Las defensas buscan desmontar la rebelión mostrando vídeos de porrazos y patadas de Policía y Guardia Civil el 1-O
- Los abogados de los acusados intentan demostrar que la única "violencia" que hubo fue la policial
- La Fiscalía mantiene la acusación por rebelión para Oriol Junqueras y otros ocho acusados
Durante los interrogatorios de los agentes de la Policía y la Guardia Civil que actuaron el 1-O en Cataluña, las defensas de los doce líderes independentistas insistieron una y otra vez en que querían proyectar los vídeos de cada una de las intervenciones de las que hablaban para contrastar sus declaraciones con las imágenes, pero el presidente del tribunal, Manuel Marchena, les respondió otras tantas veces que estas imágenes no se verían hasta interrogados los más de 400 testigos. Y el juicio del 'procés' llegó así a la jornada número 49. No ha sido hasta este miércoles cuando los letrados han podido exhibir durante cerca de cinco horas centenares de vídeos para intentar demostrar su tesis de que la única "violencia" que hubo en Cataluña fue la policial y para ello han mostrado grabaciones de agentes dando patadas y porrazos a los concentrados en los colegios electorales y de ciudadanos con las cabezas ensangrentadas.
La esperada jornada empieza como todos los días a las diez de la mañana. El largo centenar de personas que acuden como público entre ciudadanos de a pie, familiares de los acusados y periodistas entra en la Sala de Plenos buscando un buen sitio para poder ver bien una de las cuatro pantallas dispuestas por el Tribunal Supremo. "¿Yo aquí?", pregunta un ciudadano señalando uno de los primeros bancos reservados. "No, al fondo", le contesta una de las funcionarias del Supremo, convertida por un momento en una improvisada acomodadora de cine.
Los primera media hora de la sesión se dedica a terminar de ver los vídeos de la Abogacía del Estado. En uno de ellos se ve al expresidente de la ANC Jordi Sànchez en un acto de apoyo al referéndum en Montjuic. Parece un vídeo más, pero de repente el acusado pronuncia una frase que escuchada desde el mismo corazón del Tribunal Supremo con su autor en prisión preventiva desde hace más de año y medio, produce un extraña sensación entre los presentes. "No hay suficientes cárceles para todo un pueblo, no hay suficientes jueces para llevar a todo un país delante de los tribunales", decía entonces.
[Vídeos de la Abogacía del Estado]
Los siete miembros del tribunal no mutan el gesto. Analizan durante toda la jornada uno tras uno los vídeos con especial atención. Los acusados -todos menos Oriol Junqueras, Raül Romeva y el propio Sànchez, que han preferido mantenerse detrás de sus abogados- buscan desde los bancos centrales la mejor postura para ver las imágenes. Los dos policías nacionales que en todo momento vigilan la Sala mantienen el rostro hierático ya se proyecte el enésimo vídeo sobre el ambiente "festivo" del 20S o se muestren las cargas de sus compañeros de cuerpo. Los funcionarios judiciales intervienen de vez en cuando para mandar callar. "Perdone, no se puede hablar", le dice uno de ellos a los invitados.
[Vídeos defensas I] [Vídeos defensas II] [Vídeos defensas III]
Los vídeos de las cargas policiales del 1-O
La reproducción de los vídeos de las defensas arranca pasadas las diez y media. Al contrario que la Fiscalía, que un día hizo una exposición caótica sin identificar los lugares de muchos de los vídeos, los letrados traen todo ordenado. El presidente de la Sala, Manuel Marchena, apenas tiene que preguntar. Solo le pide a Paco, el funcionario encargado de poner los vídeos, que vaya más despacio cuando se trata solo de fotografías para que las puedan ver bien.
Uno de los primeros vídeos exhibidos ha sido el del desalojo de la escalera del colegio Pau Claris de Barcelona, en el que puede verse a uno de los antidisturbios de la Policía Nacional saltar desde uno de los escalones sobre un ciudadano que está tirado en un descansillo.
Muchos de los vídeos proyectados este miércoles por las defensas muestran cómo agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil golpean a los ciudadanos con las porras en la cabeza. Durante los interrogatorios, fueron muy pocos los testigos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que reconocieron que se pegó de esta manera a los concentrados. Solo lo reconoció abiertamente un capitán de la Guardia Civil que actuó en Sant Carles de la Rapita (Tarragona) aunque lo justificó insistiendo en la legitimidad del uso de la fuerza porque estaban siendo agredidos por los ciudadanos.
Entre los vídeos proyectados por las defensas está también el de la actuación de la Policía Nacional en el Colegio Verd de Girona, donde se ve a varios agentes dar golpes con las defensas -las porras- a ciudadanos que les impedían el paso.
También este otro de la escuela Mediterráneo de Barcelona.
En otros como este de la llegada a las Escolas Pias de Sant Antoni uno de los agentes de paisano propina una patada a un hombre mayor que está en el suelo.
También se ha proyectado un vídeo del que se habló mucho en la fase testifical -de hecho al abogado Jordi Pina le costó un enfrentamiento con Marchena cuando intentó reproducirlo en el móvil que llevaba en la mano-. Es un vídeo de un centro en Callús, donde se ve cómo los agentes entran en el centro arrollando al alcalde.
En los vídeos se ve a los ciudadanos cantar "som gent de pau" y "solo queremos votar", pero también se escuchan los insultos a los agentes y se ve a ciudadanos ejerciendo algo más que resistencia pacífica al empujar con fuerza a los agentes para que no entraran en los centros. De hecho uno de estos vídeos, del Instituto Quercus, fue proyectado este martes por la Fiscalía para demostrar exactamente todo lo contrario a lo que pretenden las defensas.
El abogado de Forn da la sorpresa
Así que el abogado del exconseller de Interior Joaquim Forn ha dado la sorpresa al proyectar un solo vídeo. Un montaje de incidentes violentos que acabaron con cargas como la protesta de 'Aturem el Parlament', la manifestación 'Rodea el Congreso', o los disturbios en el barrio burgales de Gamonal. Su objetivo, intentar demostrar que estas manifestaciones sí que fueron violentas y lo que ocurrió el 1-O no.
En el receso de la mañana, Joana y Teresa, que han venido este jueves de público, comentan que "los vídeos se deberían haber visto antes", cuando estaban declarando los agentes. "La realidad supera la ficción", dicen a RTVE.es. La decisión la tomará el Supremo una vez que acabe el juicio el próximo 12 de junio.
Por el momento, apenas hay tiempo para digerir los vídeos. Nada más acabar la prueba testifical, el tribunal pregunta a las acusaciones si mantienen sus escritos iniciales. La Fiscalía no duda y sostiene que hubo rebelión y mantiene la petición de 25 años de cárcel para Junqueras. La Abogacía, la acusación de sedición. La sentencia no se conocerá hasta después del verano.