May reconoce que no supo medir la fuerza del Parlamento para bloquear el 'Brexit'
- La primera ministra británica confiesa que se sintió "increíblemente frustada" cada vez que perdía una votación en los Comunes
- En su última entrevista a la BBC, May afirma que abandonará el cargo "orgullosa y decepcionada"
La primera ministra británica en funciones, Theresa May, ha reconocido que subestimó la capacidad del Parlamento británico para bloquear el Brexit durante sus últimos meses en el poder. En su última entrevista en el cargo, concedida a la cadena BBC, la líder conservadora ha confesado que fue "increíblemente frustante" ver a los diputados "tan atrincherados que no querían ceder para permitir que el acuerdo saliera adelante".
“Subestimé lo atrincherados que estaban los diputados en sus posturas“
"Lo que subestimé fue que había personas atrincheradas en sus posturas. Subestimé la medida en que el Parlamento no estaba dispuesto a ejecutar lo que el público quiso en el referéndum", ha explicado sobre la cuestión por la que llegó a "sacrificar" su trabajo y que acabó con su mandato.
Preguntada por cómo se sentía cada vez que era derrotada en la Cámara de los Comunes, May ha lamentado que "podría haber hablado con los diputados más a menudo", si bien ha advertido de que hay "bastante diferencia" entre lo que opinan los diputados y lo que opinan los votantes. "El público tiene una visión más simple: se tomó una decisión y llévenla a cabo. No están tan polarizados como el Parlamento", ha dicho.
Pide el retorno de la "responsabilidad" en el Gobierno
La conservadora ha expresado su deseo de resolver de una vez el Brexit para que vuelva "la responsabilidad colectiva" en el Gobierno tras un mandato plagado de traiciones, ruptura de disciplina política y filtraciones a la prensa. "Un buen gabinete de Gobierno depende la responsabilidad colectiva y de que lo que se diga en esa sala quede allí. Creo que, una vez que salgamos de la UE, la responsabilidad colectiva debe volver", ha concluido.
Desde que anunció su dimisión, Theresa May ha evitado apoyar a ninguno de los candidatos a su puesto. Preguntada si considera que Johnson entiende la responsabilidad del puesto, May ha asegurado que tanto él como Hunt lo hacen, porque ambos han ocupado altos cargos bajo su gabinete.
La británica May no se reconoce en las críticas que la califican de obstinada, no se arrepiente de aquellas elecciones que en 2017 le costaron la mayoría absoluta, pero sí de haber liderado una campaña "en la que no fui yo realmente". Abandonará el cargo el próximo 24 de julio, un día después de que su partido anuncie a su sucesor en unas primarias en las que el euroescéptico Boris Johnson parte como favorito frente al ministro de Exteriores, Jeremy Hunt. May se irá "con orgullo y decepción": orgullosa por haber sido la segunda primera ministra de la historia del país; decepcionada por su estrepitoso fracaso con el Brexit.