¿Qué pasa después de la investidura fallida?
- Tras informar al rey del resultado, se abre un plazo de dos meses para un nuevo debate de investidura
- De no haber candidato o no prosperar nuevos intentos antes del 23 de septiembre, habrá elecciones el 10 de noviembre
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El fracaso de la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno deja un escenario abierto de posibilidades que pueden derivar en nuevos intentos para recabar el apoyo del Congreso en un plazo de dos meses, o en la repetición de elecciones el 10 de noviembre.
[Especial: Debate de Investidura Pedro Sánchez]
Sánchez, como ganador de las elecciones, es el candidato que más apoyo puede obtener en la Cámara con el voto de los partidos de izquierda y regionalistas, por lo que parece improbable que otro candidato pudiera recibir el encargo del rey para formar un Gobierno.
Pero sigue necesitando el voto afirmativo de Unidas Podemos para lograr ser investido o la abstención, más improbable, de PP o Ciudadanos. Y mientras la mayoría de grupos parlamentarios miran hacia septiembre para que haya margen para una nueva negociación, los socialistas no han aclarado su intención de volver a intentar formar Gobierno o de convocar elecciones.
Primer paso: informar al rey
La presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, debe informar al rey del resultado de la votación en el Congreso y el hecho de que, en consecuencia, el candidato propuesto no ha conseguido la mayoría necesaria para ser investido. La reunión de Batet con el monarca será este viernes a las 09:00 de la mañana.
A partir de ahí, el jefe del Estado tiene que decidir si convoca en este momento una nueva ronda de consultas o da un tiempo a los partidos para saber más adelante si hay opciones de proponer otra vez una candidatura a la investidura.
Dos meses para una nueva investidura o disolución de las Cortes
Según establece el artículo 99 de la Constitución, habrá plazo hasta el 23 de septiembre para que los posibles candidatos puedan negociar con las formaciones políticas y que un candidato se someta a un nuevo debate de investidura. El plazo de dos meses comienza a contar desde la primera votación, que fue el pasado martes 23 de julio.
Precisamente es el mismo artículo que Sánchez abogó por reformar durante su intervención en el debate de investidura el pasado lunes con el fin de evitar que hubiera nuevos bloqueos para la formación de un Gobierno.
Si después de que el rey haga las rondas de consultas pertinentes se constata que no hay candidato de cara a la investidura, cuando llegue el 23 de septiembre se disolverán las Cortes y el Boletín Oficial del Estado acogerá el real decreto de nueva convocatoria electoral.
Repetición de elecciones el 10 de noviembre
El real decreto por el que se disuelven las cortes se publicará el día siguiente, entrando en vigor, y la cuenta atrás para la repetición de elecciones comenzará el 25 de septiembre.
El plazo que se irá consumiendo es de 47 días para la repetición de elecciones, no de 54 como establecía el artículo 99 de la Constitución hasta 2016. La Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) se modificó en octubre de ese año porque por entonces, en una situación similar a la actual de bloqueo en la investidura de Mariano Rajoy, los plazos se iban agotando y apareció una amenaza imposible de soslayar: la repetición electoral sería el 25 de diciembre, día de Navidad.
Pasarían 47 días desde el 25 de septiembre, por lo que habría elecciones el 10 de noviembre. La campaña electoral, por cierto, durará en este caso una semana en vez de las dos habituales.