IU votará en marzo si concurre a las elecciones generales en coalición con Podemos
- La fecha de la consulta se fijará este sábado pero probablemente será entre el 4 y el 10 de marzo
- También tiene que fijar su calendario para elegir a su candidato a la Presidencia del Gobierno
La Coordinadora Federal de IU se reúne este sábado para aprobar el reglamento y calendario de primarias para las elecciones generales del 28 de abril y fijar la fecha del referéndum para que sus bases decidan si quieren concurrir en coalición con Podemos, que según la propuesta de la dirección será entre el 4 y el 10 de marzo.
El adelanto de las elecciones generales ha acelerado los tiempo tanto en IU como en Podemos que tienen que negociar ya el acuerdo de confluencia para las elecciones generales porque el 15 de marzo es la fecha tope para registrar las coaliciones electorales.
A la espera de que se cierre ese acuerdo, IU preparará este fin de semana su reglamento de primarias y el referéndum que tiene pensado convocar entre su militancia entre el 4 y el 9 de marzo de forma "online" y el 10 de marzo con votación presencial.
"¿Estás de acuerdo con que Izquierda Unida concurra en coalición electoral con Podemos, Equo y otras organizaciones políticas en las elecciones generales de 2019 en base al siguiente acuerdo -el que firmen con Podemos-?", es la pregunta que se propone desde la dirección federal de Alberto Garzón y que tendrá que ratificarse este fin de semana.
Primarias para elegir a su candidato a la Presidencia
En cuanto a las primarias para elegir a su candidato a la Presidencia del Gobierno y los candidatos de IU al Congreso en cada circunscripción provincial, se propone también regular un proceso que arrancaría con la presentación de candidaturas del 23 de febrero hasta el 1 de marzo.
La votación se realizará en las mismas fechas que el referéndum sobre las alianzas: del 4 al 9 de marzo de forma telemática, y presencial el día 10. El 16 de marzo, según la propuesta que debatirá la Coordinadora Federal, la Asamblea Política y Social ratificaría a todos los candidatos y aprobaría el programa electoral.
Otras alianzas frustradas
Así, IU ha dado ya por perdidas las alianzas para las autonómicas en Asturias, Murcia y Navarra, y ve serias complicaciones para cerrar a tiempo otras, como las de Madrid, Aragón y Castilla y León, según confirmó la dirección federal a Europa Press. Tampoco da por seguro, aunque estaba ya bastante avanzando, el acuerdo para las europeas.
En este contexto, IU espera poder abordar cuanto antes con el partido de Pablo Iglesias los detalles para avanzar en la confluencia estatal, para reeditar la coalición Unidos Podemos que sellaron para las elecciones de 2016. Eso sí, avisa que no va a dejar de prepara una posible candidatura en solitario, en caso de que el acuerdo no sea posible o el partido morado quiera dilatar demasiado los tiempos.
En las pasadas generales, Iglesias y Garzón anunciaron la alianza, conocida ya como "el pacto de los botellines" --por la foto que ambos se hicieron mientras lo celebraban--, a cinco días de que se cerrara el plazo para registrar coaliciones, por lo que las negociaciones para el reparto de puestos se llevó a cabo de urgencia, y sin primarias conjuntas.
En 2016 Garzón ocupó el quinto puesto de la lista por Madrid, tras Iglesias, Montero, Errejón y la ahora exdirigente Carolina Bescansa. Además, IU acordó que su presencia en la listas se basaría en la proporción de 1 a 6, tomado como referencia una estimación de los escaños que habrían logrado en las generales del 2015 si hubiera concurrido juntos, y no por separado --unos 58 diputados, según sus cálculos--.
En esta ocasión, también se da por descartado la celebración de primarias conjuntas en el caso de que haya acuerdo, ya que los plazos vuelve a ser ajustados, en este caso por el adelanto electoral.
Además, las exigencias de IU serán ahora previsiblemente más elevadas, ya que las expectativas de voto de la coalición, según las encuestas, no son precisamente buenas, y la mayoría apuntan a un descenso de los apoyos hasta el 15%, frente al 21% que sacaron en 2016.
Dado que lograr escaño se presenta ahora más complicado que en los últimos comicios, la organización defenderá situar a sus diputados en puestos más privilegiados. En los acuerdos para las europeas, autonómicas y municipales la proporción que están negociación es la de 3 puestos de cada diez.