El Tribunal de la ONU ordena a EE.UU. paralizar parte de las sanciones contra Irán
- Irán podrá adquirir material médico, medicamentos y bienes relacionados con la seguridad de la población civil
- Su aplicación depende de la voluntad de los Estados y del Consejo de Seguridad, donde Estados Unidos tiene derecho a veto
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha dado este miércoles la razón a Irán de forma parcial. Al mismo tiempo ha ordenado a Estados Unidos paralizar parte de las sanciones contra Teherán. Unas sanciones que habían sido restablecidas por Washington al retirarse del acuerdo nuclear multilateral firmado en 2015.
Irán ha basado su denuncia en el Tratado de Amistad, Relaciones Económicas y Derechos Consulares firmado con EE.UU. en 1955, cuando ambos Estados aún gozaban de buenas relaciones.
La CIJ ha concluido, de forma unánime, que "la adquisición de material médico, medicamentos y bienes relacionados con la seguridad de la población civil" por parte de Irán son derechos que podrían estar cubiertos por dicho Tratado, dijo el juez presidente del tribunal, Abdulqawi Ahmed Yusuf.
Bienes relacionados con necesidades humanitarias
Por esa razón, la CIJ ha considerado que EEUU tiene la obligación de paralizar las sanciones relacionadas con "la libre exportación al territorio de Irán de bienes relacionados con necesidades humanitarias".
Los artículos relacionados con "productos agrícolas y alimenticios" y los "servicios necesarios para la seguridad de la aviación civil", como las piezas de repuesto de los aviones, tampoco podrán estar incluidos en las sanciones de Washington.
Por último, el tribunal ha ordenado a los dos países "abstenerse de cualquier acción que pueda agravar o extender la disputa (...) o la haga más difícil de resolver".
Efecto vinculante y obligaciones internacionales
Yusuf recordó que la decisión de la CIJ "tiene un efecto vinculante y crea obligaciones legales internacionales para las partes". No obstante, está por ver si Washington aplicará el fallo del tribunal, pues su aplicación depende de la voluntad de los Estados y, eventualmente, del Consejo de Seguridad de la ONU, donde Estados Unidos tiene derecho a veto.
El acuerdo nuclear, firmado en 2015, impuso límites e inspecciones al programa atómico de Irán a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.
EEUU se retiró el pasado mayo de dicho pacto a pesar de que el Organismo Internacional de la Energía Atómica confirmó que Teherán lo estaba implementando en los términos establecidos