El PP da por roto el pacto para renovar el CGPJ mientras Sánchez insta a mantenerlo
- Aseguran que no se sentarán de nuevo a negociar hasta que no dimita la ministra de Justicia
- Sánchez pide "sentido institucional" y "de Estado" al PP para no romper el pacto para la renovación
El Partido Popular ha dado por roto este martes el pacto que mantenía con el PSOE para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), después de que el magistrado Manuel Marchena haya presentado su renuncia a ser el candidato a presidir el órgano de los jueces, mientras que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha instado a mantenerlo porque alega que "hay muchos jueces de enorme valía".
La semana pasada el Ejecutivo y el PP pactaron que Marchena fuera el presidente del CGPJ, un nombre que fue propuesto por los 'populares' y un acuerdo en el que también se fijó que 11 de los 20 representantes del órgano de los jueces serían propuestos por partidos progresistas.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha justificado su decisión de romper el acuerdo con el PSOE sobre la renovación del CGPJ "por dignidad" de su grupo parlamentario, por "respeto" a los jueces y fiscales y por el "fortalecimiento de las instituciones".
Casado ha advertido que "cualquier otra explicación" sobre la decisión del partido de romper el acuerdo "no es la verdad ni la razón" de hacerlo, y ha pedido que se retire del Pleno del jueves el punto del orden del día en el que se iban a elegir los vocales consensuados.
El líder del PP ha confirmado su intención de proponer una reforma del sistema de renovación del CGPJ para volver al modelo original, "sin tener que entrar en el juego electoralista de otras formaciones" y sin entrar en el "populismo" de decir que las Cortes no están legitimadas para hacer esta elección.
Piden la dimisión de Delgado
También el portavoz del Grupo Popular en el Senado, Ignacio Cosidó, -quien envió un mensaje a los senadores 'populares' sobre que el pacto para renovar el CGPJ les permitía controlar "desde detrás" el Tribunal Supremo-, ha reiterado que el pacto "está roto" y ha advertido de que no se volverán a sentar a negociar hasta que la ministra de Justicia, Dolores Delgado, dimita o sea cesada.
Sin embargo, él ha descartado dimitir por el mensaje porque ha asegurado, en una rueda de prensa, que tiene el respaldo del líder del partido, Pablo Casado, y de todo el grupo parlamentario.
Previamente, en declaraciones a España a las 8 de RNE, el vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, anunciaba la ruptura del pacto y responsabilizaba directamente al Gobierno de la decisión tras haber filtrado detalles de la negociación que mantenían los dos partidos mayoritarios, al tiempo que le acusaba de haber hecho un "daño irreparable a la Justicia".
Maroto aseguró que el sistema de elección de los miembros del CGPJ es similar a países de nuestro entorno y recordó que en democracia "siempre" se ha renovado el órgano de los jueces mediante pacto, incluso cuando había gobiernos con mayoría absoluta y calificó de "irresponsable" que el Gobierno difundiera quién presidiría el órgano de los jueces.
Sánchez entiende a Marchena y pide al PP "sentido institucional"
Mientras que en el PP nadie achaca la ruptura del pacto al mensaje que envió Cosidó a sus senadores, Pedro Sánchez sí que ha apuntado dicho WhatsApp como una de las causas de que el PP haya suspendido las negociaciones, y por eso, ha instado a que se mantenga el pacto para renovar el CGPJ.
El presidente del Gobierno ha pedido al PP "sentido institucional" y "de Estado" , "después del WhatsApp conocido ayer", ya que hay "muchos jueces y juezas de enorme valía" para presidir el Consejo. "Si es un partido de gobierno, que no rompa el pacto porque lo más importante es la renovación", ha insistido.
Además, Sánchez ha afirmado "entender" a Marchena después de que se haya puesto en duda su imparcialidad y ha asegurado que su renuncia "demuestra su profesionalidad". "Comprendo perfectamente la renuncia de Marchena, cuando se pone en cuestión la imparcialidad de un juez como Marchena es comprensible que haya tenido que dar un paso atrás", ha asegurado el presidente del Gobierno.
En opinión de Sánchez, la decisión que ha tomado Marchena demuestra "lo idóneo que era" para presidir el órgano de gobierno de los jueces y el Tribunal Supremo. Demuestra también que "cuando se hablaba de su supuesta parcialidad y, en consecuencia, su ausencia de imparcialidad, la renuncia lo que ha hecho ha sido demostrar su profesionalidad y su prestigio, que precisamente ha sido reconocido por jueces de distintas sensibilidades".
Críticas de los otros partidos
Y mientras PP y Gobierno se culpan mutuamente de la filtración y del fracaso de las negociaciones, Unidos Podemos y Ciudadanos lamentan la imagen que se ha dado en este asunto.
Para la portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarre, la renuncia se debe a presiones políticas después del mensaje de Cosidó y ha asegurado que todo este asunto demuestra que "el país necesita una reforma en profundidad para demostrar que la justicia es independiente".
"Me temo que las presiones vienen por otro lado, va a quedarse como parte de la sala II; la que dijo Cosidó que iba a controlar por la puerta de atrás", ha asegurado la portavoz 'morada'. También ha considerado que todo se debe a "una mala gestión del CGPJ por parte del PP y del PSOE".
Ciudadanos ha calificado de "triste espectáculo" la actuación del presidente del Gobierno y el líder del PP, Pablo Casado en relación a Marchena.
El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha opinado que PSOE y PP "se han echado atrás" en su acuerdo para renovar el Poder Judicial "no porque se arrepientan, sino porque se han dado cuenta de que los españoles les han pillado" en su "pasteleo".