Assange presenta síntomas de "tortura psicológica", según el relator de la ONU

• El relator especial para casos de tortura encuentra pruebas "abrumadoras" tras visitar en prisión al fundador de WikiLeaks
• Asegura que ha estado sometido "durante años a castigos crueles, inhumanos y degradantes"

Assange, tras comparecer ante un tribunal británico el pasado 1 de mayo.

El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, presenta "todos los síntomas de tortura psicológica" a causa de una campaña de difamación por parte de medios de comunicación, autoridades judiciales y políticas, según ha afirmado este viernes el relator especal de la ONU para casos de tortura.

Nils Melzer, experto independiente e investigador sobre Derechos Humanos, visitó a Assange el pasado 9 de mayo en una cárcel de alta seguridad de Londres donde cumple condena por haber incumplido en 2012 las condiciones de libertad condicional para refugiarse en la Embajada de Ecuador.

El entorno de Assange ha denunciado un empeoramiento de la salud del fundador de WikiLeaks y la han atribuido a la reclusión durante casi siete años en la legación ecuatoriana y a las presiones infligidas. Acompañado por dos médicos, Melzer ha constatado que es "obvio" que el contexto "extremadamente hostil y arbitrario" contra Assange le ha terminado afectando.

"Además de los problemas físicos, Assange mostraba todos los síntomas típicos de una exposición prolongada a la tortura psicológica, entre ellos un estrés extremo, una ansiedad crónica y un intenso trauma psicológico", ha asegurado el comunicado difundido por el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, en el que se añade que las pruebas son "abrumadoras y claras".

Melzer ha denunciado que el fundador de WikiLeaks "ha estado expuesto de forma deliberada y durante varios años a varias formas de trato o castigos crueles, inhumanos y degradantes". El relator de la ONU ha acusado a todos los gobiernos implicados en este caso de no adoptar las medidas básicas para que se respeten "los Derechos Humanos más básicos y la dignidad de Assange".

Estados Unidos está tratando de lograr la extradición de Assange, que el pasado 11 de abril fue expulsado de la embajada de Ecuador después de que fuera revocado su asilo de siete años.

Desde entonces, Assange se encuentra en poder de la justicia británica, que lo ha condenado por violación de medidas cautelares en 2012, y a la espera de ser extraditado bien a EE.UU, que lo reclama por la fisusión de cientos de miles de documentos secretos, o a Suecia, por agresión sexual a dos mujeres.