Detenido un hombre en el aeropuerto de Barajas acusado de matar a su pareja en Almería
- El presunto autor, un ciudadano mauritano, trataba de fugarse a su país
- Número de atención a las víctimas de maltrato: 016
La Guardia Civil ha detenido en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas a un hombre acusado de matar a su pareja cuyo cadáver fue hallado en una planta de reciclaje de Gádor (Almería) por un operario del vertedero el pasado 27 de septiembre.
El presunto autor del homicidio, K.K., un ciudadano mauritano de 30 años, ha sido arrestado en la terminal 4 del aeropuerto madrileño cuando intentaba fugarse a su país, ha informado este jueves la Dirección General de la Guardia Civil.
El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Almería, que ha decretado para él su ingreso en prisión comunicada y sin fianza.
La investigación se inició cuando un operario de la planta de reciclaje de Gádor dio aviso a los servicios de emergencias del hallazgo del cadáver.
La víctima, cuya autopsia determinó una muerte violenta, se encontraba indocumentada y carente de efectos personales, lo que dificultó su identificación.
El detenido denunció la desaparición de la fallecida
Paralelamente la Guardia Civil detectó en Roquetas de Mar (Almería) una denuncia por la desaparición de una mujer marroquí formulada por su pareja.
Los agentes identificaron el cuerpo hallado como el de la mujer marroquí cuya desaparición se había denunciado. Los investigadores apreciaron en K.K. ciertas incoherencias y posteriormente averiguaron que la víctima ejercía la prostitución en Roquetas de Mar y que el denunciante era su proxeneta.
También averiguaron que el detenido había dado a otra persona el vehículo que había utilizado para trasladar el cadáver de la mujer y fue hallado en la localidad almeriense de Abla en posesión de un amigo del detenido.
K.K. se desplazó recientemente a Madrid con el objeto de obtener un salvoconducto de la Embajada de Mauritania para permanecer en Marruecos y obtuvo un billete de avión para viajar de modo inmediato a su país previa escala en el país marroquí.
De esta forma los agentes concluyeron que además de deshacerse de su vehículo para ocultar pruebas había trazado un plan de huida de España al verse acosado por los investigadores.
Para ganar tiempo y perpetrar su fuga, el detenido, desconociendo que había sido encontrado el cadáver, aseguró a los investigadores que la mujer estaba en Murcia con otra persona y que él iba hacia esa ciudad para que ella regresara esa misma tarde a su casa.
Los investigadores comprobaron que les estaba engañando ya que les estaba diciendo esto por teléfono mientras iba a Madrid, trayecto en el que los agentes le siguieron en todo momento.
Imputado por homicidio doloso
Cuando K.K. llegó al aeropuerto de Barajas para viajar con destino a Casablanca (Marruecos) fue detenido por los agentes de la Guardia Civil de Almería.
El detenido se opuso a dar a conocer la dirección real de su domicilio y explicó que llevaba viviendo en él apenas dos meses, lo que unido al férreo control al que sometía a la mujer fallecida provocó que ni siquiera los familiares de ella supieran dónde vivía.
Finalmente fue localizado el domicilio en Roquetas de Mar y durante su registro los agentes encontraron pruebas de la implicación de K.K. en el homicidio. Al detenido se le imputan los delitos de homicidio doloso en el ámbito de la violencia de género y de denuncia falsa.
En lo que va de año, 40 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en España -cifra a la que podría sumarse un caso que todavía está en investigación- y 27 menores se han quedado huérfanos. Sólo en 2018, tres menores han sido asesinados, 27 en los últimos cinco años. Desde 2003, año en que empezaron a registrarse las estadísticas, la lacra de la violencia de género ha acabado con la vida de 964 mujeres.