La Fiscalía pide 4 años de prisión para el miembro de 'La Manada' Ángel Boza por el robo de unas gafas
- También pide 300 euros en concepto de multa y deberá indemnizar con 232 euros al vigilante herido
- Permanece en prisión preventiva desde que fue cometido por el robo y las lesiones
La Fiscalía de Sevilla solicita cuatro años de prisión y una multa de 300 euros para el miembro de de 'La Manada' Ángel Boza -condenado a nueve años de cárcel por abuso sexual a una joven en los Sanfermines de 2016- por robar unas gafas de sol en un centro comercial de la capital hispalense y por lesiones al embestir a dos vigilantes del establecimiento con su coche al huir del recinto.
En el escrito de conclusiones provisionales, el fiscal, que solicita la apertura de juicio oral ante un Juzgado de lo Penal, considera que los hechos por los que se investiga a Boza son constitutivos de un delito de robo con violencia e intimidación y un delito leve de lesiones.
Además, añade que procede mantener a Boza en prisión provisional, donde permanece desde el pasado 2 de agosto tras ser detenido la noche antes por estos hechos. Tras las diligencias prácticas, para la Fiscalía, considera probados los hechos y el acusado es "criminalmente responsable" de los delitos expresados anteriormente, en concepto de autor.
Por ello, el Ministerio Público considera que procede imponer a Boza la pena de cuatro años de prisión e inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena por el delito de robo y la pena de 50 días de multa con cuota diaria de 6 euros (300 euros en total), con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de 25 días de privación de libertad por el delito leve, además del pago de las costas.
Cabe recordar que el juez de Instrucción número 16 de Sevilla, Juan Gutiérrez Casillas, ha procesado a Boza al entender que existen "indicios racionales" de que habría cometido supuestamente un delito de robo con violencia con resultado de lesiones y utilización de instrumento peligroso.
Igualmente, el acusado, condenado anteriormente por delitos de conducción bajo influencia de bebidas alcohólicas, deberá indemnizar a uno de los vigilantes en lacantidad de 232 euros por las lesiones sufridas.
Los hechos, según la Fiscalía
En el relato de los hechos, el fiscal señala que Ángel Boza, sobre las 19.15 horas del pasado 1 de agosto, acudió al centro comercial El Corte Inglés de la Plaza del Duque de la Victoria de Sevilla, donde, "con la intención de hacerlas suyas sin abonar su importe, se apoderó, tras arrancar el dispositivo de seguridad que llevaban colocado, de un par de gafas de sol, cuyo precio de venta al público era de 148 euros".
A continuación, se dirigió a la zona de parking, donde tenía estacionado su vehículo, con el fin de abandonar las instalaciones, estando localizado en todo momento por el servicio de seguridad del establecimiento.
La Fiscalía en su escrito relata que el acusado, ya a bordo de su turismo, de la marca Opel Astra, y dispuesto a abandonar el parking, fue requerido por un vigilante para que se detuviera, momento en que Boza "con la intención de conseguir huir en poder de las citadas gafas de sol, aceleró bruscamente, golpeando a este vigilante en la cadera".
Boza consiguió darse la fuga, no sin antes "golpear en una mano" a otro vigilante cuando este se interpuso en su trayectoria "con el mismo objetivo de que el acusado detuviera su marcha", explica la Fiscalía.
En su relato de los hechos, el fiscal señala que Boza, poco después, tras circular por diversas calles, fue interceptado por efectivos de la Policía Local en la avenida Menéndez Pelayo de la capital, siendole intervenidas las gafas sustraídas sin daño alguno.
Como consecuencia de su acción, uno de los vigilantes sufrió contusión a nivel de pared abdominal derecha con hematoma subyacente, que precisó para su curación de una primera asistencia facultativa.
Boza estaba en libertad bajo fianza desde el 22 de junio -como los otros cuatro integrantes de 'La Manada'- a la espera de que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra resuelva los recursos sobre la condena de 9 años por abusos sexuales dictada por la Audiencia de Navarra.
Ante el juez reconoció el robo pero no la agresión a los vigilantes y su defensa solicitó su puesta en libertad, que el titular del Juzgado de Instrucción 16 de Sevilla rechazó, por lo que ha apelado a la Audiencia de Sevilla.