España impulsa la cooperación con China con una veintena de acuerdos pero rechaza sumarse a la Nueva Ruta de la Seda
- Ambos Ejecutivos firman acuerdos comerciales, culturales e institucionales durante la visita de Xi Jinping
- Sin nombrar la guerra comercial con EE.UU., el presidente chino ha invitado a España a unirse a su plan
Los Gobiernos de España y China han firmado este miércoles, en la primera visita a España en 13 años de un presidente chino, una veintena de acuerdos comerciales, institucionales y culturales, entre los que se encuentra un protocolo que permitirá ampliar la exportación de uva de mesa y carne porcina. Sin embargo, el Ejecutivo español no se suma de momento al proyecto de inversiones de la Nueva Ruta de la Seda a la que Xi Jinping le había invitado a sumarse.
España considera la firma de estos acuerdos como "colofón" para renovar la "relación estratégica" entre España y China en el 45 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países que se ha plasmado en una declaración conjunta, publicada por Moncloa en su página web tras el encuentro de trabajo mantenido entre el presidente chino y el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez.
Sin embargo, según han confirmado a TVE fuentes del Ejecutivo español, España prefiere quedarse de momento dentro de la vía comercial en el marco de la iniciativa europea que une Europa y Asia.
La declaración conjunta de China y España consta de 36 apartados que ahondan entre otros asuntos, en su visión del comercio global bajo normas establecidas y la defensa del multilateralismo como herramienta ante desafíos globales, como el cambio climático, los flujos migratorios masivos o la proliferación nuclear.
Entre los acuerdos suscritos por ambos Ejecutivos se encuentran tres memorandos de entendimiento, sobre cooperación comercial, empleo y ciencia y tecnología, un acuerdo estratégico para impulsar la enseñanza del español en China, y dos protocolos de exportación, que facilitarán la exportación de la uva de mesa y la carne de porcino en el país asiático.
Además, según ha avanzado el Ejecutivo, habrá diez acuerdos empresariales entre compañías españolas y chinas (Instituto de Crédito Oficial, Abengoa, Barcelona Housing Systems, Telefónica, Técnicas Reunidas, Tecnatom, Puerto de Algeciras, Grupo SEAT, INDRA, Hospital Clínico de Barcelona), que serán suscritos en presencia de los dos presidentes, y que servirán de puerta de entrada para el empresariado español en el mercado chino.
"Inestabilidad e incertidumbre"
El presidente chino había propuesto durante su intervención, en una ceremonia solemne en el antiguo salón de plenos del Senado, "subir nuevos peldaños" de amistad y cooperación comercial, política y de seguridad y a participar en la iniciativa de la Nueva Ruta de la Seda, un proyecto que incluye la construcción de infraestructuras y el desarrollo de las relaciones comerciales entre China, Europa y África.
Xi ha subrayado la importancia de forjar relaciones más cercanas entre ambos países para aprovechar el impulso económico y fortalecer la colaboración política "en beneficio mutuo".
Sin llegar a mencionar la guerra comercial de China con Estado Unidos, Xi ha destacado que la situación internacional experimenta una "inestabilidad e incertidumbre sin precedentes" en la que el mundo se enfrenta a la "encrucijada de hacia dónde va la humanidad", hacia la ampliación de la globalización económica y el libre comercio o hacia el unilateralismo y el proteccionismo.
En los próximos años, según ha asegurado, China calcula que precisará importar productos por valor de más de 10 billones de dólares para satisfacer la demanda interna de una clase media que crece sin cesar.
Xi Jinping intervenía así en una ceremonia solemne celebrada en el antiguo salón de plenos del Senado a la que han asistido los presidentes del Congreso y el Senado, Ana Pastor y Pío García Escudero, quienes han entregado a Xi las medallas de ambas cámaras.
Recepción en el Palacio Real
Los reyes han recibido a primera hora a Xi y a su esposa, Peng Liyuan, con una solemne ceremonia en el Palacio Real de Madrid. Felipe VI y el presidente chino han pasado revista a una agrupación de honores y han presenciado desde el palco de honor el desfile de la Guardia Real. En la Plaza de Oriente se han concentrado decenas de ciudadanos chinos con banderas de su país y pancartas rojas de bienvenida a España, país en el que residen y trabajan más de 200.000 compatriotas.
Posteriormente, Xi ha visitado el ayuntamiento, donde ha recibido las llaves de la ciudad, antes de dirigirse al Senado y después a Moncloa.
El presidente chino ha recibido de mano de la alcaldesa Manuela Carmena la Llave de Oro de Madrid, una ciudad "inolvidable" que visitó hace 20 años y que, como ha explicado, le dejó "impresiones imborrables" al ser el "símbolo" de la riqueza cultural de España y "puerta a Europa".
Mientras, la reina Letizia y la primera dama china, Peng Liyuan, han visitado el Teatro Real donde, además, de recorrer las instalaciones, han podido observar parte del ensayo de Turandot y escuchar tres arias de esta ópera de Giacomo Puccini cuya nueva producción, a cargo del estadounidense Bob Wilson, se estrena este viernes 30 de noviembre.