Informática e Ingenieria, las carreras con mayor empleabilidad frente a Derecho y Humanidades
- El Ministerio Ciencia, Innovación y Universidades publica el informe "Inserción laboral de los titulados universitarios. Curso 2013-2014"
- Al cuarto año de haber acabado la carrera, casi el 30% de los graduados en 2013-14 no están afiliados a la Seguridad Social
Estudiar informática o alguna ingeniería ofrece más posibilidades de tener un trabajo al cuarto año de terminar la carrera, frente a Derecho y Humanidades, que son las que menos tienen.
Los universitarios que terminaron Derecho y Humanidades en el curso 2013-14 registraron un 55,7% y un 57,6% de afiliación a la Seguridad Social, respectivamente, a los cuatro años de finalizar sus estudios, lo que supone los peores porcentajes de empleabilidad respecto al resto de carreras.
Por el contrario, el 84,6% de los estudiantes que terminaron Informática en el citado curso 2013-2014 estaban afiliados a la Seguridad Social en 2018 y los estudiantes de Ingeniería también superaban el 80% de afiliación en ese periodo.
Son datos del informe "Inserción laboral de los titulados universitarios - Curso 2013-2014", publicado este jueves por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y que sigue al realizado en 2015.
Según este documento, al cuarto año de haber acabado la carrera, casi el 30% (el 27,7%) de los 233.626 egresados en 2013-14 no están afiliados a la Seguridad Social. Solo un 8,9% son autónomos.
Del 72,3% afiliados, el 51,7% son indefinidos y el 79% trabajan a tiempo completo.
Más afiliados en universidades privadas
Respecto al tipo de centro universitario, en el primer año de terminar la carrera el porcentaje de estudiantes afiliados a la Seguridad Social era mayor entre los que habían estado en universidades privadas, 56,1%, que en públicas, 42,7%.
Una de las causas que provoca esta diferencia, según la estadística del Ministerio que dirige en funciones Pedro Duque, es que existen titulaciones con una baja tasa de afiliación a la Seguridad Social (especialmente el primer año) que, en su gran mayoría, sólo se imparten en universidades públicas.
En general, también el porcentaje de contratos indefinidos en estudiantes de universidades privadas es mayor que el de las públicas.
Además, la tasa de afiliación en el caso de las privadas no presenciales es superior al resto, pero es debido a que muchos de los egresados ya disponían de una titulación previa y estaban trabajando.
La mayor temporalidad entre los estudiantes que han hecho un grado se encuentra en las ramas de Ciencias, Ciencias de la Salud y Artes y Humanidades, con porcentajes de contratos temporales al cuarto año de egresar del 62%, 64% y 68%, respectivamente.
Mayoría de mujeres egresadas
El informe desagrega los datos por sexo y concluye que las mujeres egresadas fueron mayoría durante el curso 2013-14, alcanzando el 58,5% del total. Pero en los estudios de ingeniería las mujeres solo representan el 24,9% de las egresadas.
Los hombres consiguen un porcentaje de empleos de alta cualificación al cuarto año mejor o igual al de las mujeres en todos los ámbitos, excepto en Servicios de seguridad y Servicios sociales, con un porcentaje para ellas de un 50% y un 58,8% respectivamente, frente al 34,4% y 51,4% de ellos.
También al cuarto año de egresar las retribuciones medias en las privadas superan en todos los casos a las retribuciones medias de las públicas, al igual que se mantiene la diferencia entre las presenciales y no presenciales a favor de las últimas.
Asimismo, las retribuciones medias de los hombres son más altas que las de las mujeres, siendo la retribución global al cuarto año de egresar de las mujeres de 25.044 euros frente a 27.668 euros de los hombres.
El porcentaje de hombres (no se cuentan los autónomos) que cotizan en el grupo más alto de afiliados a la Seguridad Social (más de 36.000 euros) es más de 7 puntos porcentuales mayor que el de las mujeres el primer año tras acabar la carrera y de prácticamente 10 puntos porcentuales mayor al cuarto año.
En cambio, en el caso de los grupos de cotización más bajos (de 6.000 a 12.000 euros y de 12.000 a 18.000 euros), el porcentaje de mujeres que cotizan en estos grupos es ligeramente mayor que el de hombres.