Turull afronta el interrogario del Supremo a la vez que intenta apartar al juez Marchena del tribunal
- La segunda semana del juicio del 'procés' se centra en los interrogatorios a los exconsellers
- La Sala 61 del Supremo deliberará sobre un incidente de nulidad de Turull, Rull y Sànchez contra el presidente del tribunal
Este martes el Tribunal Supremo reanudará el juicio del "procés", en la que será su segunda semana. La ronda de declaraciones la abrirá el exconseller de Presidencia Jordi Turull, que abrirá una semana de interrogatorios protagonizada por antiguos miembros del Govern de Carles Puigdemont, entre ellos el exconseller de Exteriores Raül Romeva y el de Territorio Josep Rull, y en paralelo el alto tribunal tendrá que deliberar por un último intento de los acusados de recusar a los jueces frente a los que se sientan.
La sesión comenzará, como es habitual, a las 10:00 horas de la mañana. Jordi Turull (PDeCAT), a diferencia del líder de ERC, Oriol Junqueras, sí contestará a las preguntas de la Fiscalía, aunque no a las de la acusación popular ejercida por Vox, tal y como han avanzado fuentes de su defensa.
Turull se enfrenta a una petición de 16 años de cárcel que solicitó para él la Fiscalía por rebelión agravada con malversación -la Abogacía del Estado le pide once años y medio por sedición y malversación-, por su papel clave en el desafío independentista catalán como titular de la consellería de Presidencia [ver los delitos y peticiones de pena en el juicio del "procés"].
Turull era uno de los hombres fuertes del Govern de Puigdemont, y llegó a someterse sin éxito hace casi un año a una votación de investidura como presidente de la Generalitat, precisamente la víspera de ingresar en prisión preventiva por segunda vez, procesado por un delito de rebelión por el juez Llarena
Según las acusaciones, Jordi Turull organizó la publicidad del 1-O y la logística de la votación a través del Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información.
Un último intento de recusar al tribunal
Mientras la declaración de los exconsejeros tiene lugar, la denominada Sala 61 del Tribunal Supremo se reunirá para deliberar el incidente de nulidad que el abogado de Turull, que también lo es de Josep Rull y del expresidente de la ANC Jordi Sànchez, ha presentado contra la decisión de no apartar del tribunal al presidente de la Sala de lo Penal, Manuel Marchena, y los otros seis miembros de este órgano.
Previsiblemente esta intención del abogado Jordi Pina de que el auto del pasado 5 de diciembre sea anulado será rechazada, pues la Sala especial del artículo 61 de la Ley Orgánica del Poder Judicial acordó por unanimidad que el tribunal siguiese compuesto por los magistrados Manuel Marchena, Andrés Martínez Arrieta, Juan Ramón Berdugo, Luciano Varela, Antonio del Moral, Andrés Palomo y Ana Ferrer [Así es el tribunal que juzga el "procés"].
Aunque la recusación fue presentada por ocho de los procesados en la causa por rebelión en Cataluña, sólo la defensa de Sànchez, Turull y Rull ha presentado este incidente de nulidad con el fin agotar todas las vías judiciales y poder acudir al Tribunal Constitucional para denunciar una posible vulneración de derechos fundamentales.
Consideran los acusados que el tribunal no es imparcial tras revelarse el nombre del juez Marchena como posible presidente del Consejo General del Poder Judicial (GGPJ), en el marco del pacto fallido entre el PSOE y PP para renovar el órgano de gobierno de los jueces y también por la polémica generada por el whatsapp enviado por el portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, en el que presumía que la elección de Marchena permitiría controlar "desde atrás" la Sala Segunda del Tribunal Supremo.
Para la Sala del 61 el mensaje del senador del PP no mancha la imparcialidad del presidente de la Sala de lo Penal ni afecta a la del resto de sus compañeros, pues es algo que debe interpretarse como una opinión "inaceptable" realizad en ámbito político y que no es trasladable al ámbito jurisdiccional.
También el Tribunal Constitucional rechazó admitir un recurso de amparo de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell contra la decisión del Supremo de no admitir la recusación del juez instructor de la causa del "procés", Pablo Llarena, al considerar prematuro dicho recurso.
Tras Turull, declararán Romeva y Rull
Sea como sea, tras la declaración de Jordi Turull, vendrá el interrogatorio de Raül Romeva, que también afronta 16 años de cárcel y que comparte la misma defensa que Oriol Junqueras, por lo que es probable que siga su estrategia de negarse a responder a la Fiscalía y al resto de acusaciones del caso.
Romeva tendrá que responder por las acusaciones de rebelión y malversación por liderar supuestamente la campaña exterior del Govern para legitimar el "procés" internacionalmente, mediante el Diplocat -que la Fiscalía considera un "lobby" para difundir el mensaje independentista en el extranjero- y las delegaciones catalanas en el exterior.
Posteriormente, el tribunal tiene previsto el interrogatorio de Josep Rull, exconseller de Territorio al que la Fiscalía pide 16 años de cárcel por alentar a los ciudadanos a votar el 1-O e impedir que un barco que llevaba a Cataluña a policías destinados a evitar el referéndum pudiera atracar en el puerto de Palamós (Girona).
Según el calendario programado, Dolors Bassa, de ERC, declarará después de Turull y cerrará la ronda de interrogatorios a los exconsellers que permanecen en prisión preventiva acusados de rebelión agravada con malversación. Bassa, exconsellera de Trabajo, está acusada de crear una base de voluntarios para la consulta y de ocultar gastos del referéndum desde acuerdos marco firmados por su Departamento.