La Fiscalía anuncia que Netanyahu será imputado en tres casos de corrupción
- La decisión podría influir en los resultados de las elecciones generales que Israel celebra el 9 de abril
- Netanyahu ha rehazado todas las acusaciones y alega ser víctima de una "caza de brujas"
La Fiscalía General ha anunciado este jueves que imputará al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, por fraude, cohecho y ruptura de la confianza en tres casos de corrupción. Esta decisión podría influir en los resultados de las próximas elecciones generales, que se celebrarán en Israel el próximo 9 de abril.
La imputación final no tendrá lugar hasta que se celebre una vista que podría retrasarse durante meses o incluso un año en la que el acusado puede argumentar contra el análisis legal o las pruebas y presentar argumentos en su defensa.
La respuesta de Netanyahu no ha tardado en llegar. En la comparecencia que ha hecho dos horas después de conocerse el anuncio de la Fiscalía, el primer ministro ha asegurado que está siendo víctima de una "caza de brujas" y se ha mostrado convencido de que todas las acusaciones se desplomarán "como un castillo de naipes".
"Seguiré sirviendo como primer ministro muchos, muchos años", ha advertido el jefe del Gobierno israelí en una intervención televisada.
Netanyahu dice ser víctima de una "caza de brujas"
Netanyahu ha defendido los logros de su Gobierno durante la última década y ha asegurado que las políticas que está llevando a cabo están conduciendo al Estado de Israel a "su mejor década en seguridad, en economía, en todos los campos".
"Todas mis decisiones y todas mis actividades se hicieron legalmente; todos esto es falso, falsos, grandes libelos de sangre. Todo político", ha lamentado y ha criticado lo "absurdo" de convertir una buena cobertura en los medios en un asunto criminal.
El cargo más grave por el que se le acusa, el de cohecho, está vinculado al denominado Caso 4000 o caso Bezeq, en el que se investiga si Netanyahu hizo favores al gigante de telefonía Bezeq a cambio de cobertura favorable de él y su mujer Sara en el popular diario de noticias digital Walla, controlado por el mismo empresario, Shaul Elovitch.
Los cargos de fraude y ruptura de la confianza, un delito que pueden cometer funcionarios públicos, se repiten en los casos conocidos como 1000 y 2000.
El primero estudia si Netanyahu y su familia recibieron caros regalos de los empresarios millonarios Arnon Milchan y James Packer a cambio de favores políticos.
El 2000 investiga si el jefe del Gobierno intentó llegar a un acuerdo con el dueño del diario Yediot Aharonot para lograr una cobertura positiva a cambio de restringir la circulación del diario rival, el gratuito Israel Hayom.
La oposición le exige que deje el cargo
La oposición israelí ha pedido este jueves a Netanyahu que abandone su cargo y no se presente a las elecciones. La jefa de la oposición y líder del Partido Laborista, Shelly Yajimovich, ha asegurado que Netanyahu no puede seguir encabezando el Ejecutivo tras el anuncio de su imputación.
"Desde este triste momento, Netanyahu está luchando por su vida personal, no es apto para luchar por las vidas de los ciudadanos del Estado, no es apto para ser primer ministro y no es apto siquiera para presentarse a las elecciones", ha señalado la líder laborista en un comunicado difundido por el digital Times of Israel.
"Si eres un patriota que amas a tu país, ve y limpia tu nombre sin llevarte todo el país contigo como rehén", ha añadido.
Más de dos años de investigaciones
La decisión del fiscal general, Avijai Mandelblit, llega tras más de dos años de investigaciones y una recomendación policial de imputar al primer ministro.
El anuncio se ha producido a pesar de los intentos del partido de Netanyahu, el derechista Likud, que este mismo jueves ha recurrido al Tribunal Supremo para pedir que retrasar el anuncio al considerar que afectará "de forma injusta" las perspectivas de reelección de quien ostenta el cargo de jefe del Gobierno desde hace una década.
En diciembre, Netanyahu declaró que si era imputado no dimitirá y tampoco se espera que abandone su candidatura a las elecciones generales ni la presidencia del partido Likud.
Según una encuesta difundida este jueves por el digital Times of Israel, la decisión de la Fiscalía puede tener un fuerte impacto en la intención de voto, llegando a impedir las posibilidades del Likud de formar Gobierno y facilitando que lo haga el principal rival, la nueva formación centrista Azul y Blanco, encabezada por el exjefe del Estado Mayor, Beni Gantz.