Más de 300 médicos y enfermeros sufrieron alguna agresión en 2018
- La mayoría, el 55%, fueron mujeres, según el balance de la Policía Nacional para prevenir agresiones
- La comunidad que más agresiones registró fue Andalucía y la mayoría del total de incidentes se produjo en verano
En 2018 se denunciaron 298 agresiones a profesionales sanitarios -entre médicos y enfermeros- que ocasionaron 322 víctimas, de las que el 54,96 % fueron mujeres, según consta en el balance de la Policía Nacional sobre la labor que desarrolla para prevenir estos ataques.
En declaraciones a los medios antes de la reunión con las organizaciones profesionales del sector, el interlocutor policial nacional sanitario, el comisario Javier Galván, ha detallado que la mayoría de los delitos que se producen son intimidatorios de carácter verbal y que las lesiones suponen un 18 % del total.
"Con que haya solamente una agresión es una situación no deseada para la Policía Nacional", ha asegurado el comisario, que ha dicho que entre los delitos hay injurias, calumnias, delitos contra el honor, amenazas, coacciones, etc.
Andalucía es la comunidad que registró más casos el pasado año y los meses de julio y agosto son en los que los profesionales sufren más agresiones, además de que el martes es el día de la semana más conflictivo y las franjas horarias con mayores incidencias son las que oscilan entre las 10 y las 12 de la mañana y las 17 horas.
Los hurtos a estos profesionales despuntaron en los meses de enero y junio de 2018 y los sábados fueron los días con mayor incidencia, en torno a las once de la mañana, mientras que los robos con fuerza sobresalieron en agosto: los viernes registraron más casos, sobre todo alrededor a las 15 y a las 21 horas.
Descenso generalizado de las agresiones
Galván ha subrayado que pese a los "repuntes" en los meses estivales, "a nivel genérico" ha habido un descenso de todas las agresiones y la actividad delictiva en el ámbito sanitario, "una tendencia a la baja" que principalmente se ha producido en diciembre del año pasado.
Este balance es la primera vez que se realiza ya que la figura del interlocutor nacional sanitario fue designada en julio de 2017 y se puso en marcha a finales de ese año y anteriormente no se recogían datos de manera especifica en el sistema de criminalidad de la Policía Nacional, con lo que no hay un "análisis comparativo detallado", ha precisado Galván.
El comisario jefe de la Brigada Central de Inspección e Investigación ha señalado que "normalmente" la mitad de estas agresiones las sufren los médicos y la otra mitad los enfermeros y respecto al perfil del agresor ha indicado que "sobre todo es el acompañante del paciente".
Entre los detonantes de esas agresiones ha citado la falta de equidad en la atención sanitaria, estar en desacuerdo con el diagnostico, la masificación de las urgencias o los intentos de fraude en relación con las bajas médicas.
El comisario general de Seguridad Ciudadana, Juan Carlos Castro, ha indicado que "fundamentalmente" las agresiones se produjeron en atención primaria y "no tanto en hospitales".
"No hablamos de grandísimas cifras de agresiones a los profesionales sanitarios, un grupo vulnerable al que pretendemos dar especial atención, pero sí se ha notado un descenso salpicado de altibajos en julio y agosto", ha subrayado Castro.
El Colegio de Médicos sube la cifra a 515 casos
Sin embargo, el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), Serafín Romero, ha advertido de que las comunicaciones recibidas en esta organización sobre agresiones a médicos durante 2018 -que presentarán la próxima semana- son "excesivamente altas" y rondan los 515 casos registrados en 2017, aunque no todos terminaron en denuncia.
"Los datos no dejan de ser la punta de un iceberg de una situación que no está registrada, aunque ahora se está haciendo un esfuerzo por parte de la Policía, las administraciones y los profesionales".
Durante 2018, la Policía Nacional, que cuenta con 60 agentes por todas la geografía española que hacen de interlocutores con el sector sanitario, realizó 1.377 reuniones por toda España para evitar las agresiones y se organizaron 85 jornadas de prevención mediante técnicas de contención verbal y escucha activa.
Desde la creación del interlocutor policial, se ha realizado un censo de centros hospitalarios que han sido catalogados según su nivel de riesgo, una información que se actualiza cada seis meses para conocer el catálogo de medidas preventivas que posee cada instalación para poder adoptar las medidas específicas oportunas.