Vuitton monta su pasarela en el mítico aeropuerto JFK

• El desfile presentó la colección crucero para la temporada 2020
• El edificio Chrysler, de estética art déco, inspira a Nicolas Ghesquière

Desfile con la colección crucero 2020 de Louis Vuitton.

Mónaco, Palm Spring, Brasil, Japón, la Costa Azul y ahora Nueva York. Los viajes forman parte del adn de esta casa desde que un jovencito Louis Vuitton, con tan solo 16 años, se fue a París emprendiendo el trayecto que marcaría su vida. Ahora, y en honor a su fundador, el equipo se traslada a la terminal 5 del aeropuerto JFK, un monumento a la aviación de los años 60 que se acaba de restaurar para ser un hotel.

Un espacio único para envolver una colección atrevida, de fuerte carga estética y con potentes guiños a los años 80. Destaca la arriesgada mezcla de códigos que hay en las prendas: detalles deportivos, aires futuristas e incluso texturas y piezas lenceras que Nicolas Ghesquière reinventa con un aire vanguardista.

La rica bandera de tejidos eleva la carga estética de la colección. AFP

El modisto juega con el color y propone contrastes de blanco y negro, casi siempre en rayas grandes, e introduce golpes de alegres fucsia, azul metalizado, óxido y un morado nazareno que conviven con suaves rosas asalmonados y sencillos verdes menta. Las texturas satinadas y el PVC contrastan con la piel, los brocados y el terciopelo que forman una rica bandera de tejidos que a veces se mezcla en forma de patchwork o se utiliza con atrevidas superposiciones.

Las prendas toman prestadas las formas del edificio Chrysler. AFP

Los volúmenes van muy contenidos. Ghesquière hace un perfecto ejercicio de equilibrio con las siluetas y aunque vemos algunas muy arriesgadas siempre están muy controladas. Los patrones van muy estructurados para remarcar ese carácter arquitectónico de la colección. Nueva York es la inspiración y su skyline va estampado sobre cazadoras deportivas que se combinan con faldas acolchadas.

Vuitton firma un excelente trabajo con prendas de patrón arquitectónico. AFP

Pero hay más. Los ornamentos y las gárgolas del edificio Chysler, uno de los símbolos de la Gran Manzana, inspiran vestidos de fiesta y cóctel pero también complementos que van decorados con las formas art déco del famoso rascacielos. E incluso brocados y bordados con pasamanería metalizada y cristal.

Llaman poderosamente los vestidos con ricos tejidos que la casa combina, potenciando el contraste que recorre la colección, con las icónicas botas Dr. Martins. Este calzado, que se lanzó en 1960 y sigue gozando de enorme popularidad y aceptación, tiene el enorme poder de cambiar el estilo a cualquier look.

La minifalda rivaliza en protagonismo con el pantalón. AFP

El pantalón de pinzas y las bermudas llevan la caja amplia y el bajo estrecho y rivalizan con la faldas mini, prenda que Ghesquière presenta en múltiples versiones. Destacan las hechas en piel con cintura elástica y las que llevan glamurosos pliegues abullonados que esconden los bolsillos. Piezas sofisticadas que coquetean con la tendencia que hay ahora a sobredimensionar detalles, aunque en este caso se hace con bastante moderación.

Las aplicaciones de encaje contrastan con la piel y el PVC. AFP

Las rodilleras, las cremalleras y los mitones potencian el estilo deportivo que se rebaja con las aplicaciones de encaje, tejido que adopta un nuevo aire, más moderno y vanguardista.

El maquillaje exagerado potencia el look ochentero. AFP

Y Ghesquière lo logra utilizándolo de manera atrevida sobre chaquetas de cuero de colores potentes o sobre un blazer en raso de seda.

El maquillaje, rompedor, invita a viajar a los añorados años ochenta: ojos con un grueso delineado, sombras exageradas en fuertes rosa y rojo y labios con intensos tonos carmín.

Algunas de las modelos llevaban estudiados peinados con tupé (algunas recordaban a Rachael, la replicante de Blade Runner) y otras llevaban cascos futuristas.

En la lista de invitados destacaron ‘chicas Vuitton’, como Alicia Vikander, Michelle Williams y Jennifer Connelly que se sentaron en la primera fila junto a a otras fieles seguidoras de la casa como Cate Blanchet, Emma Stone, Lea Seydoux, Julianne Moore y Sophie Turner.

La actriz de Juego de Tronos fue con su marido, Joe Jonas. La pareja, que se ha casado recientemente en Las Vegas, fue vestida por la casa francesa a la gala del MET.

Alicia Vikander, Jennifer Connelly, Michelle Williams, Emma Stone, Lea Seydoux y Cate Blanchett. AFP