El detenido por ayudar a morir a su mujer: "No me arrepiento de nada"

• Hernández ha pasado la noche en su casa después de ser detenido por ayudar a morir a su mujer
• Asegura que no le preocupa lo que le pase y que lo importante es que su mujer ya no sufre y que se apruebe la ley de eutanasia

El detenido por ayudar a morir a su mujer reconoce que los más dura ha sido pasar las primeras horas de duelo arrestado

Tras pasar 24 horas detenido por ayudar a morir a su mujer, Ángel Hernández salió en la noche del pasado jueves de los juzgados, en libertad con cargos, pero sin medidas cautelares. Hernández, que ha pasado la primera noche solo en su casa, ha asegurado a TVE que no piensa en lo que le va a pasar y que no se arrepiente de lo que ha hecho: "No me arrepiento de nada, incluso estaba esperando que me lo pidiera".

"No pienso lo que me va a pasar, si me van a meter en la cárcel" ha afirmado Hernández, quien ha asegurado que lo importante son dos cosas, "una que ha dejado de sufrir mi mujer y otra que hay que intentar que la gente que está asi no sufra, que se apruebe la ley de eutanasia".

El marido de María José Carrasco, enferma de esclerosis mútiple desde hace 30 años y que se encontraba en fase terminal, ha reconocido que se le hizo muy duro pasar la noche en el calabozo pocas horas después de la muerte de su mujer.

La eutanasia ha entrado en el debate político en plena precampaña electoral. En las últimas horas todos los partidos se han posicionado. PSOE y Podemos defienden su regulación; Ciudadanos apuesta antes por regular los cuidados paliativos y el PP está en contra de una ley de eutanasia.

Hernández ha dejado todo el proceso grabado para demostrar el sufrimiento de su mujer, y para remover conciencias.

También redactó una carta fechada el pasado 10 de marzo y dada a conocer este jueves por la asociación Derecho a Morir Dignamente (DMD), en la que explica que su esposa quería poner fin a su vida y, ante la incapacidad de realizarlo por ella misma, no hubo "más remedio" que ayudarla a cumplir su deseo.

Al igual que España, países como Francia no tienen regulada la eutanasia, pero sí lo han hecho en otros como Bélgica, Holanda o Canadá.