Maragall paraliza las negociaciones con Colau hasta que frene la "subasta" y decida con quién quiere pactar

• El candidato de ERC ofrece a Colau un gobierno al 50% con los comunes y con una "figura principal" para ella
• Excluye de las negociaciones al PSC, a quien define como la "sucursal" de la Abogacía del Estado en Cataluña

El candidato de ERC a la Alcaldía de Barcelona y ganador de las elecciones, Ernest Maragall, el pasado 31 de mayo.

"Mientras los comunes no definan su posición abriremos un paréntesis en los contactos con ellos". Con estas palabras, el ganador de las municipales en Barcelona, Ernest Maragall, ha emplazado a la actual alcaldesa, Ada Colau, a decidir si está dispuesta a pactar con ERC o a intentar ser investida alcaldesa con el apoyo de PSC y Barcelona pel Canvi, la plataforma ligada a Ciudadanos que lidera Manuel Valls.

"Barcelona en Comú tiene que decidir un proyecto de ciudad o un gobierno supeditado al señor Valls", ha advertido. Mientras tanto, no habrá conversaciones entre ambas formaciones. "No rompemos nada, pero esperaremos que los comunes se definan", ha aclarado Maragall.

El candidato de ERC ha asegurado que, si Colau quiere, se podrían reunir "hoy mismo", pero ha advertido de que el “trabajo” de los próximos días ha de hacerse en un “clima de lealtad entre ambas formaciones” y, aún más, a “nivel personal”. Por ello, ha incidido en que “ese esfuerzo es incompatible con una estrategia paralela” de Ada Colau simultánea a las conversaciones con ERC para “llegar a acuerdos entre BComú, el PSC y Manuel Valls”.

“No nos podemos situar en un escenario de subasta al servicio de una última decisión unilateral de los comunes“

“No puede ser, no nos podemos situar en un escenario de subasta al servicio de una última decisión unilateral” de los comunes. Una decisión que, a su juicio, “sería menos que comprensible y admisible si se tomase exclusivamente en función de quién será el alcalde”.

Aunque ha reconocido el “derecho” de los comunes a sopesar todas las opciones, “como las aberraciones de Manuel Valls” -el candidato de la plataforma de Ciudadanos ofreció apoyar a Colau para evitar que gobernaran los independentistas-, ha advertido que ERC no aceptará “un rol de figurantes”.

Ofrece un gobierno al 50% y la creación de una "figura principal" para Colau

El candidato independentista ha subido la oferta que ERC hizo el martes a los Comunes. Además de un gobierno al 50% entre ERC y Barcelona en Comú con Maragall como alcalde, establece la creación de una “figura principal” para Colau en representación de los comunes.

“Estamos decididos a una representación equitativa entre ambas formaciones para todos los ámbitos y responsabilidades (...) en coherencia con los resultados electorales de los que partimos. Por eso hablamos de la distribución 50/50”, ha afirmado Maragall en una rueda de prensa.

A su vez, ha reconocido “con franqueza” que es “necesario” decidir “conjuntamente” los papeles que habrá que establecer para Ada Colau “como candidata de la segunda fuerza más votada”. Una figura que, según Maragall, “no ha existido hasta ahora”.

Así, se plantea otorgar “un papel de máximo nivel” a Colau como representante de los comunes junto con el alcalde “para hacer del de Barcelona el gobierno más fuerte y potente posible”, que represente un “modelo de liderazgo que pueda tener una continuidad de cuatro años”.

Así, la alcaldía sería “para la fuerza más votada” y habría una “figura principal de Barcelona en Comú representando y obedeciendo el resultado electoral”. Todo ello, “dando por descontado” que habría que cerrar primero un acuerdo de “cuestiones programáticas y de funciones”.

Una oferta, eso sí, de la que excluye al PSC de un posible pacto de gobierno, como solicita Colau. "No podemos aceptar que Barcelona en Comú siga insistiendo en el tripartito imposible con el PSC” porque el candidato socialista, Jaume Collboni, “no quiere sentarse en la mesa conmigo”.

Una formación que, según Maragall, se “niega al diálogo institucional” y que es en Cataluña la "sucursal" de la Abogacía del Estado, en referencia a la acusación que ésta ejerce contra los presos del 'procés'.