Europa está en estado de alerta por temperaturas récord
- La ola de calor, que será intensa y dejará récords de temperaturas, remitirá a partir del viernes
- Este nuevo episodio de calor coincide con la “canícula veraniega”, el periodo más caluroso del año
La segunda ola de calor intenso que se registra en lo que va de verano en Europa elevará los termómetros de países como Francia, Alemania o Países Bajos hasta los 42 ºC, unas temperaturas récord nunca antes registradas en estos países, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Este nuevo episodio de calor coincide con un periodo más normal y se corresponde con la “canícula veraniega”, que tiene lugar entre el 15 de julio y el 15 de agosto y que es estadísticamente el periodo más caluroso del año. Sin embargo, se espera que el viernes comience un descenso paulatino de las temperaturas y unos días más tarde se regrese a los registros habituales para esta época en el continente conforme la borrasca que llegue a la Península Ibérica se traslade al oeste y "refresque" la atmósfera.
La portavoz de la AEMET, Delia Gutiérrez, ha explicado que esta ola de calor en Europa está provocada por la misma masa de aire cálido que está afectando a España esta semana. De momento, este episodio de calor que afecta a la Península, "llegue o no a cumplir los requisitos de ola de calor" no está dejando "tantos" récord, pero subraya que en Europa "sí se están registrando muchas efemérides y se esperan aún más en los próximos días".
De momento, el calor que comenzó en España el fin de semana pasado ha llegado a Europa y, según el servicio meteorológico francés, el martes ya se han producido muchos récords históricos de temperaturas máximas y mínimas en el suroeste de Francia donde "nunca antes se había llegado a valores de entre 40 y 42 ºC".
“Este nuevo espisodio es más corto pero más intenso“
"Se trata de la segunda ola de calor en Europa en lo que va de verano y se están batiendo muchos récord de temperaturas. Aunque la gran ola de calor en Europa de 2013 se caracterizó por su longitud, este nuevo episodio es más corto pero parece que más intenso porque se superarán los valores absolutos en numerosas ciudades de Alemania y Francia", ha señalado Gutiérrez.
Una dorsal potente en altura llevará aire cálido y seco hacia el oeste y norte de Europa durante esta semana, lo que permitirá que aire del sur proveniente del norte de África llegue hasta los países escandinavos. A esto se unen cielos completamente despejados y escasos vientos que puedan refrescar el ambiente.
Francia, estado de alerta por temperaturas récord
Este martes los termómetros han roto varios récords en Francia. La ciudad de Burdeos ha alcanzado su máximo histórico (41,2 ºC, tras los 40,3 ºC de 2003) y en Châteauroux se llegaron a los 40,8 ºC (la más alta desde hace más de un siglo). La agencia meteorológica Méteo France prevé temperaturas de entre 37 y 42 ºC en gran parte del país, por lo que casi todos (81) los departamentos se encuentran en alerta naranja por las altas temperaturas.
Estos episodios sofocantes de calor han venido acompañados de picos de contaminación en París, la región de Ródano-Alpes (al este del país) o Alsacia, lo que ha llevado a adoptar medidas como la restricción del tráfico en varias ciudades. Además, la canícula está golpeando especialmente al sector agrícola, con la producción vinícola entre las más afectadas (las estimaciones oficiales apuntan a una caída de la cosecha del 6% al 13% con relación a 2018).
“Todo el día he llevado hielo en la nuca“
La ola de calor ha coincidido con el Tour de Francia y el pelotón ha visto como las altas temperaturas se han convertido en un factor determinante de la carrera. A medida que se acercan al sur, el mercurio se convierte en un factor de preocupación."Todo el día he llevado hielo en la nuca", aseguraba el líder, el francés Julien Alaphilippe.
El récord absoluto se alcanzó el pasado mes con los 45,9 ºC registrados en Gallargues-le-Montueux, localidad del sur del país, según los datos registrados por Méteo France. El récord precedente tuvo lugar el 12 de agosto de 2003, fecha en la que en el departamento meridional de Gard se llegó a los 44,1 ºC, durante una ola de calor que dejó cerca de 15.000 muertos.
Reino Unido, la peor ola de calor en 16 años
El Reino Unido se prepara para la peor ola de calor en casi 16 años, con temperaturas previstas superiores a 38 ºC, según ha informado el Met Office, el Servicio Meteorológico del país. Las temperaturas empezaron a subir el martes hasta los 32 ºC y se espera que serán similares a la ola de calor de agosto de 2003, cuando se alcanzaron los 38,5 ºC.
Mucha gente ha aprovechado el calor para acudir a las playas y bañarse en los ríos, mientras que las autoridades han dado las recomendaciones habituales para hacer frente a estas temperaturas, como bañar a los bebés antes de ponerlos a dormir, llevar agua en el transporte público o no salir a la calle en las horas de máximo calor.
En el Támesis, que pasa por Londres, tres personas están desaparecidas en distintos tramos del río después de que fueran vistos bañarse en la tarde del martes.
La última vez que las temperaturas subieron hasta estos registros en un mes de julio fue en 2015, cuando se alcanzaron 36,7 ºC en el aeropuerto de Heathrow, en las afueras de Londres.
Alemania, termómetros por encima de los 40 ºC
En Alemania, el servicio de meteorología estatal (DWD) ha elertado sobre los efectos de la ola de calor, en la que podrían superarse las máximas registradas en 2015, con lo que se marcaría un nuevo récord histórico. En este 2019 se alcanzaron ya temperaturas inusualmente altas entre abril, mayo y junio, pero estuvieron alternadas con copiosas precipitaciones y tormentas en buena parte del país.
Los termómetros superarán los 41 ºC en regiones como Renania del Norte-Westfalia y Sarre (oeste) y Baviera (sur), según los pronósticos del DWD. Se rebasarán así las marcas de 2015, en que se registraron en algunas zonas de Baviera máximas de 40,3 ºC, un récord histórico desde que empezaron las mediciones sistemáticas por parte de ese servicio, a principios del siglo pasado.
Pese a esta situación, se considera que el verano no tendrá efectos tan devastadores en el campo como el de 2018, en el que junto a temperaturas máximas muy altas hubo una práctica ausencia de precipitaciones durante meses, lo que agravó la situación.
Desde las instituciones se han adoptado medidas especiales en hospitales y geriátricos para evitar la exposición al calor de las personas más vulnerables. Además, tanto las televisiones públicas y privadas como el resto de los medios de comunicación, dedican parte de sus informativos a "aconsejar" a los ciudadanos sobre cómo soportar las elevadas temperaturas.
Italia en alerta de nivel 3
En Italia cinco ciudades se encuentran en alerta roja (Bolzano, Brescia, Florencia, Perugia y Turín), mientras que mañana serán 13 las localidades más afectadas con temperaturas que llegarán a máximas de 38 y 40 ºC. El ministerio de Sanidad italiano ha dedicado en su página web un espacio para dar los partes de las alertas del tiempo con las ciudades afectadas y los consejos para prevenir el calor sobre todo en ancianos y niños, así como un número verde para solicitar información.
El pico de la ola de calor llegará entre mañana y el viernes cuando 13 ciudades se encontrarán en alerta de nivel 3 o roja, entre ellas Bolonia, Frosinone, Génova, Pescara, Rieti, Roma, Trieste y Verona. Según explica el Ministerio, la alerta de nivel 3 supone "la emergencia ante los posibles efectos sobre personas sanas y activas y no solo sobre grupos de riesgo como ancianos, niños o personas con enfermedades crónicas".
Algunos ayuntamientos como el de Roma han previsto un plan ante la ola de calor con asistencia a personas sin hogar y las familias en dificultades, ampliando los lugares de acogida diurna y nocturna en 280 unidades, según explicó la regidora, Virginia Raggi. Además han dispuesto 60.000 accesos gratuitos a instalaciones deportivas municipales, clubes privados y federaciones a favor de las personas mayores.
Pero desde el ayuntamiento se recuerda que está prohibido bañarse en las fuentes monumentales y que pueden ser multados con hasta 450 euros como ocurrió el pasado junio a ocho turistas que decidieron refrescarse en "La Barcaccia" de la plaza de España.
El calor no solo afecta a las personas: Coldiretti, la mayor asociación de agricultores del país, lanzó la alarma por el estado de las abejas que con el intenso calor dejan de volar y de producir miel por lo que se espera una caía en la producción de miel del 41 %.
El calor se extiende por toda Europa
Las agencias meteorológicas predicen también récords de calor en Bélgica, Luxemburgo y Holanda, con el mercurio en torno a los 40 ºC, y la temperatura en Suiza se situará entre los 32 y los 34 ºC. Portugal sigue enfrascado en la lucha contra los incendios y ha pedido a España ayuda con aviones contafuegos para intentar apagar las llamas.
Las ciudades son las más afectadas y los científicos advierten de que las olas de calor serán cada vez más intensas y frecuentes debido al calentamiento global. Además, la energía acumulada estos días podría desencadenar tormentas intensas en muchas zonas de Europa.
Bosques de color rojo
En el bosque de Vosges de Masevaux (Haut-Rhin), los abetos se han tornado de color rojo. Alrededor del 10% de ellos ya están muertos, agotados por las sequías y las repetidas olas de calor. Una cantidad similar de hayas ha muerto en la vecina Suiza, hasta el punto de que el gobierno de Jura se ha declarado en una situación de "desastre forestal" a principios de julio.
"Tenemos daños significativos, especialmente en el este de Francia, debido a las reiteradas sequías del año pasado", dice Brigitte Musch, directora del Conservatorio de Genética Forestal de la Oficina Nacional de Bosques (ONF). El calentamiento global pone a las plantas bajo una fuerte presión.
Con 73 departamentos sujetos a restricciones de agua a fecha del 24 de julio, Francia se ve particularmente afectada, nuevamente este año, por la sequía. Esto "acentuará el secado de los suelos superficiales", advierte Météo-France, mientras que muchas regiones ya están experimentando un "marcado déficit de lluvia" durante un año. La falta de agua y el calor abrumador debilitan el parque forestal francés.
Las situaciones de estrés hídrico van en aumento, ya que las olas de calor son ahora casi anuales. "Las plantas se colocan en posiciones que nunca han conocido. Una haya acostumbrada a un máximo de treinta o incluso treinta y cinco grados, no se forma para sobrevivir a los picos a los cuarenta", dijo Hervé Cochard, director de investigación del INRA Clermont-Ferrand. Según el investigador, las plantas ya están "al borde de la afeitadora".