El Gobierno de Portugal interviene la huelga de transportistas y moviliza al Ejército para garantizar el combustible
- El 17% de las gasolineras tienen problemas de abastecimiento y se ha limitado el carburante que se puede comprar
- La huelga indefinida de transportistas de Portugal deja colas en las estaciones de servicios españolas de la frontera
El Gobierno de Portugal ha decidido intervenir la huelga indefinidaque vive el país y ha movilizado a militares y agentes de seguridad para conducir camiones cisterna con combustible, después de constatar que no se cumplieron los servicios mínimos en el primer día del paro convocado.
La decisión de intervenir la huelga fue tomada en un Consejo de Ministros extraordinario en el que se ha acordado que esto ocurra solo donde se están incumpliendo los mínimos: el suministro en el sur del país, los aeropuertos, la red de puestos de abastecimiento de emergencia y las unidades autónomas de gas natural. Si se detectan incumplimientos en otras áreas, el Gobierno podrá ampliar el alcance de la medida.
La intervención del paro se realizará a través de la llamada "requisición civil", un instrumento legal extremo que obliga a trabajar a los huelguistas que sean necesarios para asegurar el funcionamiento de los servicios esenciales. Si se niegan, pueden afrontar pena de cárcel. La medida permite además movilizar a miembros de las Fuerzas Armadas.
Incumplir los servicios mínimos, una línea roja
Los transportistas han vuelto a la huelga tras los primeros paros del pasado mes de abril porque, aseguran, la patronal del sector, Antram, no ha subido los salarios como se comprometió tras la última protesta.
Ante la movilización, el gobierno luso decretó servicios mínimos del 100% en los sectores prioritarios -como aeropuertos, puertos, servicios de seguridad, bomberos y emergencias médicas-, del 75% para el transporte público y del 50% para el suministro general de ciudadanos.
Horas después de iniciarse el paro, el sindicato de los transportistas anunciaba que dejaban de cumplir los servicios mínimos al considerar que su paro había sido saboteado en las primeras horas. "[Los conductores] están siendo amenazados para ir a trabajar" y en algunos casos "sobornados" con "1.200 euros para que trabajen durante la huelga", apuntaba su portavoz, Pedro Pardal Henriques.
En ese momento, el primer ministro de Portugal, el socialista António Costa, aseguraba que se cumplían con los mínimos, versión que corregía por la tarde, cuando explicaba que se había observado "una nueva realidad", por lo que había movilizado a las fuerzas de seguridad. El eventual incumplimiento de los servicios mínimos había sido fijado por el Gobierno como línea roja para intervenir la huelga.
Casi un 20% de gasolineras sin combustibles
El paro ha dejado a centenares de gasolineras portuguesas sin carburantes -más de 500, alrededor del 17% del total- y colas en las estaciones de servicio españolas situadas en la frontera con el país luso son las consecuencias más evidentes de la huelga indefinida de transportistas de materias peligrosas que vive desde este lunes Portugal.
Durante la huelga, por la que se ha decretado la alerta por emergencia energética hasta el 21 de agosto, los coches solo pueden echar hasta 25 litros de combustible. Eso, unido a que en España es más barato, ha provocado colas en las gasolineras españolas de la frontera, sobre todo las de Huelva, ya que los principales problemas se presentan en el sur de Portugal.
Un ejemplo es la localidad de Ayamonte. En algunas gasolineras de esa localidad onubense, según señala la Agencia Efe, casi tres de cada cinco coches que paran a echar combustible son del país vecino. Y esta estampa se repite en otros municipios como son El Rosal de la Frontera o El Granado, otros dos puntos por los que se cruza de un país a otro.