Shane Black: "El nuevo Predator absorbe las habilidades de sus enemigos"
- El director ha estado en Madrid junto a los actores Boyd Holbrook y Olivia Munn
- “El protagonista no es como Schwarzenegger, sino como Steve McQueen en La gran evasión”, asegura Shane
- Predator se estrena el próximo 14 de septiembre
En 1987 Shane Black era un joven actor que se convirtió en la primera víctima del Depredador, en el clásico dirigido por John McTiernan y protagonizado por Arnold Schwarzenegger. 31 años después, es uno de los guionistas y directores más respetados de Hollywood y dirige una secuela que protagonizan Boyd Holbrook y Olivia Munn. Los tres han presentado la película en Madrid y hemos hablado con ellos.
El cambio más destacado de la película es la aparición de un nuevo Depredador, de tres metros de altura y mucho más terrorífico, como nos cuenta Shane Black: “En el último de los Mohicanos hay una idea que me inspiró. Hay un guerrero que se come el corazón de sus enemigos para absorber su energía y hacerse más fuerte. A mí se me ocurrió que hoy en día bastaría con un poquito de ADN para absorber a tu enemigo. Si pensamos que este nuevo depredador tiene acceso a los mejores guerreros que ha matado, creí que sería una estupenda idea que se más grandes, inteligentes y fuertes, actualizándose con esas capacidades de sus enemigos, a través de la ingeniería genética. Es una idea muy de ciencia ficción pero, a la vez algo muy antiguo, de la magia. Y me gusta esa combinación”.
“Al mismo tiempo –concluye-, es como hacer trampas, como los athletas que se dopan y se meten esteroides. Por eso creo que a los depredadores normales no les gusta lo que está haciendo este nuevo grupo. No están contentos con esa forma de dopaje y quieren detenerlos”.
31 años después
Shane nos cuenta que su decisión de volver a la saga de Depredador no ha sido solo por nostalgia: “Me llamaron de Fox para hacer la película. Y fue una gran sorpresa, porque habían pasado 30 años. Todo lo que pensé fue que lo pasamos genial con toda aquella gente en la jungla. En aquella época yo era muy inocente, me sorprendía todo, y no podía esperar a ver qué iba a pasar en mi carrera. Y quería volver a recuperar ese entusiasmo de entonces, a ser joven de nuevo. Y hacer una película divertida”.
Para el guion de esta nueva historia, Shane llamó a su amigo de la infancia y colaborador habitual, el guionista y director Fred Dekker (Robocop 3), para el que escribió la mítica Monster Squad (Una pandilla alucinante, 1987). “Le dije: “Vamos a ser niños de nuevo” -asegura-.
“Además -añade- yo formé parte de ese grupo de soldados de la primera parte y pensé que era mi oportunidad de crear mi propio grupo y rendir homenaje a la primera película. Así que hemos conseguido la misma hermandad, el mismo compañerismo, pero sin tanto músculo, ni armas grandes. Una de mis esperanzas es que, si John McTiernan ve la película, le guste este nuevo grupo que he creado. Incluyendo la chica y el niño”.
¿Un nuevo Schwarzenegger?
En estos 30 años de secuelas, el único que ha podido enfrentarse al Depredador ha sido Arnold Scharzenegger. Boyd Hollbrook tendrá esa misión en Predator. “La primera película era un producto de los 80 –asegura Shane-. Por aquel entonces triunfaban Arnold, Van Damme… Eso me encanta, pero queríamos que, en nuestra película, el espectador se identificara más con el protagonista”.
“Por eso -añade el director- nuestro grupo no es tan musculoso, sino que es casi marginal. Son una panda de inadaptados, incluso la científica y el niño no encajan en la sociedad. Han dado la espalda al mundo. Pero cuando se enfrenten al Predator, descubrirán lo que son capaces de hacer”.
Boyd Holbrook es Quinn McKenna
Boyd Holbrook (Narcos, Logan) es uno de los jóvenes actores más solicitados de la actualidad. Interpreta a un ranger militar de las fuerzas especiales retirado, que se ha convertido en un mercenario. Está distanciado de su mujer y su hijo, que es autista.
“Es un mercenario –asegura Boyd-, que tiene que ser fuerte física y mentalmente, pero atraviesa un mal momento porque su trabajo le ha hecho alejarse de su familia y de su hijo. Por eso, no sólo tendrá que enfrentarse al depredador sino también volver a convertirse en un padre para su hijo. Y lidiar con todas las complejidades de cuidar de un hijo que tiene necesidades especiales”.
Aunque en la película es un aguerrido héroe, Boyd confiesa que: “La primera vez que ví al depredador en el rodaje me asusté. Es muy impresionante. Incluso chocante”.
En cuanto a tener la difícil misión de sustituir a Arnold Schwarzenegger, Boyd asegura que: “Mi personaje es un buen soldado pero también un tipo muy normal. Es ella la que hace el papel de Arnold (asegura señalando a Olivia Moon)”
Olivia Munn, científica y heroína
Olivia Munn es la doctora Casey, una científica, que quiere estudiar a los depredadores pero que también es capaz de enfrentarse a ellos físicamente. “Es una doctora evolutiva –asegura- que quiere estudiar y comprender cómo cambian y evolucionan las criaturas. Cuando el depredador se escapa, aunque no tenga ninguna posibilidad de poder enfrentarse físicamente con él, no duda en perseguirlo. En estas películas suele haber dos tipos de personajes, los listos y los fuertes, pero ella encuentra la fortaleza para enfrentarse al depredador, y no lo tiene miedo. Tiene mucha fuerza, mucho coraje y valentía”
“Por eso –añade- al igual que una madre puede levantar un coche si está la vida de su hijo en juego, la doctora es capaz de luchar con el depredador. Hay algo en nuestro interior que nos permite afrontar grandes retos en un momento dado”.
Olivia nos ha contado cómo fue su primer encuentro con el Depredador: “Estaba regresando la oficina y sabía que el depredador estaba por allí pero no esperaba encontrármelo. Pero al girar la esquina me encontré de frente con él. ¡Y pegué un grito enorme! (lo demuestra gritando). Y dije: ¡Dios mío! El actor estaba practicando la forma de andar y los movimientos de la boca, con los expertos que controlaban la robótica… así que tenía la boca abierta, con saliva… Y estaba gruñendo (gesticula). Y empecé a gritar a todo el mundo que había un depredador suelto. ¡Fue muy divertido!"
El mejor extraterrestre después del de ‘Alien’
La génesis del primer Depredador es una de las historias más curiosas de Hollywood. Tras el éxito de Rocky IV, circulaba un chiste en Hollywood asegurando que como nadie de la Tierra era capaz de vencer a Rocky Balboa su próximo oponente debería ser extraterrestre. Los guionistas Jim y John Thomas decidieron tomarse en serio ese chiste y escribieron un guion que se llamaba Hunter (Cazador).
Los estudios decidieron encargarle la película al productor Joe Silver, que había convertido una serie b como Comando en un gran éxito. Y contrataron a un joven director que prometía, John McTiernan.
El extraterrestre iba a ser interpretado por un joven actor belga desconocido, Jean-Claude Van Damme, que decidió abandonar el papel porque no le dejaban demostrar sus habilidades en las artes marciales (buscadlo en internet porque veréis el primer diseño de la criatura y lo cutre que era todo).
Todo cambió cuando Arnold Schwarzenegger decidió llamar a su amigo Stan Winston, el mago de los efectos especiales, que diseñó al segundo mejor extraterrestre de la historia del cine (el mejor sigue siendo Alien). Por cierto que la idea de las mandíbulas del depredador se la dio James Cameron.
Gracias a Arnold, Winston y McTiernan, la película se convirtió en un clásico inmediato que daría lugar a cuatro secuelas: Depredador II (1990), Alien contra Depredador (2004), Alien contra depredador II (2007) y Predators (2010).
Este Predator (2018) es la mejor de todas. Una inteligente continuación de la saga en la que destaca el humor y los estupendos efectos especiales. Llegará a los cines españoles el viernes 14 de septiembre.