Francia prohibirá las manifestaciones de los 'chalecos amarillos' en los Campos Elíseos si prevé altercados

• El primer ministro impedirá las marchas en cuanto detecte violencia como la del sábado en París
• Destituyen al jefe de la Prefectura de la Policía parisina, Michel Depluech, por su gestión de las manifestaciones

El Gobierno francés prohibirá las marchas violentas de 'chalecos amarillos'

El Gobierno francés ha anunciado este lunes que no permitirá las manifestaciones de los chalecos amarillos en los Campos Elíseos de París, ni en otros lugares señalados, si sospecha que pueden volver a repetirse los altercados y pillajes producidos durante las marchas del sábado.

El primer ministro, Édouard Philippe, ha explicado que las restricciones se aplicarán desde el momento en que se tenga conocimiento de la "presencia de militares ultra" con voluntad de causar destrozos. La prohibición se aplicará en otras ciudades francesas, coo Burdeos o Toulouse, donde se han producido un gran número de incidentes violentos en los próximos meses.

Philippe también ha anunciado que las fuerzas del orden tendrán más autonomía para actuar y procederán "a la dispersión inmediata" cuando haya concentraciones con elementos vandálicos, para lo que utilizarán drones e imágenes de vídeo. Según el Gobierno francés, 154 comercios sufrieron pillajes el sábado y 27 resultaron destruidos en París.

Extremistas organizados saquean los Campos Elíseos de París durante la protesta de los 'chalecos amarillos'

Destituyen al jefe de la Policía parisina

El primer ministro también ha reconocido que la estrategia empleada desde diciembre "no se aplicó correctamente" el sábado en París, por lo que "la movilidad y la reactividad de las fuerzas del orden [...] fallaron en la conducción de las operaciones". Por este motivo, Philippe ha destituido al criticado responsable de la Prefectura de la Policía de la capital, Michel Depluech, que será sustituido por Didier Lallement.

En una entrevista en France 2, Philippe se ha visto obligado a acallar los rumores sobre la posible dimisión del ministro del Interior Castaner, también criticado por su reacción a las protestas del sábado, y ha defendido al presidente, Emmanuel Macron, que estuvo esquiando el sábado en los Pirineos hasta por la tarde a pesar de la crisis por las manifestaciones. Según el primer ministro, el repunte de la violencia no es casual, ya que el debate nacional de Macron en respuesta a la crisis de los chalecos amarillos está siendo "un éxito" en su opinión.

Por último, Philippe ha recalcado que ha insistido en que las personas que acudieron a los Campos Elíseos no eran manifestantes, "sino alborotadores", con un único objetivo: "Saquear, robar e incendiar". De hecho, el dirigente ha señalado que no confunde "a los vielntos con la mayor parte de los chalecos amarillos, que ahora no se manifiestan", en alusión a la caída del seguimiento de este tipo de convocatorias.