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Francia bate su récord de altas temperaturas con 45,9 grados en el sur

  • Durante la ola de calor, París extrema las precauciones tras las 15.000 muertes de 2003
  • Las autoridades consideran este episodio como "excepcional" por su intensidad y por su precocidad para un mes de junio

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Francia bate su récord de altas temperaturas con 45,9 grados
Francia bate su récord de altas temperaturas con 45,9 grados

Francia ha alcanzado este viernes su récord absoluto de altas temperaturas con los 45,9 grados centígrados registrados en Gallargues-le-Montueux, localidad del sur del país que se encuentra bajo la alerta roja, según los datos registrados por la agencia meteorológica Méteo France.

Se trata de un dato que supera a otro récord, los 45,1 grados de primera hora de la tarde, así como los 44,3 grados de la mañana.

El récord precedente tuvo lugar el 12 de agosto de 2003, fecha en la que en el departamento meridional de Gard se llegó a los 44,1 grados, en el marco de una ola de calor que dejó cerca de 15.000 muertos.

Episodio excepcional

Este nuevo episodio está considerado por las autoridades "excepcional" por su intensidad y por su precocidad para un mes de junio.

Los servicios meteorológicos franceses ha anunciado la activación por primera vez en el país de una alerta roja por calor en cuatro departamentos del sureste, incluido el de Vaucluse, en el que se encuentra Carpentras, en los que podría llegarse a los 45 grados.

La ola de calor llevó este viernes a que 4.000 escuelas hayan debido cerrar o variar su funcionamiento para una acogida de los alumnos "adaptada o de urgencia", según ha indicado el primer ministro, Édouard Philippe.

El calor y las altas presiones han provocado igualmente que la contaminación haya alcanzado niveles elevados en muchas ciudades francesas, ante los cuales han entrado en vigor medidas de restricción circulatoria en París, Lyon, Marsella, Estrasburgo, Grenoble y Annecy.

La ministra de Sanidad, Agnès Buzyn, ha hecho un llamamiento este viernes para que toda la población, no solo los colectivos más vulnerables, extremen las precauciones, aunque ha recordado que, respecto a 2003, el país está "extremadamente bien preparado" para afrontar esta canícula.