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Convención del PP

El decálogo ideológico de Casado para atraer al votante de Ciudadanos y Vox

  • Sitúa al PP como el "partido de la vida" y pide al PSOE que "saque las manos de la educación"
  • Defiende la ampliación de la prisión permanente revisable y su compromiso contra la violencia de género

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Casado cierra la Convención ideológica del PP con su discurso.
Casado cierra la Convención ideológica del PP con su discurso.

El presidente del PP, Pablo Casado, ha dejado claro en su discurso de clausura de la Convención ideológica del partido que, a partir de ahora, su objetivo es lanzarse a por el votante de Ciudadanos y Vox con un único objetivo: reunir en el PP a todos los votantes de España del centro derecha y liderar un bloque conservador de tres con el que, reconoce, tendrá que pactar para llegar a La Moncloa.

En la parte más ideológica de su intervención, Casado ha abogado por defender una "nación de ciudadanos libres e iguales, frente al veneno que inoculan el populismo y el nacionalismo" y una libertad individual que "emancipa a las personas del afán colectivista que pretende etiquetarlas por su género, edad, raza, religión u orientación sexual".

Casado apuesta por una sociedad que hable "menos del Valle de los Caídos" y más de "competir con Silicon Valley" para "mirar más al futuro en vez de remover el pasado".

Ha desgranado las medidas que considera "necesarias" y "urgentes" y en las que basará su Gobierno si llega a La Moncloa. Este ha sido, en definitiva, el "rearme ideológico" que buscaba el PP:

1.Recuperar la "legalidad y la convivencia" en Cataluña" con el 155

Como primer punto, Casado ha destacado la recuperación de la "legalidad, la convivencia y la prosperidad" en Cataluña, con la aplicación "inmediata" del artículo 155 de la Constitución, "sin límite de tiempo, para deponer al gobierno, nombrar uno nuevo y recuperar el control de la educación, la seguridad, la hacienda, los medios públicos y las cárceles", y para "liberar a toda una sociedad secuestrada por una banda de fanáticos racistas y supremacistas".

El PP también reformará el Código Penal para volver a penalizar la convocatoria de referéndum ilegal y la ley del indulto para prohibirlos ante delitos de rebelión y sedición. Impulsará la Ley de símbolos para garantizar la neutralidad del personal y del espacio público y aplicará la Ley de Partidos para ilegalizar a los que promuevan la violencia, además de la de financiación de partidos para que no reciban fondos los que "atenten contra España". Casado considera que el PP debe "impulsar la cohesión territorial de España frente a egoísmos identitarios y desigualdades competenciales".

2. Ampliación de la prisión permanente revisable

El líder del PP ha vuelto a manifestar su compromiso con el mantenimiento de la prisión permanente revisable. En una de las partes del discurso más aplaudida, ha dicho: "No podemos actuar como si el dolor fuera un peaje inevitable que a algunos les toca pagar. El PSOE y sus aliados quieren que los condenados por asesinatos monstruosos salgan a la calle, pero nosotros defendemos la prisión permanente revisable y queremos ampliarla a supuestos como los que hemos vuelto a vivir hace pocas semanas".

"Los asesinos, violadores o pederastas donde tienen que estar es en la cárcel, no reincidiendo en la calle por el síndrome de Estocolmo de la progresía española", ha clamado.

3. Compromiso para combatir la "violencia contra las mujeres"

"Desde el Partido Popular reafirmamos nuestro compromiso inequívoco para combatir la violencia contra las mujeres, tal y como hicimos con el primer Plan Nacional en el 2000 y el primer Pacto de Estado en el 2015. También intensificaremos las medidas contra la violencia doméstica contra niños y ancianos, y el acoso escolar. Una España en Libertad debe tomarse en serio a las víctimas de crímenes terribles", ha afirmado.

Casado ha dedicado así también una parte de su discurso a defender el "compromiso" del PP contra la violencia hacia las mujeres, tratando de poner así distancia con el discurso de Vox, que quiere derogar la ley de violencia machista. Ha reivindicado ese compromiso frente a lo que ha llamado "buenismo hipócrita de la izquierda". En este punto, ha vuelto a defender la prisión permanente revisable para tomarse "en serio" a estas víctimas.

4. Erradicar el "adoctrinamiento nacionalista"

"Ahora que el PSOE presenta su contrarreforma educativa, debemos impedir que sus dogmas anaftalinados condenen al fracaso a toda

una generación. Nosotros aprobaremos una ley que consagre la libertad de elección educativa de los padres, también de la concertada", ha afirmado un Casado que se compromete a "garantizar la enseñanza en castellano en toda España y erradicar el adoctrinamiento nacionalista y el dogmatismo de izquierda".

Casado ha pedido al Gobierno que "saquen las manos de la educación". "No adoctrinen a nuestros hijos ni destruyan el futuro de España", ha aseverado.

5. El PP es el partido de la "cultura de la vida"

Casado sitúa a su partido como el "de la cultura de la vida" siempre a favor de la "defensa de la vida y la familia", porque "no hay nada más progresista" que apostar por estos dos conceptos, en su opinión.

Así, Casado planteará si es presidente "un impulso a la natalidad, a la conciliación y a la cultura de la vida" como la "seña de identidad" de su partido. "El poder político siempre tiene que actuar a favor de la vida y cuando tenga dudas tiene que resolverlas a favor de la vida. Y si se equivoca, que se equivoque a favor de la vida", ha añadido.

6. Aboga por las "fronteras seguras" en materia de inmigración

"Quiero que puedan cruzar nuestras fronteras aquellos que quieran venir legalmente a vivir con nosotros, a trabajar, a respetar nuestras leyes y nuestros modos de vida", ha subrayado, para defender una propuesta de inmigración que pasa por que el país tenga fronteras "seguras" y recibir inmigración legal.

En este punto, ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de promover con su política un "efecto llamada irresponsable" que fortalece a las mafias que trafican con personas.

También ha dicho, hablando inmediatamente después de terrorismo islámico: "Quien venga a España a inocular odio, que se vaya de inmediato. Aquí se viene a respetar la ley y a respetar la libertad".

7. Fin a la política de acercamiento de presos de ETA

Casado ha reiterado el rechazo del PP al "humillante" acercamiento de presos de ETA a cárceles del País Vasco y Navarra. Si llega a La Moncloa, se ha comprometido a "terminar con la política del Gobierno del PSOE" y a promover la prohibición por ley de los homenajes a etarras.

8. "Revolución fiscal" con una bajada de impuestos

Casado liderará, si tiene capacidad de Gobierno, una "revolución fiscal" con la bajada del impuesto de la renta y el de sociedades y la supresión del impuesto sobre el patrimonio, las sucesiones y las donaciones.

9. "Menos Estado, más sociedad"

"Es necesario reducir la Administración para hacerla más eficiente y transparente, respetando los derechos y deberes de quien ha

conseguido en justa competición su plaza pública, pero garantizando a partir de ahora la evaluación del desempeño, la remuneración adicional por el mismo y el acceso sin discriminación por lengua, como está pasando en los gobiernos de izquierdas, ha dicho Casado en su discurso, en el que ha afirmado: "No queremos el repliegue del Estado, queremos el despliegue de la sociedad".

10. Política exterior: "Exigir con firmeza democracia en Venezuela, Cuba y Nicaragua"

¿Alguien tiene la menor idea de cuál es la política exterior de Sánchez?, se ha preguntado, para responder: "Una cosa es tener política exterior y otra exteriorizar la falta de política".

Casado ha apostado también por una política exterior "que responda a la magnitud real del país" y, en este capítulo, ha reclamado especialmente recuperar el vínculo con Iberoamérica y exigir "con firmeza democracia en Venezuela, Cuba y Nicaragua".

A estos países, ha dicho, España tiene que ir para reivindicar su democratización "en vez de ir a agasajar a dictadores sanguinarios" como, ha hecho el presidente Sánchez y el ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.