Sánchez ofrece a Podemos responsabilidades fuera del gobierno y una oficina que vigile el pacto

• El presidente en funciones presenta el documento con 370 medidas que se compromete a cumplir si es investido
• Sánchez ha pedido al equipo negociador del PSOE que contacte con Podemos para que se reúnan el jueves 5

Sánchez ofrece a Podemos altos cargos en instituciones relevantes pero no acepta un gobierno de coalición

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha ofrecido a Unidas Podemos un acuerdo programático "de gobernanza" para desbloquear la investidura que incluiría responsabilidades en altas instituciones del Estado fuera del Consejo de Ministros y una Oficina de control para el cumplimiento de este programa de gobierno.

Además, ha pedido al equipo negociador del PSOE que se ponga en contacto con los negociadores de Podemos para que mantengan un primer encuentro este jueves 5 de septiembre y en el que, ha asegurado, se concretará más detalladamente esta oferta.

Así lo ha manifestado Sánchez durante el acto de presentación del documento con 370 medidas, elaborado con la aportación de colectivos sociales, con el que el PSOE pretende conseguir el apoyo de la formación que lidera Pablo Iglesias.

[Lee el documento íntegro con las 370 medidas

Sánchez, que ha invitado a Unidas Podemos a volver a construir la "confianza" entre ambos partidos, ha ofrecido una "triple garantía" del cumplimiento de este acuerdo: a través de una Oficina dependiente del Ministerio de Hacienda, de la creación de sendas comisiones de seguimiento en el Congreso y en el Senado y de otro organismo de fiscalización en el que se implique la sociedad civil.

Fuentes del Gobierno han confirmado esta tarde que los equipos negociadores de PSOE y Podemos se reunirán el jueves por la tarde en el Congreso de los Diputados.

"Altas responsabilidades"

En su intervención, Pedro Sánchez ha vuelto a descartar la posibilidad de un gobierno de coalición con Unidos Podemos pero ha abierto la puerta a "un amplio acuerdo de programa" con la "activa participación" de sus socios en la "gobernanza del país, con altas responsabilidades en instituciones muy relevantes" fuera del Consejo de Ministros en ámbitos como el "fiscal, el jurídico o el energético".

En ese sentido, ha señalado que no quiere "votos gratis" en su investidura y que la oferta, que ha calificado de "generosa", es una fórmula intermedia entre la coalición gubernamental que pretende Unidas Podemos y el gobierno en solitario al que aspiran los socialistas.

A la espera de que se concrete la reunión de los equipos negociadores, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha mostrado su rechazo inicial a la propuesta. En un mensaje en su cuenta de Twitter, Iglesias ha señalado que "la política no puede basarse en la confianza, sino en las garantías" y ha insistido en que "un Gobierno de coalición es la única garantía para llevar adelante las políticas que puedan cambiar la vida de la gente".

Iglesias desconfía de la última propuesta de Pedro Sánchez

Rechazo a un gobierno "compartimentado"

A lo largo de su intervención, Sánchez ha hecho un repaso de los encuentros y desencuentros que ha mantenido en los últimos meses con Unidas Podemos y ha asegurado que el gobierno de coalición que le exige Pablo Iglesias supondría un ejecutivo "compartimentado", en un "momento crítico", ante importantes retos como un Brexit abrupto, una posible desaceleración económica o la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

14 horas - Pedro Sánchez ve en coalición "un camino que no conduce a nada" - escuchar ahora

También ha criticado la postura de Partido Popular y Ciudadanos, a quienes ha vuelto a achacar que no asuman su parte de responsabilidad en el bloqueo político facilitando con su "abstención técnica" la investidura de "un gobierno progresista".

Respecto al documento de 370 medidas, que se compromete a cumplir en caso de ser investido, ha asegurado que "no es un documento cerrado" sino que está abierto al diálogo con "el resto de fuerzas políticas que quieran apoyar un gobierno progresista" y que responde a los "seis grandes retos" que ya avanzó en el discurso de su investidura fallida: empleo digno y sostenibilidad del sistema de pensiones; revolución tecnológica; emergencia climática; plena igualdad y justicia social; el papel de España en Europa; y la consolidación de la estructura territorial.

Dentro de este último capítulo, el presidente en funciones se ha referido al "conflicto de convivencia" que se vive en Cataluña para cuya solución ha propuesto "diálogo" y ha ofrecido a la Generalitat hablar de "encuentro y no ruptura, estatuto de autonomía y no referéndum de autodeterminación, que quiebra la convivencia y sitúa a la sociedad en un callejón sin salida, como vemos en algún país cercano al nuestro".

Pedro Sánchez ha asegurado que no hay "ni una sola razón objetiva" para una repetición electoral y ha apelado a que "ese día 10 de noviembre nos encuentren trabajando en poner fin a los abusos de la contratación temporal, de la derogación de los aspectos más lesivos de la reforma laboral, de hacer sostenible el sistema de pensiones o luchando contra los alquileres desorbitados".

Al acto, que se ha celebrado en la estación de Chamartín de Madrid ante un auditorio de medio millar de personas, han acudido miembros del Ejecutivo en funciones, del Partido Socialista y de la sociedad civil.