La Junta Electoral exige "voluntad incondicionada" de acatar la Constitución a los cargos independentistas
- La JEC advierte a los ediles que juran "por la República" de esta obligación de asunción de la Carta Magna para el 15 de junio
Es el mismo órgano donde deben jurar Junqueras y los demás eurodiputados independentistas para poder ir a Estrasburgo
La Junta Electoral Central (JEC) ha informado a los alcaldes y concejales de partidos independentistas que cuando asuman su cargo el próximo 15 de junio deberán manifestar su voluntad "incondicionada" de acatar la Constitución, ya que no serán válidas otras fórmulas que no incluyan esta declaración.
Esta exigencia responde a una consulta de la Associació de Municipis per la Independència (AMI)sobre si es compatible con el artículo 108.8 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General utilizar una fórmula de acatamiento en corporaciones locales propuesta por esa misma organización.
Del mismo modo, la AMI ha propuesto un texto para la toma de posesión de los concejales.
"Por expresión democrática de la voluntad ciudadana, manifiesto el firme compromiso con los valores de la república catalana y declaro que continuaré trabajando en la construcción de una Cataluña políticamente libre, socialmente justa, económicamente próspera y territorialmente equilibrada"
Ordenamiento jurídico
El citado artículo afirma que "en el momento de tomar posesión y para adquirir la plena condición de sus cargos, los candidatos electos deben jurar o prometer acatamiento a la Constitución, así como cumplimentar los demás requisitos previstos en las leyes o reglamentos respectivos".
Por tanto, la JEC ha indicado que el artículo 9.1 de la Constitución establece que "los ciudadanos y los poderes públicos están sujetos a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico", por lo que cualquiera de las fórmulas tendrá que incluir la promesa de obedecer sus directrices.
"Solamente pueden reputarse válidas aquellas fórmulas que expresamente manifiesten la voluntad incondicionada de acatar la Constitución", añade la Junta Electoral.
La JEC añade que, con arreglo al artículo 108.8 de la Ley Electoral y de conformidad con la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, solo pueden "reputarse válidas aquellas fórmulas que expresamente manifiesten la voluntad incondicionada de acatar la Constitución".
Billete a Estrasburgo
La llamada de atención de la Junta Electoral Central a los concejales independentistas que opten por acatar la Constitución "por la república" catalana, tiene especial relevancia ahora que los eurodiputados elegidos en los comicios del 26 de mayo deben comparecer ante el organismo arbitral, previsiblemente a principios de la próxima semana, para completar los trámites que les permitirán disponer de su acta y poder presentarse en la Eurocámara.
El día que sean convocados, los 54 eurodiputados electos deberán personarse en el Congreso para proceder al acatamiento de la Constitución, último paso para conseguir 'el billete' a Estraburgo, y lo deberán hacer ante la Junta Electoral Central, que ahora recalca que no vale cualquier fórmula de acatamiento.
La defensa del exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras solicitó permiso para salir de prisión y acudir al Congreso el próximo 17 de junio para acatar la Constitución ante la Junta Electoral Central como eurodiputado electo. Una solicitud que se une a la del exconseller de Interior Joaquim Forn.
En el caso de Junqueras, se trata de un trámite, que tendrá lugar el próximo 17 de junio, en el que los eurodiputados elegidos entregan sus acreditaciones como parlamentarios electos, acatan la Constitución y reciben la credencial correspondiente para ir al Parlamento de la UE. En el caso de que lo hiciera, sería detenido al estar procesado por rebelión en el Tribunal Supremo.
En la reciente sesión constitutiva del Congreso, la decisión de validar o no el trámite quedó en manos de la presidenta de la Cámara, la socialista Meritxell Batet, que dio por buenas todas las fórmulas empleadas al considerar que, aunque algunos diputados mencionaran a los presos políticos, la república catalana o incluso el planeta, no cuestionaban el acatamiento de la Constitución.