Sorogoyen recupera su espíritu transgresor en la Mostra con 'Madre'
- El cineasta presenta en Venecia su nueva película, que retoma la historia de su premiado cortometraje
Tras su nominación al Oscar con el corto Madre, Rodrigo Sorogoyen ha llevado a la Mostra de Venecia el largometraje homónimo, que desarrolla la historia de esa madre angustiada por la desaparición de su hijo diez años después y con la que busca incomodar y poner a prueba los prejuicios del espectador.
Madre, protagonizada por Marta Nieto y Alex Brendemühl, se proyecta en la sección paralela de Horizontes, en la que también compite el navarro Oskar Alegría, con el documental Zumiriki y Theo Court, ibicenco de origen chileno, con Blanco en Blanco.
La trama se centra en la relación que la protagonista, Elena, establece con un adolescente francés que le recuerda a su hijo y que transcurre por territorios que pueden rozar los límites de lo considerado moralmente aceptable, a la vez que lidia con las consecuencias del trauma.
Para poner a prueba al espectador, Sorogoyen dice hacerlo primero consigo mismo. "Me aburre cuando veo a directores que hacen siempre el mismo tipo de película, creo que para hacer nuestro trabajo bien hay que arriesgar, equivocándonos, pero tratar de encontrar otros lugares", dice a Efe el cineasta, triunfador en los últimos Goya con El reino, una radiografía sobre la corrupción política española.
En su opinión, contar una historia que parte de "tanto dolor" como es Madre es muy arriesgado, al menos en la industria española. "No debería ser así pero cada vez hay más problemas para contar incómodas y esto antes no pasaba, si ves la historia del cine europeo", lamenta.
Lo atribuye a una "infantilización" generalizada de la sociedad actual. "Nos están infantilizando y nos encanta y eso se ve en la cartelera, no es culpa de quienes hacen las historias o de quienes la ven, es algo que se retroalimenta".
Sorogoyen: "Vemos menos anormal una relación de un hombre adulto y una chica joven, que al revés"
Además de las cuestiones morales, el director y guionista pone sobre la mesa el tema del machismo. La literatura y el cine están llenos de historias de amor o seducción entre hombres adultos y chicas adolescentes, pero no viceversa.
"Una de las razones de elegir esa historia es que queríamos colocar al espectador en esa situación, porque al hacerlo te das cuenta de que somos machistas y es increíble cómo podemos ver más factible o menos anormal una relación de un hombre adulto y una chica joven, que al revés", subraya.
La película, que se estrenará en noviembre en España después de inaugurar el Festival de Cine Europeo de Sevilla, es una coproducción francoespañola y ya ha sido vendida a Italia y Francia lo que da buenos augurios a sus productores.
La primera secuencia no sorprenderá a quienes ya han visto el corto, es la misma. "Desde el principio, cuando lo estábamos haciendo, pensé que el corto podía ser el inicio de una película, aunque en aquel momento no lo desarrollé", explica Sorogoyen.
Eso y las ganas de repetir con el equipo, especialmente con Marta Nieto, hicieron posible que finalmente esa idea inicial se hiciera realidad. También otros factores: "después de dos películas grandes de otro género, tenía ganas de hacer algo diferente", dice.
El éxito del corto, ganador de la penúltima edición de los Goya y nominado a los Oscar, entre una ristra de premios y reconocimientos, ha aumentado el interés internacional hacia Sorogoyen y esta película en concreto. "Puede que la nominación al Oscar haya ayudado a estar en un festival internacional como este, también notas que los periodistas extranjeros te conocen, la industria se entera. Los premios son cosas azarosas, pero sin duda es un empujón para una película que tiene vocación internacional", sostiene.
Sobre la escasa presencia del cine español en la primera línea de los festivales internacionales, cree que eso no significa que no haya películas que lo merezcan. "Pero es cierto que las puntas de lanza del cine español no pasan por su mejor momento".