Tres rusos y un ucraniano serán juzgados por el derribo del avión de Malaysia Airlines en Ucrania
- En caso de que Rusia y Ucrania no entregaran a los acusados, estos serán juzgados en rebeldía
- Los sospechosos serán procesados por el "asesinato" de los 298 pasajeros del vuelo MH17
El Equipo de Investigación Conjunta (JIT) responsabilizó este miércoles a tres funcionarios rusos y a un ucraniano por estar involucrados en el derribo del avión de Malaysia Airlines MH17 en el este de Ucrania en 2014. Los cuatro serán juzgados en los Países Bajos a partir de marzo de 2020.
En una rueda de prensa en la ciudad holandesa de Nieuwegein, el fiscal jefe holandés, Fred Westerbeke, y el de la Policía, Wilbert Paulissen, anunciaron que se emitirán órdenes de arresto internacional para los rusos Sergey Dubinsky, Oleg Pulatov e Igor Girkin, y el ucraniano Leonid Chartsjenko.
Los sospechosos serán procesados por el "asesinato" de los 298 pasajeros del vuelo, aunque la justicia tendrá en cuenta tanto el contexto de conflicto civil en el que se produjo el derribo como el hecho de que los acusados "hayan podido querer derribar" un avión militar y no de pasajeros.
También pedirán a Rusia que interrogue a los sospechosos como asistencia legal al proceso judicial, aunque lamentaron que no podrán reclamar "la extradición de los sospechosos porque la Constitución tanto de Rusia como de Ucrania prohíben entregar a sus nacionales" a otros países. Como no se espera que Rusia o Ucrania los entreguen, los acusados podrán ser juzgados en rebeldía.
Rusia rechaza las acusaciones
Uno de ellos, Igor Guirkin, ha rechazado implicación alguna de los separatistas ucranianos prorrusos en el atentado. "Todo lo que puedo decir es que el Boeing no fue derribado por los rebeldes", ha dicho el que fuera uno de los líderes de la rebelión por aquel entonces, según recoge AFP.
El Gobierno de Ucrania ha pedido a Rusia que reconozca "su responsabilidad" en el derribo del MH17 y que "comience a cooperar con la investigación internacional", señala AFP. Pero Moscú ha vuelto a señalar "una vez más" que las acusaciones son "totalmente infundadas" y que está destinadas a "desacreditar" al país ante la comunidad internacional, según un comunicado del Ministerio de Exteriores recogido por Reuters.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha señalado que el anuncio del Equipo de Investigación Conjunta es un "hito" para el esclarecimiento de "toda la verdad" en torno al suceso.
La investigación no acaba con el juicio
La Fiscalía Pública cuenta con unos cien investigadores procedentes de los cinco países afectados que han estado recolectando pruebas desde 2014 con el objetivo de identificar a los involucrados, aunque no siempre había estado clara la posibilidad de iniciar un juicio por lo ocurrido, ante la negativa de Rusia de cooperar en la investigación.
No obstante, el jefe policial ha asegurado que la investigación no termina con este juicio y ha informado de que ahora el JIT se centrará en "aclarar la cadena de responsabilidades" para buscar a las personas involucradas en el proceso de toma de decisiones del derribo del MH17, especialmente quién dio la primera y la última orden.
El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 de Malaysia Airlines fue derribado en el este de Ucrania, zona de conflicto armado entre el ejército del país y separatistas prorrusos que causó la muerte de las 298 personas que iban a bordo, entre ellas 193 holandesas.
El avión fue abatido por un misil tierra-aire disparado desde una zona controlada por milicias separatistas prorrusas. El Consejo de Seguridad de Holanda concluyó que se trataba de un misil Buk de fabricación rusa y que fue trasladado desde ese país.