La reaparición de Leopoldo López revitaliza a la oposición venezolana
- La liberación del líder opositor, que estaba bajo arresto domiciliario, empuja a la oposición a las calles
- Tras ser liberado por Juan Guaidó, se ha refugiado con su familia en la embajada de España
El líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, es un símbolo para la oposición venezolana y su lucha contra el gobierno de Nicolás Maduro. Después de tres años de prisión y dos de arresto domiciliario, verle libre junto a Juan Guaidó, autoproclamado presidente de Venezuela, ha dado alas a los opositores, que han salido a manifestarse de forma multitudinaria después de ver a ambos llamando a ganar las calles para sacar a Maduro del Gobierno.
Porque López siempre ha sido capaz de movilizar a los venezolanos: en 2014, encabezó una serie de multitudinarias manifestaciones contra el Gobierno chavista que le llevaron a ser condenado a casi 14 años de prisión por incitación pública a la violencia. Así que su imagen, fuera de su casa y acompañando a Guaidó, ha revitalizado las protestas contra Maduro.
Así lo atestiguan ciudadanos como Félix García, programador de 30 años: "Los ánimos estaban bajos pero cuando vimos a Leopoldo López en las calles de Caracas fue una señal para volver nuevamente a la pelea ", relataba este martes, con una máscara antigás colgando de su cuello y trozos de hormigón en los bolsillos de su sudadera con capucha.
La oposición renace
López, de 48 años, fue quien supervisó el ascenso de Guaidó, rambién militante de Voluntad Popular, de líder estudiantil a cabeza de la oposición, y sigue siendo una figura clave para la oposición. Una docena de manifestantes aseguraban que su regreso les ha dado nueva confianza en el plan propuesto por Guaidó, quien, como presidente de la Asamblea Nacional, el parlamento venezolano, se autoproclamó "presidente encargado de Venezuela" en enero y denuncia a Maduro como un usurpador.
Pero sus seguidores también advierten que el Gobierno podría utilizar su regreso para acabar con él. "Cuando lo vimos con Guaidó, nos llenó de esperanza, nos ha dado más fuerza que nunca para terminar esto tan pronto como sea posible", insiste Eduardo, de 27 años, y que prefiere no dar su apellido.
López no había puesto un pie fuera de su casa desde que en 2017 salió de la prisión de Ramo Verde para cumplir condena en arresto domiciliario. Y, de repente, aparece en un paso elevado en La Carlota, en las inmediaciones de la base aérea, junto a Guaidó y miembros del ejército venezolano. Guaidó contó después ha declarado que los agentes de inteligencia que le custodiaban le permitieron salir de su casa tras prometerles una amnistía.
"Buenos días, Venezuela"
"Buenos días, Venezuela", empezó López sus primeras declaraciones tras ser liberado, en las que pedía tomar las calles: "Para todos mis hermanos en las fuerzas armadas, ahora es el momento". Después de asistir a una serie de mítines en Caracas, López y su familia se trasladaron primero a la embajada de Chile, y después a la de España, donde se encuentran acogidos.
En cualquier caso, esa aparición de Guaido y López llamando al levantamiento militar junto a un grupo de uniformados ha sido hasta ahora la apuesta más audaz de la oposición para conseguir que el Ejército venezolano se levante contra Maduro. El Gobierno ha insistido en que los líderes militares son leales y en que el "golpe de Estado" no ha tenido éxito, pero no cabe duda de que la iniciativa erosiona la legitimidad de Maduro.
Por ello, el Ejecutivo ha llamado a los chavistas a movilizarse también en la calle este 1 de mayo. Pero, por el momento, no ha comentado hasta ahora si tratará de a arrestar a López por romper su arresto domiciliario. Uno de los líderes chavistas, Diosdado Cabello, que presiden la Asamblea Nacional Constituyente, denunció a López en Twitter el martes como "asesino fascista".
Pero líderes de la oposición y críticos de todo el mundo han calificado la condena contra Leopoldo López como una farsa y una burla a la justicia. "Es una figura que siempre hemos seguido", recalcaba Eduardo, en medio de una protesta al sur de Caracas disuelta por soldados que disparaban gases lacrimógenos a la multitud.