Elton John se despide de Madrid repasando medio siglo de éxitos en una noche memorable
- El músico británico ha ofrecido en la capital su único concierto en España en su gira de despedida
- El pianista se ha mostrado feliz y agradecido a su público en un recital de más de dos horas y media
Más de 12.000 personas han despedido puestas en pie a Elton John, que este miércoles ha ofrecido su último concierto en Madrid con su única parada en España dentro de la gira de despedida ‘Farewell Yellow Brick Road'.
Un largo recital –más de dos horas y media- en el que el compositor británico ha repasado lo mejor de su repertorio ante un público de diferentes generaciones que no ha parado de aplaudir cada uno de los gestos de gratitud que su ídolo les ha dirigido desde el escenario.
Elton John y su banda han arrancado puntuales, un minuto por encima de las 21.00 horas, con un contundente “Bennie and the Jets”, en el que la pantalla se iluminaba con cada sacudida del pianista. Fiel a su estilo estridente, el artista británico ha lucido una llamativa chaqueta con solapas brillantes y sus habituales gafas, ocupando con su piano la parte frontal del escenario.
A sus espaldas, su banda habitual -“la mejor que he tenido nunca”, ha dicho- formada por dos percusionistas (Ray Cooper y John Mahon), batería (Nigel Olson), bajo (Matt Bissonette), teclado (Kim Bullard) y guitarra (John Jorgenson, sustituto del habitual Davey Johnstone). Un conjunto de acompañamiento contundente y brillante, especialmente en los coros.
“Muy feliz de estar en esta fantástica ciudad”
El repertorio ha estado basado esencialmente en sus números más conocidos, sobre todo de su etapa de los años 70, con escaso margen para la sorpresa.
Así, en el arranque de la noche han ido sonando piezas como “All the girls love Alice”, “I guess that’s why they call it the blues”, “Border song” o “Philadelphia freedom”, con la que el público ha roto a bailar sin freno. “Estoy muy feliz de estar en esta fantástica ciudad”, ha asegurado Elton John al público madrileño, que ha agradecido con aplausos los elogios de su ídolo.
Uno de los momentos más emotivos ha sido la interpretación de “Indian sunset”, en la que Elton John ha estado acompañado únicamente de su piano y de la percusión de Ray Cooper, pleno de energía y teatralidad, y que ha cosechado una de las ovaciones más cerradas de la noche.
Una cuenta atrás en la pantalla que respaldaba a los músicos –enmarcada en el camino de baldosas amarillas a la que alude el nombre la gira de despedida- ha servido de introducción a “Rocket man”, la canción que da título al ‘biopic’ de Elton John que está triunfando en los cines y que ha contado con un final pleno de virtuosismo a cargo de la estrella y de su banda.
“Take me to the pilot”, “Sorry seems to be the hardest word” –intensa y emotiva-, “Someone saved my life tonight” y “Levon”, con un generoso solo final, han dado paso a “Candle in the wind”, un tema dedicado a Marilyn Monroe, cuya imagen se ha proyectado en la pantalla mientras Elton John y su piano cruzaban de lado a lado del escenario.
“Sin vosotros no estaría aquí”
Tras un breve descanso –que Elton John ha aprovechado para cambiarse de ropa, en esta ocasión un traje azul con un llamativo gato bordado en su espalda-, la banda ha arrancado con la instrumental “Funeral for a friend”, que han enlazado con “Love lies bleeding”.
“Burn down the misión”, “Daniel” y “Believe” –antes de la cual Elton John ha aprovechado para promocionar su fundación contra el sida-, han conducido a un emotivo final, con una versión muy ‘stoniana’ de “Sad songs (Say so much), la esencial “Don’t let the sun go down on me” y las imparables “The bitch is back”, “I’m still standing” y “Saturday night’s alright (for fighting)", que han levantado a todo el pabellón madrileño en un enfervorecido final de concierto.
“Sin vosotros no estaría aquí, gracias por tantos años de lealtad y generosidad”, ha asegurado un Elton John radiante y simpático durante toda la velada.
Para los ‘bises’, el británico –¡vestido con un albornoz!- se ha guardado uno de sus mejores temas, “Your song”, una de las canciones más bellas de la música pop y que le sirvió, allá por 1970, para lograr el éxito mundial y convertirse en uno de los compositores más importantes del siglo XX.
“Goodbye Yellow Brick Road” ha sonado como despedida final, triste y melancólica, tras la cual Elton John se ha subido a una plataforma que le ha introducido dentro de la pantalla en la que, a través de una animación, hemos podido ver cómo el músico se sumergía -¿para siempre?- en ese sendero de baldosas amarillas del que, parece, no piensa regresar.
O tal vez sí porque, por lo visto esta noche en Madrid, y a pesar de sus 72 años, Elton John es capaz de cantar y de ofrecer conciertos plenos de energía y vitalidad, escondiendo con oficio sus limitaciones y potenciando sus innumerables virtudes. De momento, continuará con esta gira del adiós hasta finales de 2020. Habrá que ver si, para entonces, sigue manteniendo su palabra de no volver a girar. Si cambia de opinión, aquí le estaremos esperando.