Moisés Nieto: "Nos vamos a cargar el planeta por vestir, y vestir mal"
- El modisto pega un giro y apuesta por un modelo de negocio sostenible
- Propone prendas que perduren para evitar el consumo masivo
- Todos los desfiles de Madrid Fashion Week en rtve.es
La colección de Moisés Nieto no tiene nombre. Pero tiene otras muchas cosas, sobre todo muchos mensajes sobre el sector de la moda. Es la tercera vez que presenta su trabajo fuera de Ifema y de nuevo con una clara intención. “Quiero hacer que el público vea como se trabaja en el taller, sacar la parte del interior de la moda hacia afuera”, cuenta.
Su desfile es un homenaje a su equipo, al oficio. Nieto, que llevaba una bata como hacían Pertegaz o Elio Berhanyer, ha orquestado una sinfonía acorde a los nuevos tiempos con un discurso narrativo que se apoya en la sostenibilidad y critica el consumo masivo.
“Tenemos que resetearnos, desaprender para aprender de nuevo. Hay demasiada información de moda en las redes y he querido coger un folio en blanco y empezar otra vez de cero, volver al patrón, a la base, al aula. Además de mi propia marca tengo Dos Studio (su firma masculina, que es independiente, y que le está dando muchas alegrías), y los calendarios son muy exigentes. No podía más”.
La colección es un ejercicio de contención y de limpieza de cosas superfluas para llegar a la esencia, y ha utilizado una paleta de colores básicos: negro, azul, rojo y camel. Las primeras modelos en salir llevan sencillas prendas y conjuntos simples pero a medida que avanza el desfile crece la carga, tanto estética como dramática. Al final, el final. El exceso, un concepto que materializa con superposiciones exageradas.
“He hecho los básicos que toda mujer tiene y necesita en su armario, prendas que repito en distintos colores. Prendas sencillas que luego cambian con los complementos, con ellos se arma el look, como en una labor de estilismo”, cuenta.
La mayoría de los tejidos empleados son naturales, desde las lanas a los algodones, y también usa otros técnicos para las gabardinas, prenda atemporal, que gracias a los avances de laboratorio se hace en un tejido que repele el agua. Y no falta el punto, siempre en prendas fáciles de llevar, texturas naturales y tacto suave.
Una propuesta para perdurar que desprecia la inmediatez de las redes sociales y el consumismo absurdo. “Estoy en un momento de madurez personal y profesional. Ahora soy más crítico con lo que hago y vendo. No tengo ego y lo que quiero es hacer las cosas de otra manera. Volver a la esencia de la moda que es vender. Nadie habla de esto. Yo no comulgo con el consumir por consumir y por producir en exceso. Quiero prendas que perduren en el armario”, dice. Nieto se suma así a otros compañeros, como Carlota Barrera, que apuestan por quitar el pie del acelerador y cambiar de hábitos.
“Lo sostenible y ECO es un armario con prendas que perduren, yo quiero jugar en esa liga. En la moda hay mucho postureo, mucho titular y es un engaño. Solo hay estrategia de marketing. No se dice lo que estamos haciendo mal, no se dice que nos estamos cargando el planeta. ¡Es inviable hacer ropa para vender a 4,95 euros! Me niego a formar parte de esto. ¡Prefiero dejarlo! ¡Nos vamos a cargar el planeta por vestir, y encima vestir mal!