La mitad de los trabajadores no tiene posibilidad de modificar su jornada laboral para conciliar
- Las mujeres que dejan de trabajar más de dos años por cuidar de los hijos sextuplican a los hombres
- El INE ha publicado los datos de la EPA relativos a conciliación de la vida familiar y laboral
Casi la mitad de los trabajadores, el 49,55%, no puede nunca o casi nunca modificar su jornada laboral para asumir mejor las responsabilidades en el cuidado de los hijos, según lo refleja la estadística sobre conciliación de la vida familiar y laboral publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística.
Las mujeres son las que en mayor medida pueden modificar su jornada, el 49,2%, frente al 42,67% de los hombres, de acuerdo con los datos de la encuesta hecha en 2018 con entrevistas a población asalariada de 18 a 64 años que tiene responsabilidades en el cuidado de hijos menores de 15 años.
Por tipos de ocupación, los que menos posibilidades tienen de modificar su jornada son los trabajadores cualificados en puestos del sector agrícola, ganadero, forestal y pesquero, un 59,18%; seguidos por aquellos que trabajan en las industrias manufactureras y de la construcción (56,60%).
Mientras que, por el contrario, son los trabajadores en puestos de dirección y gerencia, según esta encuesta, los menos afectados por esta circunstancia, en un 29,8% de casos.
Ante la imposibilidad de modificar su jornada laboral para poder atender mejor a sus hijos, solo un 17% de los entrevistados afirma haber recurrido a servicios profesionales para el cuidado de todos sus hijos. Una proporción que asciende hasta el 19% en el caso de los ocupados.
La jornada laboral larga, principal obstáculo
Por otra parte, de los 7.518.800 ocupados con responsabilidades de cuidado, el 67% no consideraban que ninguna característica de su empleo dificulte la conciliación, sin embargo, un 12% señalan la jornada laboral larga como principal obstáculo, y un 10,7% encuentran los horarios de trabajo imprevisibles o difíciles como mayor inconveniente.
La jornada laboral larga afectó más a los hombres (13,5% de los ocupados con responsabilidades de cuidado) que a las mujeres (10,2%).
De las 17.326.900 personas de 18 a 64 años con algún hijo propio o de la pareja, un 28,1% abandonaron su trabajo en algún momento desde que dejaron sus estudios por cuidado de niños, de las que el 54,7% lo hicieron por un periodo inferior a seis meses y un 18,8% entre seis meses a un año. El resto lo dejaron durante más de un año.
El cuidado de hijos y de personas con dependencia recae más en mujeres
El estudio revela además que son las mujeres las que más se ocupan del cuidado de los hijos y de personas con dependencia y que las diferencias entre ambos sexos son más pronunciadas cuando se habla de interrumpir la vida laboral por más de seis meses.
Así, el porcentaje de mujeres que interrumpe su vida laboral por más de dos años para cuidar de hijos sextuplica al de hombres, en concreto, un 17,7% lo hizo frente a un 2,76% de hombres.
Las interrupciones de la vida laboral por menos de seis meses son más frecuentes entre los hombres, el 86,9%, frente al 49,9% de mujeres. La situación cambia radicalmente cuando se habla de interrupciones de la vida laboral por más de seis meses: el 4,5% de los hombres dejó su trabajo durante al menos un año frente al un 20,9% de mujeres.
Las mujeres también superan a los hombres en las interrupciones o reducciones de jornada laboral para el cuidado de personas con dependencia, aunque en este caso los porcentajes son reducidos en relación al número de ciudadanos entrevistados. Un 5,58% de mujeres dejó de trabajar en algún momento de su vida laboral para dedicarse a estas tareas, frente al 2,31% de hombres.