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Elecciones generales 2019

Rivera denuncia ante la Fiscalía el acoso sufrido en el mitin de Rentería, del que acusa a la izquierda abertzale

  • Los hechos sucedieron el pasado domingo en la ciudad guipuzcoana

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Rivera denuncia ante la Fiscalía el acoso sufrido en el mitin de Rentería
Albert Rivera y Maite Pagazaurtundúa ante la Fiscalía General del Estado.

El líder de Ciudadanos y candidato a la Presidencia de Gobierno, Albert Rivera, en elecciones generales, ha presentado este miércoles una denuncia ante la Fiscalía General del Estado por los incidentes del pasado domingo en Rentería (Guipúzcoa), donde cientos de manifestantes trataron de boicotear un mitin del partido naranja. En la denuncia, acusa a la izquierda abertzale de estar detrás del acoso sufrido.

En declaraciones a los periodistas, acompañado por la eurodiputada de UPyD y candidata de Cs al Parlamento Europeo, Maite Pagazaurtundúa, Rivera ha señalado directamente a Bildu y Sortu: "No les va a gustar nada esta denuncia", ha dicho.

En la denuncia, Ciudadanos asegura que los incidentes no fueron un "hecho aislado de concentración espontánea de personas descontetas con un partido político", sino que fueron fruto de "una maniobra perfectamente organizada y coordinada para generar un odio", y apunta que fue organizada por "el entorno de la izquierda abertzale, Ernai".

En este sentido, Rivera ha explicado que su partido ha presentado datos de cuentas de Twitter y redes sociales en las que se probaría que la izquierda abertzale orquestó esta situación de acoso en un acto electoral de su partido.

Además, añade que Ernai se relaciona a nivel "identitario" con LAB y Sortu. "Es claro que se aprecia que las tácticas de instigación y asedio por parte de Ernai y su entorno, vienen promovidas con el claro objeto de menospreciar y prevalecer sobre un colectivo -el constitucionalista- y acosarlo hasta límites que han de ser conocidos por la acciones de la justicia", dice Ciudadanos a la Fiscalía.

Denuncia un presunto delito de amenazas, de injurias y de odio

Para Ciudadanos, los hechos acaecidos en Rentería podrían ser considerados como un presunto "delito de amenazas, delito de injurias y delito de odio", y especifica que desde el comienzo del acto, así como durante el tiempo que duró el mitin y tras su finalización, todos los participantes sufrieron "insultos de todo tipo, amenazas de muerte, injurias y claras expresiones de odio".

También recuerda que se colocaron "lazos amarillos gigantes en las principales fachadas, esteladas y pancartas en favor del reagrupamiento de los presos de ETA", y que asimismo se realizaron "caceroladas a fin de interrumpir y evitar la celebración del acto".

El candidato de Ciudadanos a la Presidencia del Gobierno, Albert Rivera, en Rentería

El candidato de Ciudadanos a la Presidencia del Gobierno, Albert Rivera, en el mitin electoral del pasado domingo en Rentería (Gipuzkoa). Javier Etxezarreta

Por todo ello, Ciudadanos solicita al Ministerio Público que averigüe quién o quiénes están tras los perfiles en Twitter de Ernai, " las IP's desde donde se realizaron la publicación de las proclamas de odio y se les tome declaración en calidad de investigados por ser las personas promotoras e instigadoras de los actos violentos en el mitin" así como "de la publicidad en Redes Sociales para la difusión de los mensajes de odio existentes el día de autos".

Asimismo, insta a averiguar quiénes fueron los autores de los delitos de odio, injurias y amenazas que denuncia, recabando las grabaciones de las cámaras de seguridad de los establecimientos cercanos.

Inicialmente no pensaban denunciar

Este lunes Rivera descartó que su partido acudiera a la Fiscalía por estos hechos, porque se iban a centrar en la campaña para las elecciones generales del 28 de abril, aunque entonces dijo que, en su opinión, la Fiscalía podía actuar de oficio contra quienes dirigieron "insultos y amenazas" a los asistentes al mitin, que se pudo celebrar gracias al amplio dispositivo que estableció la Ertzaintza.

Los policías, que tuvieron que escoltar a los participantes en el acto, llegaron a cargar contra algunos manifestantes para abrir paso a los afiliados de Cs y los periodistas mientras abandonaban la plaza de los Fueros, donde habían permanecido dentro de un espacio vallado.

Algunos de los calificativos que se escucharon fueron "asquerosos, fascistas, hijos de puta, españoles y cobardes", y algunas personas también escupieron y lanzaron algún objeto, como un mechero, una botella llena de agua o un huevo.