Enlaces accesibilidad
Salud

Cada año se producen en España unos 30.000 casos de muerte súbita

  • La posibilidad de sobrevivir cuando se produce en la calle es "baja", entre un 5 y un 10 %
  • Creen que la cifra descendería con más desfibriladores en lugares públicos y con formación

Por
jornada de formación en resucitación cardiopulmonar y primeros auxilios
jornada de formación en resucitación cardiopulmonar y primeros auxilios

Cada año se producen en España unas 30.000 muertes súbitas; se trata de un fallecimiento inesperado y repentino de una persona aparentemente sana cuya principal causa es una arritmia que provoca una parada cardiaca. La posibilidad de sobrevivir cuando se produce en la calle es "baja", entre un 5 y un 10 %.

En los países nórdicos, la cifra de supervivencia llega al 30 %. Los expertos han achacado esta diferencia a que los españoles "no conocen bien" las maniobras de reanimación cardiopulmonar.

Por ello la Sociedad Española del Corazón y Cruz Roja ha elaborado el informe 'Muerte súbita y cardioprotección en España', presentado este miércoles en rueda de prensa, que pone el foco en la importancia de mejorar la tasa de supervivencia de muerte súbita y en el que se pide un Plan Interministerial de atención a la parada cardíaca.

Si un corazón se para, a los pocos segundos le falta riego al cerebro y el individuo se muere si no recibe una atención en los primeros minutos

El objetivo es fomentar la educación en maniobras de resucitación cardiopulmonar y en el uso de desfibriladores automáticos. "Si un corazón se para, a los pocos segundos le falta riego al cerebro y el individuo se muere si no recibe una atención en los primeros minutos", ha explicado el doctor Macaya. Por cada minuto que pasa la probabilidad de supervivencia disminuye en un 10 %; es decir, que al cabo de diez minutos las posibilidades son prácticamente nulas.

Muerte súbita en el deporte

Otras 1.000 muertes repentinas se dan cada año en jóvenes de 15 a 30 años, con un perfil deportista. En la mayoría de estos casos, según el doctor Macaya, el fallecido desconocía que tenía una enfermedad congénita como la miocardiopatía hipertrófica o arritmias primarias.

De hecho, hay un porcentaje de casos en los que la primera manifestación de la enfermedad cardiaca es la muerte súbita, ha precisado.

La escasa formación y la heterogeneidad de normas regulatorias en las distintas comunidades autónomas son dos de los motivos por los que la tasa de mortalidad es tan elevada en España.

La importancia de los desfibriladores

Los expertos coinciden en que la muerte súbita es un fenómeno socialmente dramático, ya que se trata de un fallecimiento que, a menudo ocurre en gente joven, que 24 horas antes del evento cardiaco se encontraba bien. Macaya ha explicado que existen "dos picos" importantes: uno en los niños de menos de un año por la inmadurez cardiaca y respiratoria, "y el otro más voluminoso", a partir de los 60 años.

En siete comunidades es obligatoria la instalación de desfibriladores en espacios públicos y privados, hablamos de Madrid, Andalucía, Asturias, Canarias, País Vasco y Comunidad Valenciana.

Conocer las maniobras de soporte vital básico está al alcance de todos los ciudadanos, ya que pueden aprenderse a través de un sencillo curso de pocas horas de duración.

El informe ha planteado implantar planes formativos en ciclos educativos y centros de trabajo. En algunos países europeos esta formación está muy extendida: más del 25 % de la población es capaz de empezar una reanimación cardiopulmonar, frente al 10 % de España.

La directora del departamento de Salud y Socorro de Cruz Roja, Carmen Martín, ha incidido en que "hay que hacer cosas porque estamos muy atrasados y con pocas cosas se pueden salvar muchas vidas". A la instalación de desfibriladores hay que unir la formación: "Necesitamos que los ciudadanos estén más formados e informados", ha señalado la responsable de Cruz Roja.