La ONU concluye que el asesinato de Khashoggi fue planeado por funcionarios saudíes
- La relatora de la ONU concluye que el periodista murió de forma "brutal y premeditada" tras acceder a la grabación de la muerte
- La ONU duda del proceso judicial en Arabia Saudí y solicita visitar el país
El periodista disidente saudí Jamal Khashoggi fue asesinado, según ha anunciado este jueves la relatora de la ONU sobre la tortura, Agnes Callamard, tras viajar a Turquía entre el 28 de enero y el 3 de febrero.
Un forense y un investigador de crímenes graves acompañaron a Callamard en su viaje, en el que la experta de la ONU constató el bloqueo de las pesquisas por parte de Arabia Saudí. "Se les dio a los investigadores turcos un acceso y un tiempo muy inadecuado para poder realizar un examen profesional y efectivo de la escena del crimen que fuese conforme a los estándares internacionales", explica en su informe.
Callamard ha agradecido a Turquía, un país en el que no impera la libertad de prensa, sus esfuerzos para facilitar una investigación que ha sido "seriamente socavada" por Arabia Saudí. La relatora de la ONU ha asegurado además que ha tenido acceso a parte del "escalofriante y horrible material de audio" de la muerte de Khashoggi obtenido por los servicios secretos turcos, aunque ha reconocido que no pudo verificar la autenticidad de la grabación ni reunirse con los investigadores turcos.
Khashoggi fue degollado el 3 de octubre de 2018 en el consulado saudí en Estambul (Turquía), y su desaparición provocó entonces duras críticas de la comunidad internacional contra Arabia Saudí, que terminó por confesar su asesinato más de diez días después de su desaparición, una tardanza calificada por Callamard como un acto de "imunidad para la impunidad". Más de cuatro meses después, sus restos siguen sin aparecer: se desconoce si su cuerpo fue disuelto en ácido o desmembrado por sus asesinos.
La ONU duda de las pesquisas de Riad
Las agencias de Inteligencia estadounidenses consideran que el príncipe heredero, Mohammed bin Salman, dio la orden de la ejecución del periodista crítico con el régimen, aunque Riad siempre ha negado esta acusación. De hecho, la imagen de Salman en la comunidad internacional sufrió un duro revés, prueba de ello el frío recibimiento de los líderes internacionales -a excepción de Putin-, durante la cumbre del G20 en Argentina.
Arabia Saudí detuvo a 21 oficiales implicados en el caso en octubre de 2018, y 11 serán enjuiciados próximamente. De ellos, cinco se enfrentan a la pena de muerte. Sin embargo, la ONU tiene "preocupaciones" sobre la justicia del proceso judicial y ha solicitado una visita oficial al reino.
En cualquier caso, Callamard ha asegurado que la muerte de Khashoggi supuso la violación del derecho internacional y las normas sobre las misiones diplomáticas. "Las garantías de inmunidad en ningún caso se concibieron para facilitar un crimen y exonerar a los autores de su responsabilidad penal", ha señalado. El informe final sobre el caso Khashoggi será presentado en junio ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Bin Salman amenazó a Khashoggi con "una bala", según el NYT
El diario estadounidense The New York Times asegura que el príncipe heredero saudí amenazó en 2017 con usar "una bala" contra Khashoggi si este no regresaba al reino y cesaba en sus críticas a las autoridades.
De acuerdo con esta información, en septiembre de 2017 Bin Salman habló sobre la situación de Khashoggi con un ayudante identificado como Turki Aldajil. La conversación fue interceptada por agencias de espionaje de EE.UU., según las fuentes del periódico. El príncipe heredero le dijo a su ayudante que si no podía convencer al periodista para que regresara por su propia voluntad a Arabia Saudí, habría que llevarlo de vuelta a la fuerza, o de lo contrario él personalmente iría tras Khashoggi "con una bala".
Según analistas de inteligencia sin identificar citados por el diario, la frase de Bin Salman es "una metáfora para enfatizar su intención de matar al periodista si este no regresaba a Arabia Saudí".