- Este sábado han desembarcado 12 migrantes del barco militar retenido en Catania por problemas de salud
El ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, ha confirmado que los 138 inmigrantes retenidos en el barco militar Diciotti desembarcarán en las próximas horas y serán acogidos por países como Albania e Irlanda, así como por la Iglesia Católica italiana.
"Algunos inmigrantes van a Albania, el gobierno albanés ha demostrado ser mejor que el francés. (...) El resto de los inmigrantes irán a uno o dos países más, pero la mayoría será acogida por los obispos de la Iglesia italiana", ha dicho Salvini durante un acto en la ciudad de Pinzolo.
Fuentes del Ministerio del Interior han confirmado que "dentro de poco comenzarán las operaciones de desembarco" y los inmigrantes "serán llevados a un centro de Mesina", en la isla de Sicilia, antes de que empiece su distribución hacia Albania e Irlanda y sean también acogidos por la Iglesia.
El portavoz de la Conferencia Episcopal italiana (CEI), Ivan Maffei, ha confirmado a la agencia de noticias Ansa que "la Iglesia italiana acogerá a un centenar" y ha subrayado que este acuerdo "pone fin al sufrimiento de estas personas".
El ministerio italiano no ha informado de cuántos acogerá Albania e Irlanda, pero el primer ministro irlandés, Simon Coveney, ha avanzado en Twitter que el país recibirá a "20-25 inmigrantes" del barco de los guardacostas italianos. "La solidaridad europea es importante y es lo correcto. El trabajo con el resto de países de la Unión Europea continua para encontrar más soluciones sostenibles", ha escrito.
Desembarcan 12 inmigrantes por problemas de salud
Además, este sábado doce migrantes, seis mujeres y seis hombres, han salido del Diciotti de la Guardia Costera italiana, que está atracado desde el pasado lunes en el puerto de Catania (en el sur de la isla de Sicilia) por problemas de salud. Así lo han confirmado fuentes del Ministerio del Interior de Italia, que no han dado más detalles.
Los migrantes han podido desembarcar después de que miembros de la oficina de Sanidad marítima de Catania hayan evidenciado -tras realizar controles médicos- que estas 12 personas sufrían problemas de salud.
Medios italianos, citados por la agencia Efe, aseguran que las mujeres fueron ingresadas en el departamento de ginecología. Allí, se sometieron a controles ya que "todas habían sido violadas en repetidas ocasiones en Libia", tal y como reveló la eurodiputada del Partido Demócrata (PD, centroizquierda), Michela Giuffrida, que ha estado este sábado en el barco.
Los hombres presentaban síntomas de tuberculosis y pulmonía, según la agencia de noticias italiana ANSA.
Los migrantes están en el barco desde el pasado 16 de agosto
De esta forma, un total de 138 personas se encuentran retenidas en este barco desde el pasado 16 de agosto, cuando esta embarcación se hizo cargo de 177 inmigrantes que habían sido socorridos por otros dos buques de la Capitanía de Puerto en aguas de Malta, según el Ministerio del Interior italiano.
Tras estar varios días sin puerto, y después de amenazar Italia con devolverlos a Libia, Roma autorizó su atraco en Catania, pero no su desembarco. Solo permitió que bajaran una treintena de menores.
Desde entonces presiona para que se logre un acuerdo en el seno de la Unión Europea para repartirlos por varios países, tal y como se hizo con el Aquarius. Al no llegar a ningún acuerdo, el país transalpino ha amenazado con reducir su aportación al presupuesto comunitario si no hay una solución.
La Fiscalía investiga el caso
Mientras, el fiscal de la ciudad de Agrigento (en el sur de Sicilia), Luigi Patronaggio, se ha reunido este sábado en Roma con funcionarios del Ministerio del Interior para investigar el caso. Patronaggio ha conversado con funcionarios del Ministerio italiano y con miembros de la Guardia Costera para conocer la evolución de la situación de estos inmigrantes.
La Fiscalía podría estar investigando si se han cometido delitos de detención de personas y arresto ilegal, e incluso abuso de poder, según informan medios italianos, según recoge Efe, aunque no hay confirmación oficial sobre ello. "Hay absoluta tranquilidad (en el barco) y no cambia la línea de la firmeza", han subrayado fuentes del Ministerio del Interior italiano.