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Procesados cuatro de los cinco miembros de 'La Manada' por abusos sexuales en Pozoblanco

  • La jueza de la localidad cordobesa les atribuye delitos de abusos sexuales y contra la intimidad
  • Investiga los presuntos abusos en un coche a una joven de 21 años en Torrecampo en 2016

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Los miembros de 'La Manada' en las fiestas de San Fermín 2016
Los miembros de 'La Manada' en las fiestas de San Fermín 2016.

Una jueza de Pozoblanco, en Córdoba, ha procesado por abusos sexuales a cuatro de los cinco miembros de 'La Manada', según ha confirmado TVE. Los cuatro jóvenes están procesados por un delito de abusos sexuales y otro delito contra la intimidad contra una joven de 21 años en 2016. El auto judicial atribuye además a Antonio Manuel Guerrero, conocido como el 'Guardia Civil de La Manada', el delito de maltrato.

El caso ocurrió antes de la presunta violación a la joven en las fiestas de San Fermín de 2016 por la que los cinco integrantes de 'La Manada' están condenados a nueve años de prisión por abusos sexuales. Ángel Boza, en prisión acusado de un delito de robo con violencia, es el único miembro del grupo que no está investigado en este caso porque no estaba presente.

Los hechos investigados ocurrieron durante la Feria de Torrecampo en 2016, cuando los procesados se ofrecieron a llevar a una joven a su casa en Pozoblanco, un trayecto de unos 15 kilómetros de distancia. Durante el viaje, los jóvenes grabaron presuntamente parte de los abusos mientras la víctima dormía en la parte trasera del vehículo y, posteriormente, compartieron uno de los vídeos en un chat llamado 'Veranito'.

En el auto, al que ha tenido acceso TVE, la magistrada tiene en cuenta "la profunda inconsciencia que se aprecia en los vídeos sin que la víctima se despierte a pesar de los besos y tocamientos y de las risas de los investigados". De hecho, la joven declaró que se despertó sin tener conocimiento de "nada de lo ocurrido", por lo que la jueza ve "serios indicios" del uso de "sustancias específicamente destinadas para provocar la inconsciencia de la víctima".

La magistrada dictó una orden de alejamiento de 500 metros de la víctima contra los cuatro procesados en junio después de que la Audiencia de Navarra decidiese su puesta en libertad al no apreciar riesgo de fuega ni de reiteración delictiva.