Un interrogatorio a los agentes del 1-O convertido en "juicio a la actuación policial"

• La Fiscalía protesta por las preguntas que las defensas hacen a los policías que intervinieron el día del referéndum
• El coordinador de los antidisturbios en Girona ordenó usar las defensas porque "estaban machacando" a sus agentes

La fiscal Consuelo Madrigal: "Hay momentos en los que parece que estamos en un juicio contra la actuación policial"

La escena se repite en cada sesión de las cinco últimas semanas del juicio del 'procés'. La decisión del Tribunal Supremo de no permitir la reproducción de los vídeos del 1-O hasta que hayan terminado los interrogatorios a testigos y peritos, lleva a los abogados de las defensas a afanarse en intentar desacreditar los testimonios de los guardias civiles y policías nacionales de a pie -que jornada tras jornada, describen un ambiente "hostil" y "violento" de insultos, "patadas y puñetazos" en los colegios electorales- preguntándoles si vieron actuaciones policiales supuestamente indebidas que estas cintas refrendarían.

Hasta el punto de que este martes, trigesimosegunda sesión del juicio, la fiscal Consuelo Madrigal ha perdido la paciencia: "No se juzga a la Policía y hay preguntas que parecen que estamos en un juicio contra la actuación policial en cumplimiento de órdenes judiciales".

Los abogados que han acaparado este martes las 'broncas' del juez Manuel Marchena por la "impertinencia" de sus preguntas por este motivo han sido los tres letrados que defienden al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart. Marina Roig, Alex Solà y Benet Salellas han quitado así el puesto a Jordi Pina, abogado del expresidente de ANC Jordi Sànchez y protagonista habitual de los rifirrafes con el presidente del tribunal.

Madrigal, que fue fiscal general del Estado entre enero de 2015 y noviembre de 2016, ha protestado cuando la abogada Marina Roig ha preguntado a uno de los agentes -que acababa de relatar que recibió un golpe en la cabeza con una urna al intentar recuperarla después de que un ciudadano se la hubiera quitado a un compañero- si "no es más cierto" que uno de los miembros de su equipo de policía judicial no pudo entrar en el colegio "porque lo intentó saltando por encima de la gente, pisándola".

Después de la queja de la fiscal, Marchena ha pedido a Roig que las preguntas "no partan de la base de lo que el letrado considera ya acreditado (...). Se trata de preguntarle qué fue lo que vio". El magistrado, que se queja de que lleva "desde hace varias sesiones intentando sin éxito" que las preguntas no partan de una versión que se da ya por hecha, vuelve a insistir en que si esta versión es cierta o no "lo vamos a saber" cuando se reproduzcan los vídeos.

Las defensas creen que hay "tolerancia" con la Fiscalía

Apenas una hora antes, el presidente del tribunal había reconvenido al letrado Alex Solà, que también defiende a Cuixart, al preguntarle a uno de los 24 policías nacionales que han declarado este martes si "vio agentes de la UIP -antidisturbios- persiguiendo y golpeando a la gente". El magistrado pide al abogado que pregunte al testigo por lo que vio no por "lo que cree que debió haber visto". El letrado se queja asegurando que con la Fiscalía existe "tolerancia" para que haga preguntas como la que él acaba de formular. "No", responde Marchena. "Sí", contesta Solà. "No va por el buen camino", zanja Marchena.

Un abogado de Cuixart se queja de que a la Fiscalía se le "tolere" preguntar de forma que ellos no pueden

"Cogimos las urnas y nos las arrebataron"

Entre los 24 testigos que han declarado este martes, cuatro de ellos -un inspector y tres agentes que acudieron a los colegios el 1-O como policía judicial- han explicado por la mañana cómo les quitaron las urnas y les agredieron en el Instituto Torreforta, en Tarragona. "Cogimos las tres urnas, las intentamos sacar y nos las arrebataron las tres en tres ocasiones", ha explicado el inspector que coordinaba el equipo de no uniformados.

"A uno de los compañeros que recuperó una de las urnas, le dieron un puñetazo y lo tiraron al suelo y lo pisaron; a otro que yo ordené que grabara si había conflicto, le dieron un manotazo en la mano que llevaba el teléfono y cuando se agachó para cogerlo le dieron un puñetazo y lo tiraron al suelo; a otro compañero también forcejeando porque había recuperado una de las urnas que le habían quitado a otro compañero le dieron un golpe en la cabeza con la urna; y a otro compañero le produjeron daños en la ropa desde el tobillo hasta la ingle intentando salir, golpeándolo", ha resumido el testigo.

Un inspector de Policía del 1-O declara que les arrebataron las urnas que habían requisado agrediendo a los agentes

El agente golpeado con la urna en la cabeza ha explicado que le provocó un "chichón" a pesar de ser de plástico. El policía que intentó grabar lo ocurrido ha relatado que una de las urnas "se quedó allí" porque el jefe del dispositivo decidió que había que salir ya "porque el ambiente estaba muy violento". "Perdí la urna", ha dicho por último el compañero de los anteriores que al ir a recuperar una de las urnas recibió "un puñetazo en el rostro" por parte de un señor y cayó al suelo.

"Ordené usar las defensas porque les estaban machacando"

Entre los testigos de la tarde, han declarado seis policías que actuaron en el colegio Verd, de Girona, entre ellos el inspector que coordinó las unidades de antidisturbios el 1-O en esta provincia catalana. Este mando ha declarado que se acercó a este centro porque dejó de tener información de lo que estaba pasando allí y que cuando llegó además de pedir refuerzos ordenó usar las defensas -las porras- contra los congregados porque el grupo de agentes "estaba siendo agredido por un innumerable número de personas, que los tenían completamente bloqueados, confinados (...) les estaban básicamente machacando".

El coordinador de los antidisturios en Girona: "Di orden de usar las defensas porque estaban sufriendo una agresión bastante violenta"

El inspector responsable de esta unidad de intervención sobre el terreno ha corroborado la versión del coordinador y ha declarado que él mismo trasladó la orden de usar las defensas para "repeler las agresiones porque peligraba la integridad física" de sus hombres.

El coordinador de las UIP en Girona ha asegurado que en el colegio Verd "curiosamente" había ciudadanos que "interponían" a niños entre los policías y las personas que les estaban "imprimiendo violencia". Otros dos policías por la mañana habían explicado que en otro centro les llamó la atención que hubiera gente de avanzada edad y un joven con síndrome de Down en primera fila. [Ver vídeo]

"La pregunta no es pertinente, llevamos 20 sesiones hablando de la masa"

Y como no hay dos sin tres, el último en llevarse la reprimenda del juez Manuel Marchena ha sido el tercer abogado de Jordi Cuixart, Benet Salellas, hacia el final de la sesión de este martes cuando ha intentado preguntar a un policía que había hablado de "masa" si se refería con este término a "los ciudadanos que se encontraban manifestándose a la puerta del colegio electoral".

"Estoy intentando comprender qué es la masa", ha añadido Salellas cuando ha visto que Marchena encendía el micrófono para interrumpirle. "Mire, formule otra pregunta, que esa no es pertinente. Llevamos 20 sesiones hablando de la masa (...) Quiere un debate con el testigo acerca de lo que él entiende por masa para ver si coincide con su criterio y concluye alguna significación peyorativa", ha respondido Marchena.

Marchena, al abogado Salellas: "La pregunta no es pertinente, llevamos 20 sesiones hablando de la masa"

Cuando el abogado ha intentado explicarse de nuevo, el juez le ha vuelto a cortar: "No vamos a discutir usted y yo". Salellas ha pedido entonces que conste su protesta y el magistrado ha respondido, visiblemente cansado: "Consta su protesta".