Trump promete durante un patriótico discurso que EE.UU. "pronto" regresará a la Luna y plantará su bandera en Marte
- Desde 1951, con Harry Truman en la presidencia, ningún mandatario había pronunciado un discurso por la fiesta nacional
- Este 4 de julio ha estado marcado por la presencia de tanques y aviones militares en Washington
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha prometido este jueves que Estados Unidos plantará "pronto" su bandera en la Luna y en Marte, durante su discurso en Washington para conmemorar el Día de la Independencia del país.
"Vamos a ir otra vez a la Luna, ha dicho Trump en un discurso frente al Monumento del expresidente Abraham Lincoln (1861-1865).
Trump ha hecho este anuncio, del que no ha ofrecido más detalles, segundos después de asegurar que para los estadounidenses "no hay nada imposible", una frase que ha provocado un fuerte aplauso de los asistentes a la explanada del National Mall en la capital del país.
Durante su alocución, el mandatario ha alabado la figura del ingeniero aeroespacial Gene Kranz, presente este jueves en el evento y que fue el encargado de dirigir la misión tripulada a la Luna de la NASA en 1969.
No es la primera vez que el Gobierno de Trump asegura que la agencia espacial estadounidense retornará al satélite terrestre.
De hecho, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, aseveró en marzo que la NASA regresará a la Luna en los próximos cinco años, y vaticinó que la primera mujer y el próximo hombre que vuelvan a pisar el satélite de la Tierra serán estadounidenses.
Asimismo, la propuesta presupuestaria de la Casa Blanca para el año fiscal de 2019 de la NASA recoge el reto de Trump de volver a la Luna, aunque no fija plazos concretos.
Una celebración marcada por la presencia de tanques y aviones militares
También, durante su discurso - el único presidente que había participado directamente en la celebración oficial del Día de la Independencia en Washington fue Harry S. Truman en 1951- ha presumido del potencial del Ejército de Estados Unidos.
"Durante más de 65 años, ninguna fuerza aérea enemiga ha logrado matar a un solo soldado estadounidense. Porque el cielo pertenece a Estados Unidos", se ha jactado Trump.
En su alocución, Trump ha destacado la presunta eliminación del "califato" autoproclamado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y ha asegurado que el Ejército estadounidense está formado por "los mejores soldados de la Tierra".
"Al reunirnos este atardecer en la alegría de la libertad, recordamos que todos compartimos un patrimonio extraordinario. Juntos, somos parte de una de las mejores historias jamás contadas: la historia de Estados Unidos", ha apuntado.
Pese a que se había especulado con que Trump politizaría su discurso, el mandatario no se ha salido prácticamente de un guión centrado en ensalzar episodios y logros históricos de las Fuerzas Armadas del país.
El acto "Saludo a Estados Unidos" organizado por la Casa Blanca ha contado con la presencia de tanques en las calles y de varios aviones y helicópteros militares que han sobrevolado la explanada del National Mall, uno de los lugares más emblemáticos de Washington.
Dos aviones F-18 Hornet y dos F-22 Raptor, entre otros, sobrevolaron la capital estadounidense durante el discurso de Trump realizando diferentes maniobras en el aire y provocando así los aplausos y gritos de "Estados Unidos, Estados Unidos" entre los asistentes.
Trump ha alabado también el "espíritu estadounidense que envalentonó a los padres fundadores", el grupo que lideró la Revolución de las Trece Colonias contra la Corona Británica y participó en la fundación de Estados Unidos en 1776.
"Hasta el día de hoy, ese espíritu corre por las venas de cada patriota estadounidense. Vive en todos y cada uno de vosotros", ha señalado.
El mandatario ha pronunciado estas palabras frente a un grupo de invitados vip por la Casa Blanca, que repartió entradas de las primeras filas de las gradas temporales delante del Monumento a Lincoln a grandes donantes republicanos y familiares de militares y veteranos de las Fuerzas Armadas.
"Mientras nos mantengamos fieles a nuestra causa, mientras recordemos nuestra gran historia, y mientras no dejemos de luchar por un futuro mejor, entonces no habrá nada que Estados Unidos no pueda hacer", ha continuado Trump, que recibió un fuerte aplauso de sus seguidores.
La alta seguridad del Servicio Secreto de EE.UU. y las vallas metálicas instaladas alrededor del icónico monumento fueron el centro de las críticas en las redes sociales, donde se recordó que hasta este año era posible sentarse en sus escaleras el 4 de julio para presenciar los fuegos artificiales.
Como cada año, miles de familias se congregaron en la explanada del National Mall de Washington a lo largo del día vistiendo todo tipo de piezas de ropa con los colores de la bandera estadounidense -rojo, azul y blanco-, aunque la intermitente lluvia alejó a muchas personas, según medios locales.
También se han podido apreciar diferentes creencias políticas entre los asistentes: muchas personas llevaban las características gorras rojas con el lema de la campaña de Trump para las elecciones del 2020: “Mantener la grandeza de Estados Unidos” ("Keep America Great"); mientras otras lucían camisetas con el texto "Él no es mi presidente" en inglés.
La gran atracción para los detractores del mandatario ha sido la presencia del "bebé Trump", un globo hinchable que caricaturiza al presidente y que se hizo famoso en las protestas del año pasado en Londres.