Chicho Ibáñez Serrador, "orgulloso" de recibir el Goya de Honor 2019: "Siempre me negué al título de maestro"
- Ibáñez Serrador ha recogido el Goya de Honor durante la tradicional fiesta de nominados a los Goya
- El cineasta se siente orgulloso de no haberse dado nunca por vencido ni haber “bajado la cabeza por cansancio”
Narciso “Chicho” Ibáñez Serrador, el hombre que contribuyó a popularizar el cine de terror y fantástico en España, asegura que se siente muy conforme con el reconocimiento que ha tenido a lo largo de su vida. Sin embargo, para el cineasta “no deja de ser un orgullo” recibir el Goya de Honor 2019, un galardón que este lunes ha recogido durante la tradicional fiesta de los nominados a los premios del cine español.
“Siempre me negué al título de maestro, me parecía excesivo", ha subrayado Ibáñez Serrador (Montevideo, Uruguay, 1935) a los medios de comunicación momentos antes de recibir el Goya de Honor en un acto privado en el Teatro Real, lugar en el que se ha celebrado la reunión en la que los nominados han calentado motores para la gala de entrega de premios, que se celebrará el 2 de febrero en Sevilla.
La Junta Directiva de la Academia de Cine acordó reconocer al cineasta, realizador de televisión, guionista, director teatral y actor con el galardón honorífico de la 33 edición de los premios Goyapor ser un “creador de pesadillas único y original” que dice estar muy orgulloso de no haberse dado nunca “por vencido” y no haber “bajado la cabeza por cansancio”.
Ha dedicado el Goya de Honor a sus padres
El director, que ha regalado al cine español películas de culto como ¿Quién puede matar a un niño? y La residencia, ha respondido con dificultad a las preguntas de los periodistas debido a su avanzada edad y a la enfermedad degenerativa que padece. En cambio, ha repasado brevemente algunos hitos de su carrera y ha dedicado el Goya a sus padres, los actores Narciso Ibañez Menta y Pepita Serrador.
Emocionado, Ibáñez Serrador no ha podido contener las lágrimas al recordar a sus progenitores, como tampoco han podido hacerlo los hijos del cineasta, que le han acompañado a la cita.
Se define aún como un “vampiro” que permanece atento a lo que se hace en televisión y que, a pesar de no haber visto ningún filme de los nominados este año a los Goya, valora positivamente el cine actual: “Me gustan mucho los ambientes, la luz y la fotografía”, ha apuntado el maestro, que todavía hace gala de su particular sentido del humor.
Desde su silla de ruedas asiente cuando le dicen que su legado continúa en otros directores reconocidos, como podrían ser Álex de la Iglesia, Juan Antonio Bayona, Paco Plaza, Jaume Balagueró o Alejandro Amenábar, y anima a los que forman parte del presente de la industria cinematográfica a “seguir adelante, respirar hondo, no hacer caso del cansancio y entregarse más”.
Asegura que se le han quedado "proyectos en el tintero"
Para el genio, que tiene en su haber otros galardones como el Nacional de Televisión o el Feroz de Honor, los premios no son lo más importante, pero le agrada “el recuerdo” que le deja cada uno de ellos, ha precisado. Y asegura que, aunque su carrera haya sido dilatada –en los cincuenta ya trabajaba como actor en la compañía teatral de su madre-, se le han quedado “muchos proyectos en el tintero”.
A sus 83 años, Ibáñez Serrador puede presumir de haber revolucionado y modernizado la televisión de los sesenta en España; de alumbrar series míticas como Mañana puede ser verdad o de sorprender con sus famosas Historias para no dormir, a las que se suman otros títulos para la pequeña pantalla.
El merecedor del Goya de Honor 2019, además, fundó la productora Prointel en 1970 para desarrollar sus propias producciones, entre las que se encuentran el mítico programa de TVE Un dos, tres, responda otra vez.