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Cine

'Green Book': el chófer y el pianista que rompieron prejuicios (y se hicieron muy amigos)

  • La cinta, protagonizada por Viggo Mortensen y Mahershala Ali, narra el viaje entre dos personajes opuestos
  • El filme, con el racismo como trasfondo, suma cinco nominaciones a los Oscar y se estrena este viernes

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RTVE.es te ofrece en exclusiva un making of de 'Green Book' de Peter Farrelly

Los hermanos Farrelly, Peter y Bobby, se convirtieron en directores fetiche de la comedia escatológica a finales de los 90 con títulos como Algo pasa con Mary o Dos tontos muy tontos. Peter ha dado un giro de timón y se desgaja de paso del tándem artístico y familiar al situarse al frente de Green Book, de la que también es guionista.

Una película que escora hacia el drama, pero poco, con gotas de humor y el racismo de fondo, protagonizada por una “extraña pareja” formada por Viggo Mortensen (El señor de los anillos) y Mahershala Ali, ganador de un Oscar por Moonlight. La cinta, basada en una historia real, se estrena este viernes 1 de febrero [Mira en el encabezamiento de la noticia el video exclusivo con el making of del rodaje].

Una road movie con buenos sentimientos

La narración, ambientada en 1962, se enfoca en las andanzas de Anthony Vallelonga, alias “Tony Lip”, un rudo portero de clubs nocturnos del Bronx. Un italoamericano que se las sabe todas, caradura y malhablado.

Tony (Mortensen) es contratado como conductor y guardaespaldas por Don Shirley (Ali). Un sofisticado y cosmopolita pianista negro en su gira por los conservadores estados del sur profundo, inmersos en una durísima segregación racial.

Mahershala Ali es Dr. Donald Shirley un músico atrapado entre dos mundos

Green Book, el término del título de la cinta, se refiere al libro de viaje con los alojamientos seguros donde podían pernoctar los afroamericanos. Una guía que debe seguir a rajatabla la pareja para esquivar problemas.

Farrelly hila una historia mil veces contada en Hollywood: la de los opuestos sin nada en común que acaban encontrándose en la diferencia y dinamitan prejuicios.

Una feel good movie sobre la amistad, en la que el músico y el chófer aprenden mutuas lecciones de vida, en una cinta en la que Olivia Spencer está tras la producción ejecutiva en la línea de sus películas que apuestan por la inclusión como Criadas y señoras.

Green Book no es un alegato reivindicativo, pero la lucha por los derechos civiles es un tema recurrente entre las favoritas de los Oscar donde la cinta de Peter Farrelly suma cinco nominaciones: mejor película, actor protagonista (Viggo Mortensen), actor de reparto (Mahershala Ali), guión original y montaje.

Compite contra otros filmes antirracistas como Infiltrado en el KkKlans, de Spike Lee (6 nominaciones) y Black Panther, de Ryan Coogler (7) y aleja el fantasma de otros #oscarsowhite.

Mortensen y Ali: dos actores en estado de gracia

Sin duda, el punto fuerte de Green Book, son las excelentes interpretaciones de los protagonistas que se complementan con sus punzantes diálogos atrapados en un Cadillac por las carreteras sureñas.

Tiernos y divertidos, Mortensen y Ali destilan química. Tocan el corazoncito del espectador en su improbable unión y se retroalimentan en el pulso humorístico.

Viggo Mortensen es un rudo portero italoamericano

Viggo Mortensen borda su primer papel cómico, el director cuenta que tuvo que emplearse a fondo para convencerle del proyecto, en el rol de un tipo zafio y violento que aúna todos los tópicos alrededor de los italoamericanos sin deslizarse en la caricatura: con su cigarrillo colgante, acentazo y glotonería (es increíble la cantidad de comida que ingiere como un auténtico zampabollos).

El necesario contraste lo aporta el refinadísimo pianista que ejerce de Pigmalión “educando” a Tony: como ejemplo son enternecedoras las cartas que le ayuda a escribir a su mujer, en una especie de trasunto de Paseando a Miss Daisy.

Un maravilloso Ali destaca en el papel de un personaje solitario entre dos mundos. Mortificado por ello en una crisis de identidad: por su educación y estatus no pertenece a la comunidad afroamericana segregada pero tampoco los blancos pudientes de Manhattan le aceptan. El músico descubrirá los placeres de la vida a través de los ojos del conductor, que mira cara a cara la discriminación racista y toma conciencia.

Farrelly firma una dirección clásica donde se ven venir los picos dramáticos pero muy cuidada en los detalles: desde la música, donde conviven Aretha Franklin y Chopin, a los paisajes del sur estadounidense. Green Book es una cinta cargada de buenos sentimientos que mezcla varios géneros que encajan con ritmo, pero con un final excesivamente edulcorado muy orientado a todos los públicos.

La pareja emprende un tour por los estados del sur de EEUU con la discriminación racial de fondo

La película se basa en la historia real del carismático portero del Copacabana, Tony Lip, que se codeaba con mafiosos y celebridades. Por su parte, Don Shirley era un hombre reservado con una exquisita formación musical clásica al que las discográficas presionaban para encuadrarle en el jazz como dictaban los prejuicios raciales de la época.

El hijo mayor de Lip, el también cineasta Nick Vallelonga, ha aportado al guión las anécdotas que bebió en casa desde niño sobre el pintoresco viaje de dos opuestos complementarios.