Encuentran una cuarta víctima entre los escombros de la explosión de la panadería de París
- Las otras tres personas fallecidas son dos bomberos y una turista española
- Los bomberos continúan movilizados en las operaciones rastreando en busca de más posibles desaparecidos
Los equipos de rescate han hallado el cadáver de una mujer sepultada bajo los escombros de la panadería donde el sábado se registró una fuerte explosión en el centro de París, de modo que se elevan a cuatro las víctimas mortales por este suceso.
Las otras tres personas fallecidas son dos bomberos que acudieron a sofocar un incendio en la zona y una turista española que se alojaba en un hotel delante de la panadería que sufrió el escape de gas que habría provocado la explosión. Además, el suceso causó al menos una decena graves y alrededor de 37 heridos leves, entre los que se encuentran una española y un español, y numerosos daños materiales en el área.
La causa de la explosión está siendo investigada pero los primeros indicios apuntan a que se trata de una fuga de gas y un incendio.
El portavoz de los bomberos, Eric Moulin, declaró a la prensa que los servicios de rescate trabajan "a mano, levantando piedra por piedra", mientras los perros continúan rastreando en busca de más desaparecidos.
El portavoz explicó que el inmueble más afectado deberá ser reforzado de arriba abajo, y que los vecinos no podrán entrar en los edificios cercanos hasta que los arquitectos confirmen que no sufren daños estructurales que puedan suponer riesgo de derrumbe.
Una treintena de bomberos continúan movilizados en las operaciones y seguirán en la calle Trévise "al menos 48 horas o quizá toda la semana". El Ayuntamiento de París señaló en un comunicado que por el momento hay 12 edificios a los que no se podrá entrar, como mínimo, en los próximos dos días.
La víctima española fue a pasar el fin de semana a París
La turista española fallecida en París, Laura Sanz, era una joven de 36 años que había ido a pasar el fin de semana a la capital francesa. La repatriación de su cadáver está pendiente de la firma del juez y será "lo antes posible", afirman fuentes de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, aunque aún se desconoce la fecha concreta en la que el cuerpo llegará a España.
Sanz residía en Burguillos (Toledo) y trabajaba desde hace años como cajera en el supermercado "La Despensa" de la capital toledana, donde era "muy querida" por los clientes por ser "muy amable y dispuesta".
"Era una chica que se hacía querer por su carácter afable y porque siempre estaba dispuesta a atenderte" ha comentado a Efe una vecina del barrio de Santa Bárbara, donde se ubica el supermercado.
Ha señalado además que "la pena es aún mayor pensando que deja a tres niños huérfanos", ya que, además del supermercado, coincidía con ella en la entrada o salida del colegio al que también van sus hijos.
La trágica noticia ha causado consternación en la ciudad de Toledo, cuya alcaldesa, Milagros Tolón, ha afirmado en su cuenta personal de Twitter: "Consternada por la terrible noticia que hemos recibido por el fallecimiento de una toledana en la explosión en el centro de París."