Gibraltar intercepta un superpetrolero iraní por llevar crudo a Siria en contra de las sanciones europeas
- España asegura que el incidente se ha producido en aguas españolas a petición de EE.UU.
- Irán convoca al embajador británico tras la detención "ilegal y destructiva"
La Marina británica ha retenido este jueves por la mañana un superpetrolero iraní que transportaba crudo a Siria, según han informado las autoridades de Gibraltar. El buque Grace 1 y la carga han sido intervenidos tras recibir "motivos razonables" para creer que se estaban "infringiendo" las sanciones europeas impuestas a Siria, ha informado el primer ministro del Peñón, Fabián Picardo.
"La refinería pertenece a una entidad sujeta a sanciones europeas contra Siria. Con mi consentimiento, nuestro puerto y fuerzas de seguridad han participado en la operación conjunta con la Marina", ha añadido.
Según el Gobierno de Gibraltar, el buque se dirigía a la refinería Baniyas en Siria, propiedad del Gobierno de Bachar al Asad y sancionada por Europa. El ministro de Exteriores en funciones de España, Josep Borrell, ha asegurado que Moncloa estaba "al corriente de la operación", en la que el Reino Unido ha actuado bajo petición de Estados Unidos, pero cree que el incidente se ha producido en aguas territoriales españolas y pedirá información a Londres.
Irán convoca al embajador británico
Por su parte, Irán ha convocado al embajador británico para denunciar lo que considera un acto "ilegal y destructivo que podría elevar las tensiones en el Golfo [pérsico]", según ha señalado un portavoz del Ministerio de Exteriores.
La retención del buque se produce en un momento especialmente tenso entre Estados Unidos e Irán, un enfrentamiento en el que la Unión Europea ha tratado de mantenerse al margen. Esta misma semana, Irán anunciaba que ha superado su límite de reservas de uranio, ante las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump.
Las sanciones impuestas por la UE en 2011 contra el régimen de Siria y sus defensores están en vigor hasta el 1 de junio de 2020, puesto que el Consejo de la UE considera que "la represión contra la población civil no ha remitido". Entre ellas destacan el embargo al petróleo, las restricciones a determinadas inversiones y la congelación de los bienes del Banco Central sirio en Europa.
Sin embargo, esta es la primera ocasión en la que se retiene un buque en el mar.