Netflix cambia los subtítulos de 'Roma' en español en su plataforma tras las críticas de Cuarón
- La película, rodada en español hablado en México, se había subtitulado al español castellano
- El director, Alfonso Cuarón, había calificado de "ofensivo y ridículo para el público español" el sistema
Netflix ya ha cambiado los subtítulos en español para la película Roma, de Alfonso Cuarón, tras la polémica surgida por la diferencia entre las partes habladas con expresiones del español de México y los rótulos 'adaptados' al español de España. El propio Cuarón ha señalado que le parecía "ofensivo y ridículo para el público español" este sistema de subtítulos.
De esta manera, desde este jueves 10 de enero los usuarios de la plataforma que accedan a la película podrán ver la correspondencia entre las partes habladas por los actores y los subtítulos. En cines de España, el filme únicamente se mantiene en cartelera en los cines Verdi y en Conde Duque Aguilera, ambos en Madrid.
La cinta también incluye subtítulos para las conversaciones en mixteco, una lengua indígena. Roma ha sido galardonada con dos Globos de Oro por el Sindicato de Actores de Estados Unidos como la mejor película de lengua extranjera y mejor dirección el pasado fin de semana y en su exitosa carrera se ha alzado con la Palma de Oro en Cannes.
Son subtítulos "sorprendentes e innecesarios"
Una de las críticas a esta situación vino del académico de la RAE Pedro Álvarez de Miranda, quien considera "sorprendentes e innecesarios" los subtítulos en español, que además han supuesto "una pérdida de tiempo y dinero" para los responsables de la distribución de la cinta.
"No se trata tampoco de poner el grito en el cielo, porque no es para tanto, pero sí que alguien tendría que decir a los distribuidores que en cierto modo están perdiendo el tiempo y el dinero subtitulando una cosa que ya estamos entendiendo y que podría ser chocante fuera de España, en otros países hispanohablantes", señalaba en declaraciones a Europa Press el académico.
En cualquier caso, el académico no se mostró "muy partidario de las quejas" e insistía en la idea de "no poner el grito en el cielo" con este asunto. "Simplemente recordar que no es necesario, nunca lo ha sido, y desde luego la asociación de academias insistimos en que es un gran beneficio mutuo la unidad de la lengua española, por encima de la diversidad", concluía.