Vox exige a Ciudadanos y PP que se sienten a negociar su apoyo a un gobierno en Andalucía
- El PP insiste en que negociará con Vox, aunque rechaza que se haga de la violencia de género "una cuestión nuclear"
- "Si Vox va a ir por esta línea, a Ciudadanos lo va a tener de frente", dice el líder de la formación en Andalucía
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado este jueves que si PP y Ciudadanos quieren recabar su apoyo en la investidura de Juanma Moreno como presidente de Andalucía tendrán que sentarse a negociar. "Si Cs y PP quieren los votos de Vox, tendrán que sentarse con Vox para escuchar el programa electoral que representan nuestros 12 diputados", ha subrayado el líder de la formación ultraderechista en la red social Twitter.
A través de esa vía, Abascal ha criticado el hecho de que el pacto entre Ciudadanos y PP no admita "ni el más mínimo cambio", por lo que ha dejado claro que, pese a que "no será obstáculo para el cambio en Andalucía", Vox no votará "el programa de otros partidos" que le "desprecian" y que no traicionará a sus votantes porque no será "alfombra para la continuidad" de las mismas políticas pero con otras siglas.
En este punto ha atacado a Ciudadanos -al que ha llamado "veleta naranja"- porque en 2016 proponía -siempre según Abascal- lo mismo que Vox ahora en materia de violencia de género. En este punto ha destacado que, además de eliminar estas leyes, pondrán encima de la mesa "la reducción fiscal, el desmontaje de la administración paralela y el apoyo al mundo rural y sus modos de vida", entre otras medidas.
Antes, su secretario general, Javier Ortega Smith, ha acusado en RNE a PP y Ciudadanos de querer "imponer" a Vox el acuerdo de gobierno en Andalucía. "Se ve claramente que estas medidas vienen dirigidas por la izquierda", ha subrayado el dirigente del partido ultraderechista, para quien esta actitud "es una falta de respeto". "No vamos a ponernos de rodillas y a aceptar lo que nos pongan encima", ha afirmado.
El PP incluye "dentro de la normalidad" pactar con Vox
En la radio pública, y antes de que se manifestara Abascal en Twitter, el secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, ha insistido en que su formación negociará con Vox "como ha habido con otros partidos en otras regiones y como habrá seguramente en el futuro" pese a rechazar que se haga de la violencia de género "una cuestión nuclear".
El número dos de los populares ha recordado que PP y Cs no suman (47 diputados) para sacar adelante leyes en el Parlamento andaluz (PSOE y Adelante Andalucía cuentan, entre los dos, con 50 actas) por lo que "cualquier desarrollo de ley tiene que pasar necesariamente por el Parlamento y esto requiere que haya una mayoría de 59 diputados, que incluya a Cs, Vox y PP".
García Egea ha querido incluir "dentro de la normalidad" este tipo de acuerdos con Vox en el futuro. No obstante, en un guiño a Cs, ha destacado que el pacto "programático" es "muy ambicioso" y que nadie "que tenga ganas de cambio" puede negarse a él.
"Si Vox va a ir por esta línea, a Ciudadanos lo va a tener de frente"
El PP se abre a negociar con Vox, pero no así Ciudadanos. El secretario general de esta última formación, José Manuel Villegas, ha asegurado que "no se va a mover nada" del acuerdo alcanzado entre su formación y el PP en Andalucía. "El pacto es un pacto entre entre PP y Ciudadanos y no se va a cambiar", ha asegurado el número dos del partido que lidera Albert Rivera en declaraciones en Onda Cero, recogidas por Europa Press.
Mientras, el líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, ha opinado que las declaraciones de los responsables de Vox sobre el acuerdo con el PP para dotar presupuestariamente la ayuda a víctimas de violencia de género "están fuera de lugar" y ha recordado que todos los grupos parlamentarios aprobaron en julio una reforma de la Ley de violencia de género para garantizar la protección de las víctimas. "Si Vox va a ir por esta línea, a Ciudadanos lo va a tener de frente", ha dicho Marín.
Luchar contra el "machismo asesino" es política de Estado
El Gobierno ha advertido mientras de que la lucha contra el "machismo criminal y asesino es una política de Estado" y ha defendido que no se puede "retroceder en ese nivel de consideración". Así lo han señalado fuentes del Ejecutivo, tal y como recogen Efe y Servimedia, quienes han subrayado que garantizar la seguridad de las mujeres es una "de sus principales obligaciones" y han recordado que 976 mujeres han sido asesinadas por violencia de género desde que hay registros en 2003.
Tras declarar que las políticas contra la violencia machista son "medidas contra los maltratadores y para eliminar la violencia en una sociedad de convivencia pacífica", el Ejecutivo ha insistido en que el cumplimiento de la Ley integral contra la violencia de género y el desarrollo del Pacto de Estado que suscribieron los partidos en el Parlamento "son pilares básicos" de esta política.