El primer ministro belga reorganiza su Gobierno para agotar la legislatura tras la salida de los nacionalistas flamencos
- La ruptura de la coalición se ha producido después de que Michel anunciara que la firma del Pacto Migratorio de la ONU
- El Ejecutivo belga continuará en minoría y necesitará el apoyo de la oposición hasta las próximas elecciones en mayo
El primer ministro de Bégica, Charles Michel, ha reorganizado este domingo su gabinete para sustituir a los miembros del partido nacionalista flamenco N-VA que han salido del mismo y tratar de agotar la legislatura, que finaliza en mayo próximo.
El pacto de Gobierno se ha roto después de que Michel ignorara el chantaje de los nacionalistas para que no firmara el Pacto Mundial para la Migración de la ONU, un acuerdo no vinculante que busca por primera vez dar un marco para gestionar mejor la migración, y al que rechazan adherirse varios países.
Michel establecerá ahora consultas con el Parlamento federal, ya que la marcha de la N-VA de la coalición conocida hasta ahora como "La Sueca", por los colores de sus formaciones, deja un Ejecutivo en minoría que necesitará el apoyo de la oposición para sacar adelante cualquier iniciativa en el Parlamento.
El partido liberal francófono MR lidera desde 2014 la coalición de la que también forman parte los cristiano demócratas flamencos del CD&V y los liberales flamencos Open VLD, una configuración que amenazaba con romperse desde la semana pasada por la negativa de la N-VA a firmar el acuerdo de Naciones Unidas.
Michel defendió que Bélgica se había "comprometido" con el Pacto de la ONU y que la N-VA había participado en las negociaciones, por lo que su cambio de opinión hace unas semanas para pedir la abstención creó una "profunda división". En una entrevista a la televisión RTL, aseguró que "el pacto es importante porque da la oportunidad de tener una mejor cooperación internacional. Ningún país puede resolver esta cuestión solo", dijo en una entrevista a la televisión RTL.
La oposición, reticente
El Ejecutivo necesitará el apoyo de la oposición para poder sacar adelante proyectos como los Presupuestos para 2019 y mantenerse así en pie hasta las elecciones nacionales del próximo 26 de mayo.
Las primeras respuestas por parte de los verdes de Ecolo y del partido socialista francófono (PS) no han sido positivas, según informa la agencia local Belga. "Los ecologistas no serán la rueda de repuesto de una mayoría en descomposición", ha aseverado el copresidente de Ecolo, Jean-Marc Nollet, mientras que el presidente de los socialistas, el ex primer ministro Elio di Rupo, ha señalado que eso significaría que "la política nefasta para los ciudadanos (del Gobierno actual) va a continuar".
Paradójicamente, la N-VA ha anunciado que podría apoyar ahora desde la oposición buena parte de los proyectos que presente el Gobierno. "Seremos constructivos", ha dicho el ya exministro de Interior Jan Jambon, según "Belga".
La marcha de la N-VA deja el Gobierno federal de 18 en 13 miembros: salen el hasta ahora ministro del Interior, Jan Jambon, el de Finanzas, Johan Van Overtvedlt, y el de Defensa, Sander Loons, así como del secretario de Estado para el Asilo y la Migración, Theo Francken, y la secretaria de Estado para Igualad, Zuhal Demir.
El Rey Felipe de los Belgas, tras reunirse con Michel, ha aceptado la dimisión de los ministros y secretarios de Estado de la N-VA y sus competencias han sido repartidas entre los recién nombrados Pieter de Crem y Philippe de Backer, y los vice primeros ministros Dider Reynders (MR) y Alexander de Croo (Open VLD) y la ministra de Sanidad Maggie de Block (Open VLD).).