Trump apela al "compromiso" de los demócratas, pero advierte: "Yo haré construir el muro"
- El presidente mantiene el pulso a un Congreso controlado por los demócratas en su segundo discurso sobre el Estado de la Unión
- Stacey Abrams critica la "desgracia" del cierre parcial y avisa de que el partido no cederá ante el líder republicano
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha llamado al Partido Demócrata a la "cooperación y el compromiso" para legislar en Estados Unidos con la financiación para el muro con México como prioridad para su agenda en 2019. "En el pasado, la mayoría de las personas en esta sala votaron por un muro, pero el muro adecuado nunca se construyó. Lo haré construir", ha advertido durante su segundo discurso sobre el Estado de la Unión, pronunciado ante un Congreso fuertemente dividido y controlado por los demócratas, que se niegan a negociar la financiación de la polémica frontera.
El mandatario se ha vanagloriado de los logros durante sus dos años de "fuerte" Administración y país, entre los que ha destacado el "boom económico" conseguido con los buenos datos del empleo. No obstante, Trump ha aprovechado esta cuestión para lanzar una advertencia a los demócratas: el buen estado de la economía solo puede detenerse "con guerras estúpidas y ridículas investigaciones partidistas", en una referencia a la investigación sobre la trama rusa, que está a punto de concluir. Según el líder republicano, "si va a haber paz y legislación, no puede haber guerra e investigación".
Más allá del muro, el político ha marcado otros objetivos de su agenda política: la prohibición del aborto tardío "de los niños que pueden sentir el dolor en el vientre de su madre" con el objetivo de "construir una cultura que ama la vida"; legislar para acabar con el SIDA en 10 años; la reducción de los precios de los medicamentos, o la negociación de una posible retirada de las tropas en Afganistán. Con todo, una de sus frases más aplaudidas en una sala en la que solo se levantaban los republicanos ha sido la dedicada a los elogios a las mujeres, que este año han entrado en la política estadounidense
El muro, punto de fricción en política
Trump ha visto entorpecido su mandato para legislar desde que los demócratas recuperasen el control del Congreso en las elecciones legislativas de 2018. Y precisamente, el muro con México es el mayor obstáculo entre los dos partidos, que en diciembre desató el cierre parcial administrativo más largo de la historia y por el que la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, pospuso este discurso una semana ante la falta de fondos. Trump cedió en enero y reabrió la Adminsitración solo hasta el 15 de febrero, pero advirtió de que podría declarar el Estado de Emergencia para forzar la construcción del muro.
“Estados Unidos es más fuerte con la presencia de inmigrantes, no muros“
En cambio, para la demócrata Stacey Abrams, jugar con la vida de los empleados federales -unos 800.000 estuvieron sin cobrar más de un mes-, es "una desgracia y un truco orquestados por el presidente". La candidata derrotada en el estado de Georgia ha sido la primera mujer negra en dar la réplica demócrata, una ocasión que ha aprovechado para tender la mano al presidente, aunque siempre sin ceder a sus exigencias sobre la inmigración. "El tratamiento compasivo no es lo mismo que fronteras abiertas, los estadounidenses lo entienden", ha dicho Abrams, para terminar por sentenciar que "Estados Unidos es más fuerte con la presencia de inmigrantes, no muros".
La mala sintonía entre los dos partidos ha quedado patente en varios gestos durante la noche: desde los trajes blancos elegidos por las mujeres para reclamar igualdad, a los invitados de la bancada demócrata y republicana, tradicionalmente utilizados para sentar la agenda política de cada partido. El presidente ha invitado a 13 personas que dice "representan lo mejor de América", entre los que destacan los familiares de un matrimonio asesinado por un inmigrante ilegal en enero, una joven adicta a los opiáceos, un agente federal de la unidad de tráfico de personas y narcotráfico, o el niño Joshua Trump, que ha sufrido acoso escolar por compartir apellido con el mandatario. Por su parte, los demócratas han llevado, entre otros, al chef español José Andrés, dos militares transgénero, el padre de una víctima del tiroteo de Florida, o familias de inmigrantes latinoamericanos.
Éxito con Kim Jong-un, críticas a Venezuela y negociaciones en Afganistán
Con respecto a la política internacional, el presidente se ha felicitado por el "éxito" de las negociaciones con Corea del Norte para la desnuclearización. "Si yo no hubiera sido escogido presidente de EE.UU., creo que estaríamos ahora en una gran guerra", ha dicho, al anunciar que la segunda cumbre entre los dos líderes tendrá lugar el 27 y 28 de febrero en Vietnam.
Sobre Oriente Próximo, el presidente se ha mostrado dispuesto a negociar una posible salida de las tropas estadounidenses en Afganistán con los grupos en el país, incluidos los talibanes, semanas después de anunciar la retirada de los soldados en Siria. "No sabemos si alcanzaremos un acuerdo, pero sabemos que tras dos décadas de guerra, ha llegado el momento de al menos intentar la paz", ha dicho.
Trump ha cargado también contra el "socialismo" del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro y ha felicitado al líder opositor, Juan Guaidó, el "presidente leg´timo del Gobierno de Venezuela". Y con respecto a las grandes potencias, el mandatario se ha dicho abierto a negociar un acuerdo armamentístico con Rusia y China, pero también ha advertido de que si no lo consigue, "invertiremos e innovaremos más que todos los demás de lejos".