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China apuntala su liderazgo en la cumbre Asia-Pacífico ante la ausencia de Estados Unidos

  • Las millonarias inversiones de China en los países del Pacífico desplazan a Australia, aliado estadounidense
  • La ausencia de Trump en la cumbre de la APEC desliza un mensaje de falta de interés en la región

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Papua Nueva Guinea acoge la reunión de la APEC
Papua Nueva Guinea acoge la reunión de la APEC

La visita realizada por el presidente chino, Xi Jinping, a Papúa Nueva Guinea en la víspera de la cumbre presidencial del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC) ha confirmado el liderazgo en la región de China, que extiende sus tentáculos a las islas del Pacífico, área de influencia de Australia, aliado de Estados Unidos, gracias también a la falta de presencia de la administración Trump.

El mandatario chino subrayaba en Port Moresby, la capital papú, que China está comprometida en "apoyar a los países en desarrollo del Pacífico", una ayuda que, como en Asia y América Latina, se traduce en inversión y préstamos para infraestructuras.

Xi ha dedicado su primera mañana, en la capital de Papúa Nueva Guinea, a inaugurar una avenida de seis carriles, construida con financiación china. Como signo de agradecimiento, la avenida ha sido decorada con banderas de China e imágenes del presidente.

"Construyamos juntos más carreteras que lleven a la prosperidad, la apertura y la amistad", ha subratyado Xi desde el Bulevar de la Independencia. Para agasarjarle, el Gobierno papú ha construido una pagoda, al estilo chino, en la avenida que conduce al lujoso hotel Stanley donde se aloja la nutrida delegación china, y ha puesto a diez chefs a su disposición.

Una ausencia llamada Trump

La primera visita de Xi a Papúa -aunque el primer ministro papú, Peter O'Neil, ha viajado doce veces a China desde 2011- se ha desarrollado en medio de la tensión creciente en el Pacífico a causa de la influencia diplomática y comercial de China en una zona de tradicional dominio de Australia, el principal aliado de EE.UU. en la región.

Pese a existir un consenso generalizado en el Foro de Cooperación Económica de Asia-Pacífico (APEC) por estrechar la integración económica, las tiranteces entre China y Estados Unidos, enzarzados en una guerra comercial, son el telón de fondo de la cumbre.

Aunque sí acudirán a la cumbre los líderes de Australia y Nueva Zelanda, el vació dejado por Donald Trump, quien ha enviado en su lugar al vicepresidente Mike Pence, ha cedido el protagonismo a Xi y desliza un mensaje de desinterés en la región.

Antes de la llegada del presidente chino a Papúa, la prensa local publicaba un artículo, firmado por el propio Xi, en el que expresaba su deseo de que sus lazos bilaterales sirvan de "epítome en las relaciones de China con el resto de naciones isleñas del Pacífico". Así, Xi se ha reunido con los líderes de Fiji, Vanatu, Samoa, Micronesia, islas Cook, Tonga y Niue, quienes se encuentran en Port Moresby en un foro paralelo al de la APEC.

China desplaza a Australia

Los intercambios comerciales entre China y las islas del Pacífico alcanzaron en 2017 los 7.250 millones de dólares, además de inyectar 3.000 millones en inversión, según datos oficiales chinos. De este modo, China está desplazando a Australia como principal benefactor en la zona: ya ocupa el segundo lugar gracias a los 1.300 millones de dólares concedido desde 2011 en préstamos.

Papúa Nueva Guinea, el país más poblado -con 9 millones de habitantes- y rico en recursos naturales del Pacífico, es el gran benefactor. Este mismo viernes, tras la reunión bilateral, Xi y O'Neil firmaron un memorando de entendimiento para estrechar la inversión en infraestructuras, el comercio y la cooperación técnica, además de pactar la libertad de movimiento para diplomáticos y políticos entre los dos países.

Además, China ha concedido un crédito blando de 300 millones de dólares a Papúa Nueva Guinea y ha acordado una ampliación del proyecto -valorado en 1.500 millones de dólares- de una mina de níquel explotada por la compañía Ramu, de mayoría china.

El acercamiento de China al Pacífico también tiene que ver con su histórica disputa sobre la soberanía de Taiwan. En el Pacífico, seis naciones -Kiribati, las islas Marshall, Naru, Palau, las islas Salomon y Tuvalu- reconocen la soberanía de Taiwan, que en los últimos meses ha perdido en Latinoamérica los apoyos de El Salvador, Panamá y República Dominicana.

Estos países sucumbieron a lo que ya se ha bautizado como la "diplomacia de chequera", la misma estrategia que China parece querer implantar en el Pacífico Sur y que le ha funcionado en el Sudeste Asiático, donde Filipinas -viejo aliado de EEUU- es ahora uno de sus principales socios. De hecho, tras la clausura de la APEC el domingo, Xi continúa su gira por la región con visitas oficiales a Brunei y Filipinas.