El Gobierno iraní: "Estamos comprometidos con el acuerdo nuclear, pero no sé si será así en el futuro"
- El número 2 de la diplomacia iraní asegura en RNE que “los firmantes europeos deben decidir si están con nosotros o EE.UU.”
- Seyyed Abbas Aragchi afirma que Washington usa su poder económico como un arma: "es claramente una práctica de acoso"
Las sanciones que Estados Unidos ha empezado de nuevo a aplicar sobre la economía iraní han puesto en guardia de nuevo al régimen de Teherán.
Después de la firma del programa nuclear bajo la presidencia de Barack Obama junto a China, Rusia, Reino Unido, Francia y Alemania, el Gobierno iraní había vuelto a los mercados internacionales aliviando su precaria situación económica. La venta de petróleo hacía fluir las divisas pero Estados Unidos lo ha frenado en seco.
En una visita relámpago a Madrid para reunirse con representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores, el número 2 de la diplomacia iraní, Seyyed Abbas Aragchi ha recordado en el programa Cinco continentes de Radio 5, que Irán “ha cumplido más del 100% de lo pactado” y esgrime los informes de la Agencia Internacional de la Energía Atómica.
“Cada miligramo de nuestro material está contabilizado y cada pieza de nuestras máquinas puede vigilarse por los inspectores”, asegura.
Aunque Aragchi dice que están dispuestos a cumplir, no tarda en añadir que no descarta abandonar el pacto si no obtienen los beneficios prometidos. “Estamos comprometidos, pero no sé si en el futuro será así porque los beneficios que obteníamos hoy son casi inexistentes”, asegura.
"Ya les hemos dado seis meses"
Las empresas occidentales ya han empezado a cancelar proyectos en Irán y el Gobierno dice lamentarlo, pero pide a los países europeos que sean soberanos en sus decisiones.
“Nos pidieron unas semanas para adaptarse desde que Trump decidió salirse del acuerdo. Bien, les hemos dado ya seis meses y seguimos esperando las soluciones”, dice.
“Estados Unidos está imponiendo sus políticas a otros países, usando su poder económico como un tipo de arma. Es claramente una práctica de acoso. Entendemos la realidad de muchas empresas que tienen vínculos con los Estados Unidos y sus mercados, sobre todo los financieros y que temen las sanciones. Y creo que con esto, Estados Unidos está sometiendo la soberanía de los países europeos, las empresas obedecen instrucciones de Washington y no de sus propios gobiernos”.
Existe la duda de los efectos políticos que puede tener a nivel interno el fracaso del acuerdo y no esquiva la pregunta ante una posible llegada de otro presidente más conservador que el actual Hassan Rohaní.
“Hoy en Irán, la sensación del pueblo es la de la resistencia a la agresión. El acuerdo trajo esperanza en que negociando se podía mejorar. Pero sí, si la gente ve que una tendencia política no puede cumplir sus promesas, obviamente cambiarán sus posiciones y votarán a otros. No sé lo que decidirá el pueblo iraní, pero lo que sí sé es que el apoyo a la negociación y la diplomacia pierde terreno en Irán y probablemente se verá reflejado en las próximas elecciones”.
Carrera entre Irán y Arabia Saudí
Otra realidad es la visión regional con una carrera entre Irán y Arabia Saudí por lograr la mayor influencia posible. Teherán apoya a los rebeldes hutíes en Yemen y su participación en la guerra de Siria junto a Bachar al Assad ha sido importante.
Preguntado por la presencia de las tropas iraníes ahora y en el futuro, Seyyed Abbas Aragchi asegura que fueron a Siria “para luchar contra los terroristas”. Y añade: “estamos allí por petición e invitación del Gobierno de Siria. Nuestro papel es más bien el de ayudar y aconsejar al Ejército sirio, estamos y estaremos en Siria tanto como el gobierno sirio quiera”.
Su futura presencia tan cerca de la frontera con Israel genera grandes incertidumbres ante la aversión mutua que se profesan. Hay quien dice que incluso esto augura una guerra a medio plazo. “Nosotros no generamos inestabilidad”, defiende el viceministro de Asuntos Políticos del Ministerio de Exteriores iraní.
“De hecho, la única cuestión que generaba inestabilidad en la región era la de nuestro programa nuclear y la solucionamos con la diplomacia y negociación. Israel es la mayor fuente de inestabilidad, la opresión y ocupación del pueblo palestino”.