El presidente de Ruanda indulta a 2.140 presos, entre los que se encuentra su principal enemiga política, Victoire Ingabire
- Fue sentenciada en 2013 a quince años de prisión por conspiración, traición y colaboración con grupos terroristas
- Victoire Ingabire fue condenada también por incitar a la revuelta y negar el genocidio de 1994
El presidente de Ruanda, Paul Kagame, ha indultado a 2.140 presos, entre quienes destaca su principal enemiga política, Victoire Ingabire Umuhoza, detenida en 2010 por conspiración contra el Gobierno, traición y colaboración con grupos terroristas, y sentenciada en 2013 a quince años de prisión.
Ingabire, presidenta del partido Fuerzas Democráticas Unidas de Ruanda (FDU), fue condenada también por incitar a la revuelta mediante la creación de un supuesto grupo armado llamado Coalición de Fuerzas de Defensa (CDF) y negar el genocidio de 1994 al considerar que hubo un "doble genocidio" entre tutsis y hutus.
Asimismo, se le acusó de financiar a la milicia hutu Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) para establecer bases en la vecina República Democrática del Congo (RDC) y otros países del extranjero.
Antes de su condena, el FDU había acusado al Gobierno dirigido por Kagame de acoso, persecución y tratamiento inhumano y denigrante a sus miembros, a los que, según sus denuncias, asesinaban las fuerzas gubernamentales. Ahora, Ingabire recuperará su libertad después de que Kagame aprobase su liberación anoche.
El músico Kizito Imihigo, entre los indultados
Esta decisión no ha estado exenta de polémica: "Creo que la liberación anticipada de Victoire Ingabire Umuhoza es un error. Se debe decir a cualquiera que disemine la idea del doble genocidio y de las políticas étnicas que no será tolerado, y su liberación no lo hace", ha lamentado el analista político ruandés Christopher Kayumba en su cuenta de Twitter.
Junto a Ingabire será liberado el músico Kizito Imihigo, que fue condenado en 2015 a diez años de prisión tras declararse culpable de varios delitos, entre los que destacan la conspiración para asesinar a Kagame.
El jefe de Estado, antiguo líder de la milicia tutsi Frente Patriótico de Ruanda (FPR, convertida en partido y en control del país tras expulsar a los rebeldes hutus después del genocidio de 1994), dirige con mano de hierro esta pequeña nación del África oriental desde el año 2000.
En las elecciones de agosto de 2017, Kagame consiguió un nuevo mandato de siete años al obtener el 98,7% de los votos, pese a que organizaciones como Human Rights Watch (HRW) denunciaron importantes irregularidades. El Gobierno de Kigali también es acusado de arrestos extrajudiciales y de reprimir a la oposición y a los medios de comunicación.