'Bezimena', un cuento tan bello como inquietante sobre los depredadores sexuales
- La canadiense Nina Bunjevac nos mete en la mente de un agresor sexual
- Un libro que mezcla cómic e ilustración de una forma realmente original
Muchos de los cuentos clásicos además de entretener a los niños cumpían una función social clave. Por ejemplo, Caperucita y el lobo les enseñaba a no fíarse de los desconocidos. Hoy os recomendamos un cuento para adultos que intenta comprender qué es lo que pasa por la cabeza de los depredadores sexuales para que lleguen a cometer delitos tan terribles. Lo curioso es que utiliza el arte para mezclar imágenes de gran belleza y elegancia, con una historia oscura y siniestra. Un cóctel irresistible y perturbador que hace de este libro uno de los mejores del año.
Nos referimos a Bezimena (Reservoir Books), de la canadiense de origen serbio, Nina Bunjevac. Una mezcla de libro ilustrado y cómic que combina a la perfección una historia muy dura, con la belleza de unas imágenes que se nos quedan grabadas en la retina. Una de las mejores combinaciones que hemos visto de arte y literatura. Y que nos sirve para reflexionar sobre un tema tabú que, por mucho que intentemos evitar, sigue estando ahí.
Una historia en la que cada página, cada ilustración, nos anima a reflexionar, a intentar comprender qué pasa por la cabeza de esos depredadores sexuales que abusan, violan e incluso matan a mujeres, que muchas veces son menores. Y de los que, desgraciadamente, cada vez tenemos más ejemplos en las noticias.
Por cierto, que la primera interesada en comprender por qué esos agresores sexuales hacen lo que hacen es la propia autora, ya que en el epílogo del libro confiesa que ha sufrido dos intentos de violación, uno de ellos cuando tenía quince años.
Esta novela gráfica está basada en sus propias experiencias. Y explica que respeta a las víctimas de abuso que "decidan mantener en secreto su dolor", porque "las comprende". Pero ella ha decidido romper su silencio para intentar evitar más abusos en el futuro".
"Este libro está dedicado a todas las víctimas olvidadas y sin nombre de la violencia sexual. Que encontréis la paz, que encontréis la luz y hagáis disipar la oscuridad que os rodea", asegura Nina Bunjevac en el epílogo de la novela gráfica.
Un joven "de buena familia"
Una de las cosas que suelen repetirse, cuando hay algún crimen sexual, son las declaraciones de los vecinos asegurando que el sospechoso era un buen chico, de buena familia, y que nunca se habrían imaginado que fuera capaz de hacer algo tan terrible. Y justamente así es Benny, el protagonista de la historia un joven como todos que, sin embargo, es diferente.
Su cabeza está llena de pensamientos oscuros que hacen que le resulte difícil vivir en sociedad. Y pronto comienza a mirar a las niñas de una forma muy rara. Al final le resultará imposible relacionarse con los demás, sobre todo con las mujeres, a las que empezará a ver como presas, con sus instintos de depredador. Y al final, nada podrá impedir que salga de caza. Con funestas consecuencias.
Esta novela gráfica también nos ofrece una versión moderna del mito de Artemisa (la diosa griega de la caza, los animales y los partos) y Siproites (un joven cretense que quiso violar a una de sus vestales). Artemisa lo castigo transformándolo en una mujer.
Como decimos, una historia muy compleja en la que la autora se las apaña para mostrarnos la degradación moral y humana de su protagonista, que acaba por no distinguir la realidad de sus fantasías eróticas.
"Mujer sin nombre"
El título del libro (Bezimena), significa "mujer sin nombre" en la mayoría de las lenguas eslavas. Y es que al depredador sexual no le importa quién es su víctima ni cómo es su vida. Se hace su propia imagen sobre ella, la idealiza, suele imaginarse que ella corresponde a sus deseos y solo quiere poseerla a cualquier precio, sin importarle nada más que su propia fantasía sexual.
Destacar también que la atmósfera del cómic se inspira en la de La mujer pantera (Jacques Tourneur, 1942), La trilogía de Orfeo (Jean Coucteau, 1950) y la serie televisiva de culto El detective cantante (Keith Gordon, 2003), historias en las que fantasía y realidad se confunden. Y cuyas imágenes oníricas han inspirado algunas de las más bellas de este libro ilustrado.
Una de las mejores artistas del momento
Nina Bunjevac, una de las mejores dibujantes del momento cuya obra ha sido comparada con la de Marjane Satrapi (Persépolis), Robert Crumb (Mr. Natural) y Joe Sacco (Palestina) por su estilo en blanco y negro en el que destaca el uso del sombreado rayado y el puntillismo.
Ha ganado numerosos premios, como el Doug Wright a la mejor novela gráfica publicada en Canadá (por sus novelas gráficas Patria y Heartless), colabora habitualmente con grandes medios (como The National Post o Le Monde Diplomatique) y, además del cómic, se dedica a la pintura, la escutura y la docencia en Bellas Artes.
En este libro mezcla novela gráfica y álbum ilustrado de una forma tan espectacular como novedosa, dejando los bocadillos en las páginas de la izquierda y las ilustraciones en la de la derecha.
Un libro que os llegara a lo más hondo y al que volveréis cada cierto tiempo para reflexionar sobre los interesantes e inquietantes temas que nos plantea; y para disfrutar de sus espectaculares ilustraciones. Un cuento para adultos realmente fascinante.